La posibilidad de perder de nuevo a Aron vuelve loca a Elizabeth, definitiivamente no es facil ser la señora Morgan...Gracias por todo el apoyo que han dado a esta y todas mis historias, los amo y estoy muy agradecida por todo, besos.
Elizabeth MorganEn horas de la mañana me permiten ver a Aron, aun no reacciona y está conectado a varios aparatos que se encargan de revisar que sus funciones vitales se encuentren estables.El sonido de su corazón inunda todo el espacio, me acerco y tomo su mano fría, siempre he sido una mujer fuerte, o por lo menos eso es lo que trato de aparentar delante de la gente.—No se te ocurra dejarme sola en este momento, después de darme semejante paquete. — Comienzo a decir, el está acostumbrado a que le hable así.Estoy vieja para estar cuidando un bebe de nuevo y vienes tu y te dejas disparar de esa forma. —Continúo sin escuchar una respuesta de vuelta.—No te puedes quedar aquí durmiendo tan tranquilo, porque no me voy a estar haciendo cargo de tu otra empresa— Advierto, siento que es inútil tratar de provocarlo de esa forma.Luego comienzo a gimotear—No puedes aparecer con vida solo para irte de nuevo, no lo acepto, no quiero volver a vivir de luto, como si estuviese muerta en vida.—
Elizabeth Morgan Tuvimos que contratar un CEO, para que esté al frente del grupo Morgan, mi esposo está convaleciente y no hay nada más importante para mí que él y mis hijos. — Mi suegra y mi suegro vienen con frecuencia a ver a su hijo, Elena no deja de verme con esos aires de superioridad que siempre la ha caracterizada, los acepto en casa porque son los padres de Aron, pero yo a esa señora la mastico pero no la termino de tragar. Más de treinta años conociéndome y viendo de lo que soy capaz, y continua menospreciándome. —Ignórala, no vale la pena. — Me susurra mi hija en la cocina, donde me encerré una vez llego mi campante suegra. —Eso intento hace más de veinte años cuando me case con tu padre, parece que es una cruz con la que debo cargar. — Le respondo. —No entiendo como ustedes, siendo como son tuvieron unas madres tan terribles. — Me dice ella. —Mi madre ha estado llamándome otra vez por ayuda, que mi hermano necesita una operación—Hago una mueca— Es mentira ya averigüe
Elizabeth MorganEl secreto mejor guardado de mi esposo me deja con la boca abierta, lo peor es que no puedo desahogarme con nadie.— ¿Un agente secreto? ¿Como un espía?— Cuestiono viéndolo a la cara para que no tenga oportunidad de mentir.Exactamente. — Me responde si evadir mi mirada.—Por Dios ¿Alguien más lo sabe?— Le pregunto, sentadome con la mirada un poco perdida, ese era el motivo por el que a veces inventaba viajes de negocios, estaba en misiones arriesgando su cuello a cambio de dinero como un mercenario.—Solo Albert, él es uno de los más nuevos ingresos del grupo, por eso sé que era de los nuestros, por eso siempre apoye la relación que tiene con mi hija.— ¿Por qué no me lo dijiste antes?— Le pregunto molesta, estoy casada con James Bond y no lo sabia.—Es confidencial, además no quería que vivieras angustiada, pensando si volvería de la siguiente misión. — Me dice él.—Dime que estas retirado por favor. — Le digo mordiéndome los labios.—No exactamente. — Me responde
Brian Morgan.Me escapo de la casa de mi hermano, en el momento que él se va a su trabajo, no entiendo como puede ser mi hermano, es la persona más aburrida que conozco en mi vida.No entiendo porque mi madre y mi padre no podían llevarme con ellos a ese viaje, estoy molesto con ellos por eso, en la escuela se han burlado de mi, mi mama en lugar de parecer mi mamá parece mi abuela, todos los niños tienen madres jóvenes a excepción de mi, por eso me molestan todo el tiempo por eso estoy harto.Por eso y por otras cosas más, solo se la pasa trabajando con mi papá y no tiene tiempo para mi, cuando voy a hablar con mis padres todo el tiempo están cansados.. Estoy jugando con mis amigos del parque como todas las tardes a la pelota y un tonto la bota lejos, voy por ella y me sorprendo que un señor mayor y elegante me la devuelva en las manos.—Gracias. — Le digo y doy media vuelta.—Brian, quiero hablar contigo. — Me dice él, y yo lo ignoro y sigo caminando a donde están los demás.— ¿No m
Elizabeth Morgan —Claro que no tonto, los abuelos saben que no somos niñas. — Le responde su hermanos y todos nos reímos.Vamos a sentarnos para buscarlos entre los paquetes. — Les digo, me duele la columna envejecer no es algo fácil de asimilar, traemos presentes hasta para el personal de servicio, especialmente para los que tienen años con nosotros.Le entregamos a los mellizos un dron para que juegue al aire libre y se despeguen un poco de los videos juegos y también un carrito a control remoto, ellos al contrario de la mayoría de los niños son felices de compartir sus cosas.—Vamos a estrenarlos ya. — Propone uno.—Esperen que su papá los enseñe a usarlo lo pueden perder. — Le dice Elizabeth.—Ojala que terminen pronto. —Se queja uno de ellos, poniendo mala cara y sentándose en la alfombra, rodando el carrito como consuelo.—No te preocupes hermanito, ya los vamos a usar. — Le consuela Albert.—Ellos se entretienen con sus juguetes y tocan los adultos, a mi hija la fascinan las ca
Alex MorganNo soporto ver a Aron, feliz con su familia después de que mato a mi hijo, Elena nunca me había dicho que era mío, hasta hace tan solo unos meses, por eso siempre sentí afinidad por él, no puedo creer que esperara tanto tiempo para decírmelo y no solo eso me dijo que el responsable de la muerte de su hijo fue nada más y nada menos que su propio hermano.Ella no lo dijo en sus cabales estaba borracha, pero sé que no mentía, ella se le suele ir la lengua cuando esta borracha, siento tanta rabia mis deseos de venganza son algo que no puedo controlar, sabía que el ultimo hijo de Aron y Elizabeth no era de ellos, Brian es hijo de la asistente de ella y por un tiempo pensé que era de Aron, pero no saco bien las cuentas y ese niño es mi propio nieto.Los niños son fáciles de manipular, es perfecto para usarlo en mi venganza, más temprano que tarde, tendré la cabeza de Aron y Elizabeth en bandeja de plata.Mi esposa y yo nos separamos recientemente, por lo que recientemente me mud
Elizabeth MorganMás sabe el diablo por viejo que por diablo, Brian siempre ha sido un niño un poco caprichoso, pero nunca había visto que tuviese odio en la mirada hasta ahora.No soy ninguna tonta, al verlo a los ojos mientras comíamos vi el reflejo exacto de su padre biológico, pero yo he dado todo porque él no siga sus pasos y dejo de llamarme Elizabeth Morgan si no consigo volver a encarrilarlo.Sé que una de las cosas que le molesta es que Aron y yo somos mayores, eso es algo actual, pero sé que es porque algunos niños han comenzado a hacerle comentarios como ¿Dónde están tus padres? Que has venido con tus abuelos, a veces los niños son crueles y no tienen idea del daño que hacen.Discretamente yo misma comienzo a seguir los pasos de mi hijo, hace casi todas sus rutinas con normalidad, cuando estoy a punto de darme por vencida…Llevo tres días siguiéndolo aparece muy tranquilo un personaje que tenia años sin ver y me quedo con la boca desencajada, por lo viejo y feo que esta oja
Elizabeth Morgan.A partir de ese día Brian no vuelve a ser el mismo, parte de su inocencia murió, así el maldito de Alex no haya presionado el gatillo.Le explicamos todo lo que paso con sus padres, no le ocultamos nada y le explicamos que aunque Aron y yo no lo engendramos es nuestro hijo amado, que no lo abandonaremos nunca y que estaremos para él las veces que lo necesite como lo estoy para todos nuestros hijos.Mi hija en este momento está teniendo una pequeña crisis matrimonial por lo que voy a visitarla a la empresa, ha pasado un mes desde el incidente con el tío de Aron,Hola cariño como te encuentras hoy el saludo con un beso en la mejilla, ella sonríe pero la sonrisa no llega a sus ojos, su asistente esta parando la oreja por lo que digo en voz alta—Me gustaría que habláramos un rato a solas. — Con los ojos entrecerrados, la mujer se hace la sorda hasta que Ariadna le ordena—Betuna por favor saca estas copias y cierra la puerta al salir. ——Enseguida señora. — Masculla la