—Mamá no quiso verme ¿Ya no me quieren? — preguntó Lily con tristeza. Xander se agachó frente a la niña, tomando sus pequeñas manos en las suyas con ternura. — Oh, cariño. Mamá, solo estaba muy cansada por el viaje. Y claro que te queremos mucho, eres nuestra princesa. Xander miró a Juliet, busca
— Lo único que me dijo fue: que lo encontró el día que iba de camino hacia la manada estirpe salvaje a visitar a su familia, y según la corta explicación que me dio es que, su destinado es un integrante de la manada llamada espíritus errantes. De repente, una conexión mental con su delta, interrum
—Si me dejas por ella, tendré que vivir sola eternamente porque nadie querrá a una loba marcada por un alfa—, murmuró entre sollozos y el reflejo de la luna en la ventana pareció ser su única compañía en ese momento de desolación. El temor a perder a Xander, a vivir en soledad y rechazo, la consumí
Billy aceptó la orden de Xander, dispuesto a arriesgarse para asegurar que Isa estuviera a salvo y se acercó al coche envuelto en llamas, pero antes de que pudiera intentar algo, notó que varios vehículos se detenían en la carretera y un grupo de personas salieron de sus autos y comenzaron a llamar
—¿Por qué rayos saliste a esta hora? —le reclamó furioso buscando respuestas. Isa, sin dejarse amedrentar por la furia de Xander, dejó escapar una risa sarcástica. —¿Y cuál es la hora perfecta para salir?, ¿eh? —respondió Isa con irritación. El aliento de Isa creaba un humo blanco en el aire deb
—¿Lo harás? ¿La vas a rechazar por mí?Esta pregunta resonaba en la mente de Xander y Juliet lo veía esperanzada de que le dijera "sí, amor lo haré", le reprendió Orión muy furioso.
—Te acabo de castigar y vuelves a cometer un error mucho más grave. Dejaste tu auto en medio de la carretera, envuelto en llamas —, la regañó Ranor acercándose a ella. —¿Cómo vas a justificar que sobreviviste a un accidente como ese, o vas a dejar el show de ser modelo famosa y te vas a concentrar
Xander se encontraba en el mismo lugar del bosque que había estado antes, y vio como en vez de irse, Isa se quedó a su lado y sonrió ladino al verla indecisa. —Sabía que era imposible que no quisieras estar conmigo, y aunque digas que quieres rechazarme, sé que me deseas tanto como yo te deseo a ti