*—Callen:
La idea de Chloe era muy buena, pero sugerir que de paso pidieran ayuda a su rico padre, estaba fuera de los límites y viendo que no tenían presupuesto para tal cosa, tenía que declinar la idea.
—No podemos —murmuró Callen.
—Quieres que la tienda crezca, pero no quieres arriesgarte, Callen —señaló Chloe y Callen se encogió de hombros. No es arriesgarse, es saber qué paso dar. Se había arriesgado varias veces y no quería seguir fracasando más. La próxima decisión que tomará, debía de ser ya la definitiva.
Aun así, Callen no le respondió, pero observó que Chloe no iba a dejarlo ir. Se le había olvidado que la chica era más que insistente, era un grano donde no le daba el sol. ¿Qué había estado pensando al dejarla trabajar allí?
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*—Sebastián:Tamborileó los dedos sobre la mesa de aquel restaurante en donde se encontraba esa noche.Estaba esperando a Dante para que se reuniera con él para tomar la cena. Después de salir de la tienda de Callen, Sebastián había contactado a su amigo para que hablaran sobre lo que estaba pasando con su hija, pero Dante se hizo el difícil. Durante el resto de la tarde, Sebastián estuvo detrás de este hasta que al final, Dante decidió dar la cara. Era obvio que no quería verse con él por lo que pasó. Dante desde el inicio supo lo que Chloe ocultaba y hasta la ayudó para entrar a la tienda.Lo que Sebastián no entendía era la obsesión de su hija por la tienda o por Callen, sea como sea, la cosa era que estaba obsesionada con ambas. Ahora entendía porque había dejado ciertas cosas de lado. La prioridad de su
*—Sebastián:Había regresado a casa y esperaba a Chloe sintiéndose muy nervioso. Su nerviosismo le había hecho recorrer su casa desde arriba abajo, esperando el momento en que su hija apareciera y le reclamara por lo que hizo en la tienda con Callen.Sebastián miró la hora en el reloj de pared de la cocina. Chloe normalmente llegaba a las nueve, pero eran casi las diez.Extraño.¿Debería preocuparse?Sacó su móvil del bolsillo del pantalón de pijama que tenía para marcarle a su hija en el mismo momento que escuchaba la puerta abrirse.Rápidamente, Sebastián fue al encuentro con Chloe, quien estaba caminando hacia las escaleras para ir hacia su cuarto. Sebastián la interceptó antes.—¡Chloe! —exclamó.Su hija, alta y con el cabello oscuro como él, pero con l
*—Callen:No había dormido bien.Las preocupaciones a las que se enfrentaba, agregándole ahora la idea de Chloe, habían hecho mella en ella anoche. No pudo conciliar el sueño, pues no había dejado de pensar en las posibilidades.¿Podría recobrar sus ingresos si iba al bazar y vendía su mercancía?¿Podría esto ayudarle a subir las ventas?Las preguntas iban y venían, y Callen no estaba segura, pero tampoco quería perder la oportunidad, y a la misma vez, no quería arriesgarse.Callen bufó mientras caminaba hacia la entrada de su tienda.No sabía con quién consultar. Sus hermanos no podían ayudarla a tomar esta decisión, eran menores de edad y aun no sabían del todo sobre la vida en sí, así que los había descartado. También, Callen no quería m
*—Callen:El café que había decido preparar para el señor Edevane y ella estaba listo.Olvidándose de las conclusiones a las que había saltado mientras esperaba el café, con delicadeza, sirvió el líquido en la taza del señor Edevane y tomó la bandeja, se lo serviría primero y luego vendría a buscar el suyo. Fue hacia su oficina, pero ni bien empujó la puerta, se topó con Sebastián, con el cual chocó de bruces con ella haciendo que la bandeja y todo el contenido de esta, terminara encima de Sebastián, el cual saltó hacia atrás mientras aullaba de dolor. Se había quemado con el café.Callen dejó caer la bandeja mientras saltaba hacia su ayuda. Podía ver la mancha de café en su camisa inmaculada en su vientre y parte de sus pantalones. Tenía que buscar algo frío p
*—Callen:Sebastián quería comenzar de nuevo, ofreciendo su mano hacia ella y ya que lo pedía con tanta amabilidad, no debía de negarse a ello.Tomó la mano que este le ofrecía y la estrechó. Sus manos eran grandes y se sorprendió de que no eran suaves. Extraño, ya que el señor Edevane era un trabajador de oficina y la textura de sus manos parecía como si hubiera trabajado en el campo.—Callen Townsend —se presentó Callen una vez más y Sebastián soltó una carcajada.—Tienes un nombre masculino —señaló este y Callen frunció el ceño. Así que lo había notado.—Mi padre pensaba que iba a ser un chico, pero cuando mamá dio a luz, se llevó la sorpresa de que no lo era al no tener un pene —le informó Callen tomándolo en forma
*—Sebastián:Su mirada no se desvió hacia otro lugar que no fuera el hermoso rostro de Callen mientras la dejaba dirigir la propuesta ofrecida.Habían comenzado con mal pie, por lo cual, Sebastián había venido a la tienda para comenzar de nuevo y para pedirle ayuda con respecto a Chloe. No sabía qué había pasado con los padres de Callen, pues ella no los mencionaba y él no iba a investigar sobre ello, pero algo que había notado es que estos no estaban en el cuadro familiar y había sido Callen quien parecía haber criado a sus hermanos, así que, ¿quién mejor que esta para que lo ayudara?Sebastián la miró con firmeza, esperando su respuesta pacientemente.Después del pequeño accidente, Sebastián le había confesado a Callen que deseaba su ayuda con Chloe. La mujer se había quedado mir
*—Sebastián:No le gustaba mencionar su vida privada a nadie que no fuera de su circulo cercano, pero lo había soltado a Callen porque creía que, con esto, la misma entendería un poco su situación. Solo que no esperaba que esta se viera tan sorprendida y curiosa por saber más.Entendía que quisiera saber de más como cualquier otra persona, pero solo podía darle pinceladas sobre su vida privada. Odiaba que la gente tuviera sus narices metidas en la misma sin saber que traer las vivencias de su vida que le marcaron, era muy doloroso para él.—Entiendo —solo comentó Callen y Sebastián le agradeció en silencio, ya que la misma no presionó por saber más. Callen seguía sorprendiéndole de cierta forma. Era tan educada y a veces tan grosera.Sonrió.Otras mujeres habrían querido que Se
*—Sebastián:Esperó por Callen quien parecía pensar detenidamente sobre cual consejo iba a darle para recuperar su relación con su hija. Podía buscar ayuda de otras personas, pero algo le decía que con la ayuda de Callen, quien parecía ser cercana a Chloe, podría salir de este aprieto y volver a estar con su niña como antes.—Habla con ella —comenzó a decir Callen—. Sin discutir, solo hablar —agregó—. Escucha porque desea estudiar dicha carrera —sugirió la chica sonriendo—. Estuviste una vez en sus zapatos, ¿no? —le dijo dándole una mirada y Sebastián sonrió. Si, estuvo allí y sufrió con creces por sus decisiones.Sebastián asintió y Callen volvió a sonreír.—Entonces escúchala —pidió Callen—. Siempre f