Aren.
Al salir camino hacia el carruaje y veo a Annie desconcertada.
—¿Qué?—pregunto llegando a su lado.
—Es la primera vez que voy a subir a un carruaje—confiesa y veo algo de rubor en sus mejillas.
—Pues si no subes ahora, jamás lo harás—declaro, mientras subo a mi carruaje de viajero, acto seguido veo que hace lo mismo con ayuda de Rafael.
Miro por la pequeña ventanilla restándole importancia a mi acompañante, pienso que detrás de todas las palabras que Ter dijo hay algo secreto, ella es así, cuando cumplí 10 años, se acercó a mí y con lágrimas en los ojos me dijo que maduraría gracias a algo muy triste para mí, algo que fue muy rápido, alegaba que no quería que eso pasara y se fue llorando.
Hace meses en el palacio con una sonri
Annie.Aren es alguien tan fastidioso, insufrible, malhumorado, un terrible dolor de cabeza.Es igual o peor que Analí cuando era joven, se queja por todo, me mira con odio y yo solo tengo pensado en tirarme del carruaje y morir.Si tan solo Ter me hubiese dicho que viajar con su insufrible nieto sería un martirio y más por ocho horas me hubiera negado automáticamente. Él no me quiere aquí y yo no quiero estar cerca de él, no soporto estarlo.No por el simple hecho de tener necesidad voy a tolerar las miradas gélidas que me da.—¿Tienes hambres?—habla Aren, lo miro y no puedo creer en verdad como alguien con su apariencia tan atractiva puede ser tan odioso.—No—digo, aunque la realidad es que estoy muriendo de hambre.—¿Segura?—Si—afirmo, pero mi estomago me traici
Annie.12 horas después de la llegada a Thirwall .No sé cuánto llevo aquí, pero estoy segura de que son más de 10 horas. Cada vez entran más personas, algunos me reconocen y dicen o grita con pánico "es la maldita de Stontalin” las personas que no sabían de qué hablaban fueron puestas al corriente ya que ahora se mantienen lejos de mí y murmuran a mi costa.«Salgo de un infierno para meterme a otro. Perfecto simplemente perfecto»La puerta es abierta y todos giramos para ver quién entra, pero ahora solo lo hacen guardias.—Hagan una fila que verán al rey Thirwall, él sabe si se quedan o no llego, al rey no le gusta esperar. No lo miren a los ojos, no lloren, no griten y mucho menos hablen mucho—dice el guardia pelinegro.&nbs
Annie.Dormir en la plazoleta de Thirwall con la fría noche y sin manta alguna, es una enseñanza, un ver diferente, el pasar frio cuando todos están en sus hogares causa huecos en el corazón.Cada día veo cómo las personas de recursos y sustento favorable evitan a los mendigos de las calles, aunque en Thirwall es escaso ver alguno, no evita el pensar como en Stontalin son repudiados, abnegados e insultados, los pocos que aquí se ven somos los migrantes a esta nación, la cual en todo sentido es nueva. Su expansión territorial es increíble, los lujos que se ven en cada esquina son exorbitantes, sin duda el rey ama el lujo, el que se note el poder que tiene y los recursos que no le hacen falta.Me pongo de pie de la banca que se volvió mi fiel compañera durante toda la noche para dormir, la cual me dio ese cálido descanso, camino al lujoso palacio, la r
Annie.Llevo tan solo dos horas en el palacio, son las ocho de la mañana, no he salido de la habitación que se me ha asignado, pero estoy maravillada con ella, con lo que hay a su alrededor.El guardarropa el cual cuenta con una infinidad de vestidos, la cama en medio del enorme cuarto, con una gigante y bellísima bañera. Los detalles de la habitación no son sencillos, pero tampoco ostentosos, «todo es perfecto», demasiado grande para una sola persona, pero estoy segura de que si Lucrecia viera todo esto se volvería loca.Me siento sobre la cama, la cual se ve tan tentadora que hago lo inevitable: tirarme en ella, mientras lo suave y blando del colchón hace que mi espalda descanse.Cierro los ojos por un momento para asimilar lo que está sucediendo, todo fue tan rápido, tan bravo que aún no lo asimilo.Los huecos en el coraz&oa
El legado prevalecerá y dominará, con el la guerra vendra.El compromiso del príncipe Robb con la princesa de la nación vecina esta por realizarse, las naciones festejan, los pobladores hacen fiestas, los reyes celebran el tratado de paz.El príncipe de Thiwarll, obstinado y frío, es coronado como rey, su gobierno, comienza a tomar fuerza, dejando a Stontalin como una nación sin poder, quitándole todo el poderío, Thiwarll cegado por el poder, riquezas, tierras, comienza una guerra.Guerra, significa muerte, destrucción, miedo.Annie, solo busca lograr que su madre y hermana menor estén bien, que no falte nada.El compromiso de los príncipes abre las puertas de su seguridad y el de su sufrimiento, la guerra abre la puerta de amar, llorar, y sobre todo sufrir.¿No darías todo por quienes amas?El amor es un
Annie.Es totalmente frustrante vivir en una sociedad dónde se estigmatiza a las mujeres, el largo de su vestido, lo corto de este, si es ajustado o no, si es bajita o alta, rellenita o demasiado delgada, si es rubia o pelinegra, morena o blanca. La sociedad está cegada por el hecho de ver al hombre como el jerarca, el que todo lo puede, el fuerte.Se crucifica a la mujer si ven dando un beso a un hombre ya qué opinan que está perdió la inocencia, la honradez, algo totalmente estúpido, ya que en los burdeles los hombres se besan con unas y otras y a estos no se les dice nada, vivimos en un mundo totalmente absurdo.Las jerarquías sociales son lo peor estereotipando su poder, el tener todo, los duques, vizcondes, barones, puedo rescatar el hecho que los reyes sean exigentes con su gobierno, pidiendo producción, alimentando el poder de nuestra nación, el príncipe dan
Hace quinientos años surgieron dos naciones: Thirwall y Stontalin tomando el nombre de las más poderosas naciones de todo el mundo, hasta que una traición corrompió la armonía que existia entre ellas.Los guerreros que eran fieles a la corona, valientes y su mano no temblaba para peleear decidieron irse a la nación que creyeron que gobernaria sobre las otras, estos guerreros provenian de la larga dinastia de valientes guerreros, conocidos comos los Meyer.Los guerreros que eran despiadados a la hora de pelear, eran fieles al trono, no dudaban de sus monarcas, eran los mejores espias y estrategas a la hora de comenzar una guerra, todos temblaban al escuchar que los Kotch iban por ellos.Ambas dinastias, fuertes, valientes, letales y con mano dura.Stontalin esta a salvo con los Meyer, Thirwall triunfa con los Kotch.Estos guerrero
Annie.La cosecha se ve fenomenal, el puesto en el mercado increíble y mamá nerviosa y sudando, es nuestra última oportunidad, los pobladores van y vienen, los comerciantes resaltan sus productos y los nobles se pasean por el lugar solo para ver a los reyes y el príncipe Rob.—Annie, ya vienen, acomoda todo.Las frambuesas, moras, arándanos y fresas están en canastas tejidas por mamá y hasta el frente, los tomates y zanahorias atrás.—Cariño, apresúrate.Tomo la canasta de moras y las cargo en mi brazo, mientras que mamá solo mira al frente totalmente emocionada.—¡Con ustedes el rey y la reina Stontalin, junto a nuestro próximo gran monarca el príncipe Rob!—anuncia el caballero y la calle es despejada dando paso a nuestras majestades.El desastre se hace presente, todos gritan, la multitud se aglom