Houston, Texas.Días después…La familia se aventura acompañar a Derek, para ver qué resultados arrojaron, los estudios realizados recientemente. El padre de Leah, Brandon, Devin junto al padre Matt, acompañan a la pareja, esta vez no los dejaron solos. Con gracia Derek, musita al oído de su esposa:—Tanta gente, para unos simples resultados amor.—Eres muy querido por todos amor, y además somos ahora una gran familia.—Se me olvidaba. Mi abuelo estuviera muy feliz, siempre quiso tener una familia numerosa—se entristece Derek de la nada diciendo: —realmente el patriarca de la familia Dixon, no es mi abuelo, se me olvida que no soy un Dixon, sino el hijo de Martina.—No te lamentes ahora cariño, eres un Dixon. Tu más que nadie, mereces llevar el apellido, nosotros somos unos recién llegados—lo consuela Leah.—Por sus venas, si corre la verdadera sangre Dixon amor.—Ya Derek, centrémonos en ti y en tu evolución. Estoy muy nerviosa por los resultados.—Y yo más querida.—Voy a llamar a l
Pasaron los días, Derek se prepara física y mentalmente para su nueva intervención, permanece junto con Leah en su lujoso apartamento en Houston, el resto de la familia retornó para seguir con sus labores. Por órdenes del padre, Martina partió hasta Houston para ayudar a la pareja, Derek busca de evitar a toda costa, el mantener contacto con su madre. Sin embargo, Martina se muestra muy ilusiona, con la idea de volver a ver a su hijo caminar.—Ya en un par de días operan a Derek Tina.—Estoy feliz por ustedes y por mi nieto.—Ya verás, que con el tiempo Derek te perdonará.—Es lo que menos me importa en este momento. Tu eres madre Leah y sabes, todo lo que una está dispuesta soportar por un hijo.—Te entiendo perfectamente. Yo por Cameron daría la vida y jamás me separaría de él—mira a Martina ante su metida de pata—lo siento Martina no lo quise decir de modo.—No te preocupes, creo que merezco su rechazo.—Ya no nos torturemos más, y vamos a pasear con el niño. Mientras que Derek tra
Houston, Texas.Ha llegado el día, donde se comprobará si la operación, que le realizaron a Derek dio óptimos resultados. Como siempre la familia está a su lado, principalmente Martina a pesar de la negativa de su hijo, se ha mantenido al pie del cañón y no se ha separado de su lado, ni un solo momento. Todo se hallan muy ansiosos.Derek está sentado en su silla, ya ha pasado más de un mes, desde que le practicaron la operación en sus piernas, no ha podido siquiera pegar un ojo en toda la noche. Ingresan los doctores alemanes, para llevarlo hasta el área de recuperación, allí cuentan con los implementos necesarios, para ponerlo de pie sin arriesgar su integridad.Leah se le pega atrás, y detiene por un momento a uno de los doctores preguntando:—¿Doctor puedo estar presente?—¿Y yo? —musita Martina, mientras los demás están en la sala de espera.—Está bien. Pero, solo Leah pasará junto con Derek, usted señora esperará en la puerta y puede verlo a través del cristal.—Muchas gracias do
Empresas Dixon Seattle.En la oficina de Derek su fiel y eficiente secretaria Jennifer, decide renunciar a su puesto. Se halla, despidiéndose de Derek por última vez.—Jenny dejas la vara alta, ¿Dónde podré encontrar a una secretaria tan eficaz como tú?—Lo siento Derek, pero mi esposo consiguió un buen empleo en Vancouver, y también estoy embarazada.—Me alegro por ti, pero me entristezco por mí.—Ay Derek, me vas hacer llorar.—Tranquila, no es mi intención.—Coloque un anuncio en el periódico, para buscar otra secretaria. Antes de irme, te dejaré en buena compañía.—Ya ves eres tan eficiente. Siempre pensando en todo.—Primero las entrevistaré yo, a las posibles candidatas y una vez que haga el filtro, ya queda en ti contratarla.—Confió en tu buen juicio.—Gracias Derek por la confianza.—Te voy a extrañar—advierte Derek con pesar.*****Al cabo de unas horas, comienzan a llegar las entrevistadas. Pero, hay una que se distingue entre las demás. Una hermosa chica pelirroja, muy sen
Apartamento de Amber.Tocan a la puerta y Amber musita:—Bienvenida.—Hola querida—es Ilse la madre de Savannah quien la saluda.Por los vientos que soplan, Amber será su nueva aliada. Ilse se la había jurado a Leah, simplemente por la gran envidia, que la corroe y no la deja vivir en paz. Cómo en una oportunidad le comento Eiza, se la había ganado gratuitamente de enemiga, sin Leah hacerle absolutamente nada.—Derek Dixon, es más guapo de lo me imaginaba. Es un gusto para mí trabajar a su lado.—Espero Amber, que no te desvíes del plan. Te estoy pagando muy bien—apunta Ilse con arrogancia.—Nunca voy a entender Ilse, ese empeño tuyo en quebrar ese matrimonio. Derek adora a su esposa, te digo que no la tenemos nada fácil.—¿Te has visto en un espejo? Lo hombres matarían por tenerte a su lado. Derek no será la excepción.—Me habías dicho que estaba en silla de ruedas, realmente camina. Y proyecta una virilidad increíble—señala Amber con picardía.—Recuerda lo que hablamos, Amber enfóca
Días después…Luce Leah radiante y muy hermosa, se prepara para salir a modelar, está muerta de miedo, es la primera vez que se aventura hacer algo así. Monique se le acerca en el camerino, para darle ánimos:—Recuerda Leah, eres la protagonista del evento—traga Leah saliva diciendo:—Por Dios Monique, no lo digas de ese modo, que elevas mi ansiedad—se muestra Leah indecisa.—Disculpa no fue mi intención—esboza Monique una sonrisa.—¿Y si olvido todo, y sale mal?—Eso no pasará, confío plenamente en ti.—¡Rayos! —exclama Leah con angustia.Como espectadores están todos los miembros de la familia, al cabo unos minutos ingresa Derek con su madre.—¿Con quién dejaron a Cameron? —pregunta Damon el padre de Leah.—En casa con la niñera.—Tenía ganas de verlo.—No es el mejor lugar para él. Cameron llora por todo—expresa Derek y su madre lo mira de reojos—Es la verdad mamá, Cameron es un poco malcriado y creo que es tu culpa—musita al oído de Tina.—¡Ahora resulta! — exclama Tina sonriendo,
Apartamento de Amber.—Muy bien Amber no es momento para recular, necesito que envuelvas en tus redes a Derek Dixon o de lo contrario…—¿De lo contrario que Ilse? A mí no me amenaces, recuerda que tigre no mata tigre—la mira con aprensión.—No veo que, hayas logrado nada hasta ahora mujer.—Lo que me preocupa ahora saber, es si alguien logro verte. Llegaste demasiado lejos al ir hasta la empresa, no quiero perder mi trabajo.—Para… ¿Cómo que te preocupa ese trabajo? ¿Si tu trabajas para mí?—Como si me pagaras las perlas de la virgen y de paso necesito subsistir. No soy como tu querida, que vives a expensas de los demás.—Espero no me vayas, a salir con una sorpresa de última hora Amber.—Ilse creo que es mejor que te vayas, me hiciste doler la cabeza.—Pero, espera…—la toma Amber por un brazo y la conduce hasta puerta.—Adiós Ilse.—Amber—exclama Ilse con rabia, cayendo en cuenta que sus planes, se están viniendo abajo sin haber iniciado. ¡Qué mujer tan nefasta!Mansión Dixon.Leah s
—Amber a mi oficina ahora—asienta Derek en irritable tono, Amber enseguida se sorprende. Al ingresar a la oficina pregunta:—¿Qué ocurre Derek?—¿Se pude saber qué es lo que te traes con Ilse Parrott?—No entiendo.—No te hagas la desentendida, ayer las vieron juntas salir de la empresa. Te pregunté, ¿Qué hacías con Ilse Parrott? —pregunta nuevamente Derek muy molesto.—Nada Derek, solo vino a buscarme.—Donde está esa mujer, no hay nada bueno detrás.—Créeme jamás haría algo que te lastimara.—Ahora lo entiendo todo. Ilse te sugirió que me conquistaras, ¿no es así?—Derek por Dios, me sonrojas.—Es mejor que digas todo, o sino ahora mismo te echo de patitas en la calle, o lo que es peor te puedo meter presa por daños y prejuicios, ¿escoge, que te parece mejor?—Basta Derek me asustas.—Aún no lo hago querida Amber, por defender a mi familia soy capaz de cualquier cosa.—Derek lo siento. Si quieres me voy, tampoco son necesarias las amenazas.—No me evadas y habla te lo ordeno.—Tiene