Lucas llamó al médico mientras Sofia abrazaba el torso de Ashley, con la cabeza apoyada en su regazo. Ashley acarició suavemente su cabello.

Damián y Lucas estaban junto a la cama mirando el estado desaliñado de Sofia. Era obvio que había tenido un sueño bastante malo.

Lucas odiaba esto. Catrina a menudo tenía pesadillas y él siempre la consolaba. Le duele saber que no puede hacer nada para detenerlos. No quería que Sofia pasara por este dolor de pesadillas.

—Él está bien —murmuraba Sofia para sí misma.

Ashley trató de preguntar por el bebé, pero Sofia se negó a responder.

Ya no lloraba, pero sus ojos tenían una mirada lejana como si no estuviera con ellos.

Estaba a punto de amanecer cuando el médico entró en la habitación.

Sofia no impidió que le hiciera un chequeo. Se quedó allí tumbada en silencio mirando el techo. Cuando el medico terminó. Ella sonrió mirando a Ashley:

—Felicidades, esta embarazada —informó el médico y Ashley tapo su boca mientras lágrimas de felicidad se acumulab