Fuimos a la habitación de Melanie, al entrar la veo muy abrazada con mi hijo, cosa que no me gusta, se están dejando llevar por los sentimientos del momento. Pero sé que esto traerá consecuencia y son las que quiero evitar porque en la primera discusión saldrá a relucir de quién son hijos ambos y los errores de su familia en el pasado, esto es como un paño de agua tibia, pero ya me encargaré de eso.

—hola, Keelan ¿Cómo están les sucedió algo?

—hola, Melanie no, estamos bien tranquila, ¡que sea la última vez que imploras que no te vayamos a buscar! Porque eso jamás va a suceder, eres una Salvatore, ¡eres un miembro más de la mafia italiana y griega! No puedes dudar de nosotros, así te lleven al fin del mundo, te rescataremos, eso es lo primero que debes tener claro.

Y ahora quiero contarte toda la historia, cómo sabes tu padre y yo éramos muy amigos, de hecho, su padre y mi padre hicieron negocios por muchos años, hasta que nosotros tomamos el mando, ahí nos hicimos amigos y socios,