A la mañana siguiente, se levanta Ilse muy temprano, con la información que tiene en su cabeza, referente al origen de Leah, su rostro se ilumina, debido a que presume, que por fin la vida le sonríe un poco, en medio de tanto caos para ella.Por otro lado, le llama la atención una nota que está en la mesa, es de su hija Savannah, quién prefirió seguir a sus instintos y se fue a vivir definitivamente con Patrick, dejando a Ilse sola a la buena de Dios, en aquel pequeño apartamento, que tendrá que pagar sola como pueda.Se llena inmediatamente de coraje y hurga en su cabeza, llegando a la conclusión, que debe de buscar a un millonario otoñal, que la saqué de apuros. ¿Lo logrará?Toma el teléfono, para dar con el paradero de Savannah, pero ésta había apagado su celular, para evitar ser molestada por su madre.*****Mansión Dixon.A Derek y a Leah, les llega una invitación para asistir a un cóctel, en una fina recepción en un reconocido club en Seattle. Recibe la invitación Derek con much
Mansión Dixon.La institutriz de Leah se halla ayudándola, con la finalidad que deje de lado, sus miedos y asuma su posición, en la sociedad como toda una Dixon.El cóctel será oficiado, en horas de la tarde, Leah se arregla detenidamente y Jessica la está asesorando con mucho detenimiento.—Tranquila Leah, que todo estará bien. Sólo disfruta, es un simple cóctel.—Igualmente estoy aterrada, ven con nosotros Jessica.—No puedo Leah, tengo un compromiso y de paso, esas invitaciones las otorgan con antelación.—Está bien. Ayúdame con el maquillaje, quiero verme increíble y que Derek, se sienta orgulloso de mí.—Derek te adora y, si está orgullosísimo de tenerte como esposa.—Mira estás alhajas Jessica—le muestra Leah.—Combinan perfectamente con el vestido—apunta Jessica muy sonriente.Por otro lado, Tina está junto con Derek, conversando muy cerca al Jardín:—Leah está muy nerviosa—señala Derek, riéndose con sutileza de su esposa.—Es normal hijo, es su primer evento elegante.—Leah es
Al llegar a casa, Derek se excusa con esposa:—Me disculpo nuevamente contigo querida. No debí haberme apartado de ti, pronto iremos al atelier de esa mujer, para agradecerle lo que hizo por ti.—Está bien Derek—responde Leah, con mucho cansancio encima.Su tío y el padre Matthew. Se aproximan a ellos y escuchan, lo que Derek dice, por lo que pregunta el padre Matt:—Hola hijos, ¿a quién debes agradecer hijo?—A Monique Moussier.—¿Por qué? —exclama el padre con mucha admiración.—El cóctel al que asistimos, era parte de una degustación del nuevo restaurante de Monique y su esposo Ralph. Allí estaba la pérfida de Ilse, se quiso pasar de lista con Leah, intento humillarla. Pero, Monique lo impidió al percatarse de sus malas intenciones…— Derek comienza a narrar los pormenores de los hechos.Al rato, el tío Brandon les dice:—Debemos de hacer algo con Ilse, creo que debemos poner una orden de restricción en su contra, esa mujer es un peligro para Leah.—No entiendo, porque me tiene cora
Muy temprano sale el padre Matt y va directo a reunirse con el monseñor, para confesarse y también para conversar muy seriamente con la autoridad eclesiástica, con el firme propósito que lo ayude, a encontrar una respuesta a una gran interrogante que lo atormenta. Al llegar al recinto se persigna y va directamente a la oficina del monseñor.—Buen día monseñor.—Buen día padre Olsen es bueno verlo. Dios lo bendiga, supe que está haciendo una hermosa labor con uno de sus ahijados, ayudando a personas discapacitadas, Dios los bendiga grandemente.—Muchas gracias.—Lo noto muy preocupado, ¿Pasa algo?—Si mucho. Si no fuera de vida o muerte, créeme no hubiese venido a tocar el tema.—Me inquieta su tono Padre Olsen, ¿De qué se trata?—Se trata, de algo relacionado al secreto de confesión. Tengo que revelar uno, para poder unir a una familia y también quiero ayudar a un gran amigo, para que pase sus últimos años en familia.—Eso es muy grave. Usted más que nadie sabe, que no se puede quebra
Dos días después... Al salir de sus clases del instituto Leah, decide ir con su amiga Eiza al atelier de Monique, para que tomen las medidas de su vestido. Insistiendo su amiga:—Leah es mejor, que pospongas esa boda, mira está muy hinchada y si se te adelanta el parto. Aparte mira tus pies—señala Eiza.—Eres muy pesimista. Ni lo mandé Dios Eiza, quiero que mi hijo, nazca en el momento que le corresponda.—No se Leah deberías pensarlo mejor, podemos hacer el vestido cuando estés más relajada. Sigo pensando que es una locura que te cases ahora.—Ya Eiza—protesta Leah.Al caminar hasta el estacionamiento, Leah siente un severo dolor en la parte baja de su vientre. Eiza se asusta y le hace seña con la mano a Tobías, para que se acerca con el auto, hasta donde ellas aguardaban.—Ya ves Leah, tienes que guardar reposo.—Oh Dios mío, puedes que tengas razón.—¿Qué ocurre muchachas? —pregunta Tobías.—Ayúdame Tobías, para subir a Leah en el auto, le cuesta mucho trabajo caminar. No se sient
Entra Derek a la habitación de Leah, el doctor había restringido las visitas.—Hoy me quedaré contigo querida.—No Derek ve a casa, dormirás muy incómodo.—No me importa Leah, quiero estar contigo, Mark también se quedará.—Con más razón, que pena con él Derek.—Ya está decidido. No reniegues más Leah.—¿Se fueron todos?—Sí, mi padrino se fue con los demás.—Derek tengo mucho miedo de perder a mi hijo.—Eso no pasará cariño, aquí estás siendo muy bien atendida por el doctor Hamilton. También pospondremos nuestra boda, hasta después que nazca Cameron. No permitiré que nada malo te pase Leah.Rápidamente toma Derek sus manos, para brindarle un poco de consuelo a su esposa.—Como quisiera estar, posada en tu pecho en este momento.—Cuando el médico te autorice el alta, te prometo que mi regazo se convertirá en tu almohada.—Gracias Derek, eres único. Hasta pareces de mentira.—Soy tan real, que muchas veces cometo errores.—Cariño te repito, no es necesario que te quedes dormirás muy ma
Al día siguiente.Llegan Leah y Derek a la mansión en compañía de Mark y el otro chófer. Derek ha decido que trabajará por ahora, desde su despacho en casa, para mantener controlada Leah, evitando cualquier inconveniente con su hijo.Al llegar Martina y el padre los reciben muy emocionados. Tanto así, que habían olvidado que el señor Austin a un descansaba arriba.—Te ves muy bien Leah. Ya te voy a preparar un nutritivo desayuno. Estaré al pendiente de ti mientras Derek está en la empresa.—No te preocupes Martina, no iré a la empresa por estos días, que haré cargo del cuidado de mi esposa.—Como quieras hijo.—Lo que sí por favor, regálame un vaso de agua tengo mucha sed—solicita Derek.—Voy enseguida Derek.Leah al igual que Derek, había llegado en una silla de ruedas, por lo delicado de su embarazo. Se le arrima y le dice:—Tina es muy atenta contigo cariño, quién no la conozca diría que es tu madre.—Ja, ja, ja, tú siempre tan ocurrente mi vida. Mi difunta madre, era aún más sobre
Los días pasan con mucha tranquilidad, Leah continúa con su reposo, mientras que Derek permanece a su lado al pendiente de los dos. Ya está próxima en traer al mundo a Cameron, la ansiedad de ambos entra en aumento cada día, por tener a su pequeño entre sus brazos.—Toca Derek, patea muy fuerte—sugiriendo Leah a su esposo, que toque su vientre.—Será muy activo nuestro Cameron. Desde mi silla, le enseñaré a jugar fútbol.—Derek debemos contemplar, la posibilidad de ir a ver al nuevo doctor, el que llegó desde Alemania, antes que se vaya del país—propone Leah.—Luego Leah ya te dije. Mi prioridad ahora son mi hijo y tú. Acércate—demanda Derek con la intención de darle un apasionado beso.*****Oregón.Por otra parte, el señor Austin, había salido de la Mansión, aquella vez que fue con el padre Matthew, sin ser visto por Derek. Desde ese momento, su corazón se conmovió al describir que tiene un nieto tan joven y vigoroso, a su vez siente una profunda tristeza, al hallarlo en una silla d