—¿Estás segura que quieres quedarte aquí?—Ahora que lo preguntas con esa sonrisa dudo mucho ya de lo que dije —expresa Maylene dejando a Hayley en el sofá. Hannah arrastra su peluche para llegar hasta su hermana y comenzar a hablar. Es Claire quien le preguntó cuando Amy persiguió a unos enfermeros
Luego tendrá tiempo para arrepentirse.Baja al salón, hacia el principal salón donde la primera persona que ve es a Amy indicando a las dos enfermeras que lleven las cosas a la habitación principal.De una vez se da cuenta, para sí misma, que no sabe si fue una buena decisión aparecerse, y mucho men
Al día siguiente, la enfermera encargada llega temprano y trata de memorizar lo que hace para estar precavida. Declan no muestra indicios de despertar. Y cuando lo hace, Maylene está tratando de dormir a las niñas.Recibe un mensaje de Fenton donde le dice que Declan no quiso que la molestara cuando
Declan le ha quitado el habla. Acorralada frente a la gigante figura que no tiene pizca de pudor, su cuerpo reacciona sin pensarlo ante el calor que emana un ser tan atractivo como él.Su lengua se seca, su garganta no emite ningún sonido, su rostro delata lo que no quiere demostrar. Está lejos de c
—Lo acabas de decir —Maylene cierra los ojos, y los abre dándole a su vista el pecho cubierto de Declan—, “existió.” Ya no existe más un “nosotros” —y gira el rostro—, y no fui yo quien lo terminó…—alza las cejas rápidamente para enfatizar—, nunca fui yo.Declan no se contiene. Suavemente gira el ro
Y se suelta de su abrazo.Maylene sale rápidamente de la habitación.Declan intenta alcanzarla pero la puerta se cierra frente a sus narices, y el puño debido a su frustración cae con lentitud en la madera de la puerta. Cabizbajo, Declan deja caer la cabeza con la mano en la salida: dándose cuenta q
Maylene se acerca lentamente hacia la pared para tomar el umbral. Sus ojos siguen abiertos, en ese lugar que logran advertir una y otra vez de que no está loca…No.“No me digan que todavía sigues sorprendida.”—¿Quién eres? —Maylene tira la primera pregunta con fuerza. Su pecho sube y baja constant
—Tengo que irme así que cualquier cosa me llamas, y si es hoy mejor. ¿Sí? Te quiero —y vuelve a colgar.Ésta vez no se queda en ese sitio sino que sale rumbo a la habitación de las gemelas. Ambas niñas siguen durmiendo, aún es muy temprano en la mañana. Se acerca a la ventana para observar el camino