El insomnio que poseía Katherine era notable, habían pasado más de cuatro días que no podía conciliar el sueño. Había intentado de todo, tomar té, medicamentos e incluso se hizo ella misma un conjuro para intentar dormir, pero nada le funciono. Su cuerpo se encontraba tan casando que ni siquiera intentaba levantarse de la cama, Katherine simplemente cerraba sus ojos intentando así poder dormir, pero no podía. Aquel mal presentimiento que había comenzado a crecer en ella ocasionaba que estuviera en alerta en todo momento, era como si hubiera un peligro que estaba a punto de llegar.Noah y Aarón, eran quienes se encargaban de seguir con la rutina que normalmente Katherine hacía como monarca, también la vigilaban a ella para que no se esforzara con su poder intentando dormir. Brunilda luego de terminar su turno de explorar el territorio en donde se encontraban iba a visitar a su amiga en silencio, quería que Katherine supiera que estaría allí para ella. Los mellizos también se encontraba
Aquella simple palabra había ocasionado que la Diosa Roja tuviera una visión, una en donde podía sentir que quizás Katherine podría morir pronto y ella no podría hacer nada. Pero sabía que los mellizos harían lo imposible para salvar a su madre, aunque la deidad roja quisiera mostrarle una parte del futuro a Katherine, no podía. Sabía que las cosas podrían cambiar si les mostraba aquella visión, por lo que opto mostrarle el peligro que se avecinaba.― Tienes que resistir un poco más… ― Los ojos de Katherine se encontraban húmedos ante el enorme cansancio que poseía en su cuerpo, sentía un agotamiento tan grande que quería desmayarse en ese momento, pero había algo que lo retenía. La deidad roja por dentro hubiera deseado querer esperar más tiempo para que Katherine se recuperara, pero el tiempo era corto y sabía que luego que le mostrara aquella visión ya no podría ayudarla más.Lo que pasaría a partir de ahora sería el crecimiento para cada uno de ellos, y tenían que hacerlo sin ning
“Nunca pensé en llegar a querer tanto a una persona hasta que llegaste a mi vida, recuerdo que fue de una manera inesperada y que lo único que quería era que estuvieras bien sin importar mi seguridad. Tus ojos azules como el cielo me miraron con inseguridad y cierto temor, y no te culpo. Si yo estuviera en tu lugar, también sentiría miedo de un ser humano, una raza que en muchos casos solo destruye sin pensar en las consecuencias y que a lo que le tiene miedo lo intenta desaparecer.Sé que unos humanos mataron a tus padres biológicos, y que estuviste solo por mucho tiempo en el bosque, intento sobrevivir, hasta que Dominik te encontró y te dejo quedarte en su manada. Y no sabes cuánto agradezco haberte podido conocer, la conexión que sentí hacia ti comenzó a crecer aún más con el tiempo que pasábamos juntos, sentía que el destino nos había colocado en el mismo camino para estar juntos.Y antes que me consideras como una madre yo ya te sentía como un hijo, el verte sonreír ante mi lleg
“El cómo nos conocimos fue de la peor manera, ambas estábamos sufriendo y necesitábamos ayuda. Sé que en ningún momento pudimos mantener una conversación ante la intensa vigilancia que Edgar había colocado en aquel momento, pero me alegro saber que al menos tú me estabas cuidando mejor que los demás.Sentía que podía confiar en alguien, aun cuando estaba sufriendo en manos de Edgar. Cuando me enteré de que habías podido escapar de la cabaña había estado deseando que buscarás ayuda para poder salir de aquel infierno y gracias a ti pudieron encontrarme, de verdad no sabes cuánto agradezco que hayas podido entrar a mi vida.Sé que fue muy duro vivir en la manada de Diana, te maltratan y no tenías libertad, querías salir con tu hermano de ese infierno, pero Edgar le arrebato su vida. Y a ti te quito tu voz...Pero aun cuando pensabas que ibas a estar sola sin una manada, preferí que te quedarás con nosotros, sabía que aquello te alegraría, además era una manera de volverte el favor que m
“Si te soy sincera siento que no he sido el mejor ejemplo para ti, sé que yo misma te busque y te estuve cuidado por meses, pero no sentía ningún respecto o cariño tuyo hacia mi persona. Quizás es complicado para un niño de tu edad pedirle que te demuestre lo que en verdad siente, pero pensé que si confiabas en mí eso cambiaria y me verías con otros ojos. Pero nada resultó de esa manera...Y no te culpo...Sé que tú estabas buscando un mejor ejemplo que te pudiera entender, cómo lo eran; Emily, la cual estaba al pendiente de tu transformación para poder ayudarte. Con Noah podía ver qué tenías una notable conexión, estoy segura de que lo veías como un gran amigo (y lamento habérmelo llevado...), y él siempre estaba dispuesto a ayudarte en todo.Pero con quién tenías una gran conexión era con Dominik, veía como lo mirabas con admiración y escuchaba algunas veces como mencionabas que querías ser como él. Y al final de la lista estaba yo, la cual me buscabas solo cuando lo necesitabas y
La tensión en el ambiente era notable, todos se encontraban alterados ante la orden que su Luna había decretado. Las mentes de muchos estaban en blanco, querían saber quien les atacaría. El sonido de las rejas de metal centrándose con fuerza sonaba en todo el castillo provocando un fuerte eco ante el silencio que se había formado, los más débiles se encontraban protegidos en el sótano junto con los niños que sentían un miedo a lo desconocido.Todos en la manada tenían libre elección de pelear en una batalla o no, pero la mayoría estaban dispuestos a morir salvando a su propia gente y obedecer las órdenes de su Luna, quien los había salvado y ayudado en muchas ocasiones. Muchas personas se encontraban en grandes grupos en zonas del castillo que eran vulnerables o que eran entradas muy visibles. Brunilda cargaba a Katherine en forma nupcial para moverse más rápido hacia la habitación que su Luna quería ir, aunque Katherine quisiera hacerlo por su cuenta aún se sentía débil, y tampoco q
Todos esperaban de manera ansiosa que aquella criatura rompiera de una vez por todas la reja para comenzar la pelea, todos estaban preparados para lo que se avecinaba, algunos miembros de la manada habían llegado al lugar y ya tenían en mente que posiblemente morirían.Pero Brunilda cargaba a Katherine entre sus brazos llevándola a la sala de estar, todas las miradas se dirigieron hacia su Luna, los cuales la miraban sorprendidos porque pensaron que no estaría en el medio de la pelea. Y mucho menos sabiendo que se encontraba débil, pero entre todas las miradas habían cuatro de ellas que la miraban con preocupación.Ellos no querían que ella estuviera allí…Katherine podía sentir aquella preocupación por parte de Aarón y Noah, también de los mellizos que al solo verla allí sintieron un aumento de adrenalina correr mucho más rápido por sus cuerpos al saber que pronto entrarían al castillo. Los mellizos miraban a su madre con un sin fin de emociones que ella podía entender, pero Katherin
El cuerpo de Katherine estaba débil, y ante aquella consecuencia cayó al suelo, las visiones habían terminado, pero le habían consumido tanta energía que se había caído luego de haber tenido la última visión con Atha. En el momento en que Katherine cayó al suelo el hechizo también lo había hecho, aquella barrera carmesí casi transparente había desaparecido. La Antigs sentía que en cualquier momento caería desmayada, su frente se frunció al sentir un vacío nostálgico dentro de ella, pero también un dolor en todo su cuerpo.Noah corrió con rapidez junto con Aarón hacia Katherine, Brunilda también estaba cerca y todos estaban preocupados. Aunque los mellizos se querían acercar a su madre, las criaturas comenzaron a abrir la reja, ya estaban cerca de su cometido. — Katherine, ¿Que sientes?… — La visión de Katherine se encontraba borrosa, solo podía mirar la silueta de las tres personas que tenía al frente, pero la voz de Noah la reconfortaba. — Tienen un pentagrama azul en su cuello… De