Zahir no podía soportar tanto cinismo de Romina y le dice:

—¿No pudiste tener ni siquiera un poco de gesto por Luna después de todos los años que ha trabajado para ti?

—Zahir, creo que no es de tu incumbencia hablarme de lo que debo o no debo hacer ¿ok?

Romina termina de contestarle a Zahir y enseguida voltea su mirada hacia la señora Alma y le dice:

—Bueno querida amiga ya debo irme, pues tengo cosas que hacer

Se levanta, le da un beso y un abrazo a Alma, luego observa a Zahir y le dice:

—Por cierto, querido, te espero mañana a las ocho de la mañana ¿ok? no faltes que tendrás dos grabaciones

Zahir no soportaba la hipocresía y el cinismo de ella y le dice:

—Ok Romina allí estaré adiós —Se despide de ella

Romina se marcha y enseguida Zahir se sienta en el sofá con expresión de molestia y preocupación, La señora Alma se da cuenta y le pregunta:

—Hijo ¿qué te sucede? ¿porque estás así?

—Mamá, es que no puedo entender como Romina pudo permitir la muerte de Luna, porque ella