–No voy a firmar ese papel. –Le advirtió a Kevin. Afortunadamente Sebastián estaba junto a él en el momento correcto y podía leer el documento que se había encargado de armar para formalizar todo.– No soy un cazafortunas y tampoco quiero prestarme para falsos rumores.
–Drew, todos aquí sabemos que no lo eres. Los deseos de Emily fueron claros, lo primero que quiere que hagas es que busques un buen equipo de seguridad que los proteja a ti y a tu hermano.
–Kevin, yo no creo…
–Ella confía ciegamente en ti. –Lo interrumpió mirándolo fijamente. Era irónico, le había pedido muchas veces que confiara en él y ahora que lo había hecho resultaba complicado acceder a ello. – Mi
–Si quieres a tu mujercita será mejor que vayas por ella al mismo hotel en el que la citó Helena. Acabo de dejarla en recepción y no creo que tenga dinero para alquilar una habitación y esperarte allí…Le dijo Henry Hammil a través del teléfono sin esperar que le pudiera contestar o pedir más indicaciones.Lían abandonó de inmediato la reunión en la que se encontraba y corrió hasta su auto. Conduciría por sí mismo hasta dicho hotel y se encargaría de asegurarse que estuviera bien.Al llegar a recepción la encontró sentada en uno de los sofás para la espera del público en general. Lo primero de lo que se cercioró fue de que estuviera sola y de que no pres
Helena volvió a casa tras varios días de ausencia.Arrastró su maleta hasta la habitación que le pertenecía y empezó a desempacar de mala gana. Su madre se unió a ella tras breves momentos de soledad y le preguntó sobre lo que había pasado en sus días de ausencia.Armando había salido de viaje apresurado y ni siquiera le había contado lo que sucedía. Creyó que su hija podría informarle cuál había sido la razón pero no obtuvo más que palabras cortas y gritos de frustración de su parte.La puerta se abrió y Armando ingresó sin previo aviso, cerrando la maleta que todavía contenía algunas prendas y cosas dentro para luego arrastrarla po
La misma mujer de limpieza la despertó al día siguiente cerca de las siete de la mañana. Removiendo su cuerpo entre las sábanas con suma delicadeza.–Disculpen señores, la señorita Dunhee va a acicalarse para salir con el señor Hammil ¿Podrían darle un poco de privacidad y al menos juntar un poco la puerta?La orden tan impropia fue efectiva. Uno de los guardias entrecerró la puerta de mala gana y dejó apenas una ranura al descubierto.–Buenos días señorita Emily, el señor Hammil dice que tienen que salir a las 9. Me ha pedido que le entregue este vestido y que se arregle para visitar a un par de personas.El vestido que le hizo llegar era
–Más te vale tener un buen comportamiento, trataré de terminar rápido la reunión para poder ir a almorzar algo que se te antoje. –Emily sonrió. A diferencia de la primera vez en esos momentos tenía dibujada en el rostro una sonrisa de oreja a oreja, llena de bravata y confianza. Henry supo que tenía que tener cuidado con esa personalidad bipolar que tenía.––No prometo nada. Me querías contigo ¿No es así? Pues ahora te aguantas el paquete completo. ¿No estabas muy emocionado al comienzo de este carácter que tengo?–Me encanta, pero sigo enfadado contigo por haber escapado.–Ay, qué mal me siento. –Fingió poner un rostro afligido que resultó en un gesto
Liam Dunhee estaba despierto y al parecer más repuesto. Lo primero que hizo cuando abrió los ojos fue mandar a llamar a Lían y a Drew, quienes no dudaron en ir hasta allá, él último no supo cómo mirarlo a la cara en cuanto llegó a estar frente a él.–Henry secuestró a Sofía y Emily se fue con él a cambio de que la dejara en libertad. –Explicó Lían poniendo en contexto a su padre. Le había contado casi la mayoría pero había omitido unos detalles importantes como que Sofía estaba embarazada, que Kevin había llegado a darle una herencia que curiosamente él tenía bajo su poder en esos momentos. ––Ella estuvo aquí hace unos días. Quería consolarla pero por alguna r
Nadia llegó a dejar lista la cama de Emily, para su buena suerte Henry no había cumplido con la amenaza de hacerla dormir a su lado por alguna extraña razón y tampoco había vuelto a visitarla a su habitación luego de regresar de almorzar.La mujer acomodó un par de almohadas y se acercó a extender la pijama dejando un pequeño papel doblado bajo él. Se acercó de forma sigilosa y le dedicó unas palabras antes de retirarse.–Drew te ha enviado una pequeña nota que podrás encontrar debajo de la pijama, procura guardar bien ese papel para que nadie lo encuentre. Descansa bien querida, buenas noches.Emily obedeció las instrucciones y tal como lo indicó Nadia, halló una carta
Emily despertó a las 3 de la mañana a causa de una pesadilla. En sus sueños vio como Drew, Lían, Sofía y su padre se alejaban en un tren sin destino perdiéndose entre el horizonte, lejos de ella. Para siempre.No había ruido fuera de su cuarto como comúnmente oía, al parecer, siendo tan entrada la noche no imaginaban que despertaría y saldría de la habitación como era el caso. Bajó las escaleras y oyó a lo lejos quejidos emitidos por una voz que parecía conocer.La luz del suelo la guió hasta una habitación encendida a tan altas horas de la madrugada. Se escondió tras uno de los relojes ingleses enormes y captó con sus propios ojos el merecido que tanto había soñado para su ex mejor amiga, Helena, aunque
–Henry Hammil los engañó. Los que dijeron ser dueños del local nunca tuvieron intenciones de construir un centro comercial porque el verdadero dueño era él.Drew y Lían escuchaban atentos el informe de Richard, no habían podido separar un momento para recibir las noticias con tranquilidad, por lo que no tuvieron mayor opción que pedir explicaciones dentro del auto que los llevaría hasta el almuerzo con los Bernner.–Ya tenemos dos cargos suficientes como para tenerlo al menos 20 años en la cárcel, por el secuestro de Sofía y la estafa que les hizo.–Nadia no me ha vuelto a llamar. –Comentó Drew con exasperación––Tranquilos, te