—Las muestras ya están en el laboratorio. Es cuestión de horas para saber qué es lo que tienes.—Haz lo necesario. Declan sigue preocupado, aunque le diga que estoy bien —Maylene acaricia el cabello rojizo de Claire—, ¿Cómo pudieron hacerle esto, Amy? ¿Cómo?Amy comparte la misma mirada desconsolada
—¡Es inaudito! ¡Todo esto es inaudito! ¡Tú, Declan Morgan! —en medio de una de las oficinas principales de Horizon Damián Morgan señala con un dedo contundente a su hijo, quien yace de pie y con las manos dentro de sus bolsillos, mirando la vista nebulosa de Londres. El vivo rostro de Damián Morgan,
Damián voltea el rostro con fuerza, como si tratara de ignorar la realidad.—No hace falta qué aquí se nombre a mis hijas —Declan interfiere. Prendado está de la rabia—, no hago más nada estando en Horizon. Tampoco me hace falta —Declan observa su reloj—, sustitúyeme las veces qué sean necesarias po
El mismo sentimiento de no saber qué hacer vuelve a su vida, tal cual sucedió cuando años atrás los resultados de semanas sintiéndose mal terminaron diciéndole que esperaba no en una vida, sino en dos vidas en su vientre.No es para nada una sorpresa quedarse anonadada en dónde está, rígida, sin hab
“Demonios” gruñe Declan tras el teléfono.” Cuando el oficial llegue ve con él a la casa.”—No quiero dejar a Claire sola. Me necesita, más ahora. No quiero —Maylene logra recuperar el aliento, probablemente no puede de ahora en adelante—, por favor, ven. Quiero a estar a tu lado, Declan. Quiero que
Desaparecida la enfermera, Maylene enciende el televisor. El noticiero menciona la gravedad del asunto de Shannon David, y para estos instantes, le interesa poco lo qué le ocurra. Algo de pesar siente por Mason, quien resultó ser la última persona en la que dudaría. El abogado vendrá, y con su testi
—Parece qué no sólo usa sus contactos de toda la vida sino también los mismos que utilizaba Shannon David para mantener los sobornos lejos de la luz pública —Carrison expresa frente al lugar acordado para la emboscada contra Carl Pitts—, lo qué le puede facilitar la salida incluso del país.—Ese hij
—No quiero palabras. Quiero hechos —Declan acelera, observando la ubicación. Cada vez se alejan más. Y de pronto, se detienen.Ya no puede ver la ubicación de Maylene.Para Declan el mundo se detiene otra vez. Piensa en sus hijas con una loca desesperación qué solo lo hace volverlo más loco de lo qu