—De acuerdo —asiente—. Pero solo por si acaso prepara tu pasaporte, por si debes escapar del país.Los dos sonreímos, aunque el nerviosismo se sienta en el aire.—¿Cuándo es que te vas? ¿Hoy?—No, debo esperar unos días. —Suspiro—. Julia no consiguió que él aceptara la fiesta que quiere organizar pa
AlecEl trabajo es algo que siempre me ha distraído de cualquier preocupación, siempre ha sido algo que calma mi ansiedad por más estresante que sea la situación personal que esté viviendo. Pero esta vez no sé qué me ocurre, no paro de ir al baño a vomitar. Incluso he enviado al mensajero a que me c
Sacudo la cabeza y me froto el rostro con las manos. La enfermedad solo hace que piense en tonterías, que piense más en Aria y en el hecho de que su saco está perdiendo el calor. No me gusta que esté perdiendo el calor. Apago todos los equipos que estoy utilizando y sucumbo al insano y desesperado
AriaUnos toques a mi puerta son los que me hacen abrir los ojos e impiden que por fin descanse. Me ha costado la vida entera el poder cenar la ensalada que me preparó Jackson, pero por suerte no la vomité y planeo que esto siga así y por eso quería dormir.Vuelven a tocar la puerta, así que, de mal
Después de empacar algunas cosas personales más en mi maleta, me pongo mi mejor abrigo, el gorro y otra mascarilla del paquete que Stacy dejó en la mesa. Antes de irme decido tomar una para el señor Elwood. La va a rechazar, yo lo sé, pero debo estar prevenida.—¿Vas a irte? —me pregunta Stacy salie
Alec Sin decir una sola palabra, observo cómo Aria me ayuda a desvestirme para meterme en la bañera que me preparó, así como yo hice con ella. Debería decir que no me siento tan mal como aparento, mucho menos desde que ella llegó, pero no quiero decir absolutamente nada para no arruinar el momento
AriaEl baño se termina cuando noto que la temperatura del señor Elwood ha bajado un poco y que lo veo menos enrojecido. Me alegra mucho verlo mejor y mucho más que, a pesar de sentirse mal, también tiene cuidado conmigo. No nos vamos a la cama hasta que me seca por completo. Esta vez no me he moja
AriaMi jefe se queja demasiado por el libro que le leo, pero termina adormecido y preguntando cosas que no le hacen demasiado sentido. Es bastante divertido verlo así, pero al mismo tiempo me duele demasiado, ya que sé que mi amor es unilateral y que, aunque fuera correspondido, nunca será suficien