*NO PODÍA SER PEOR.* Kate Harris. Después de la salida del señor King, me quedé sentada en la lujosa oficina, tratando de procesar lo que acababa de suceder. Me sentía como si estuviera en medio de un torbellino, atrapada en una situación que estaba muy por encima de mi nivel de experiencia y habilidad. El iPad que me había entregado el señor King reposaba frente a mí, mostrando una lista interminable de contactos, protocolos y documentos que debía revisar y estudiar. Mis manos temblaban ligeramente mientras deslizaba los dedos por la pantalla, tratando de asimilar toda la información. Esto sería demasiado para mí, pero sobre todo cuando llamé más de diez veces al contacto en Vancouver, y no obtuve respuesta. Demoré horas en esa oficina leyendo los documentos y tratando de hacer un esquema para organizar todo, pero cuando vi la palabra protocolo y en cómo debía hacer conexiones con otros países para los beneficios comerciales, quise arrancarme el cabello. «¿En qué me había meti
*PROMETIDA* Kate Harris. Coloqué un poco más de corrector en mis ojeras, porque si había dormido una hora o dos, estaría exagerando. Tomé el maletín en mi mano, me puse una chaqueta a juego con mi vestido negro, ajustado a mi cuerpo, y salí de la habitación del hotel. Antes de la hora acordada, estaba afuera esperando el auto, y antes que incluso llegara la hora de presentarme al hotel donde iniciarían la entrevista, yo estaba allí repasando todas mis líneas. Mostré el pase que me envió el señor Jin por correo, y leí una nota que decía que no le había dicho nada al señor King. Así que sonreí. Pero en el momento en que entré al auditorio principal, donde se llevaría a cabo todo, una mujer, muy elegante, hermosa, y muy blanca, se giró levantando una ceja y mirándome de arriba a abajo. Su vestimenta era perfecta, incluso ella podría ser una modelo de revista. —Disculpa… ¿Tienes invitación? Es que sé de todos los que estarán en este sitio, pero eres la única que no conozco. Carr
CAPÍTULO 8*SU NUEVO TRABAJO* Josh King.La presión era un excelente método para saber de qué estaban hechas las personas. Y aunque no tenía en mis pensamientos de que la señorita Harris se presentaría después de su mentira, esto había sido un plus, que se me había ocurrido de un momento a otro, sobre todo para el beneficio que me traería la compañía con dicha mujer, en este comienzo de elecciones.Fue un pensamiento repentino, algo fugaz en esa oficina cuando ella miró mis ojos.Así que sería un trabajo más. Si no quería verse envuelta en una demanda, ella aceptaría mi propuesta sí o sí, y pagaría por dejarse llevar y sobre todo mentirme en la cara.Algo que detestaba.Iseul me miró desde la esquina, ya sabía lo que estaba pensando, así que le quité la mirada y luego la escuché cuando fue la primera en presentar un buen plan de mercado y economía para estos nuevos cinco años de nuestro partido político, si ganaba las elecciones en tres meses.Después de ella, cada uno presentó una p
*LA PROPUESTA DEL SEÑOR KING* UN PACTO DE CONVENIENCIA Kate Harris. El aire se volvió denso en la habitación, como si cada palabra que había sido pronunciada pesara sobre nosotros. Miré fijamente al señor King, tratando de procesar toda la información que acababa de recibir. Él, por otro lado, permanecía imperturbable, como si estuviera acostumbrado a manejar situaciones tan delicadas como esta. —Señor King, esto es… —intenté encontrar las palabras adecuadas, pero mi mente parecía estar en blanco. —Es una propuesta, señorita Harris —interrumpió él con tono firme, pero no exento de una pizca de paciencia—. Una propuesta que, por su bienestar y el mío, le recomendaría que considere seriamente. Mi corazón martilleaba en mi pecho mientras trataba de asimilar la magnitud de lo que estaba sugiriendo. Convertirme en su prometida, era una idea descabellada, y sobre todo fuera de los planes que había en mi mente. Entonces otra idea se me cruzó por la mente. —Si la señorita Iseul es la
*ATENTADO* Kate Harris. —Dios… —me quedé congelada cuando el auto que me trajo al edificio gubernamental, se detuvo. Había muchísima gente. Reporteros, cámaras y todo tiempo de personas arremolinadas alrededor, mirando hacia el auto, entretanto me pregunté qué estaba pasando. —Espere aquí, señorita Harris… —El conductor se bajó y rápidamente vi cómo unos guardias salieron del edificio para llegar al auto y abrir la puerta. Y aunque no estaba segura, tuve que bajarme. Caminé en medio de la gente que hablaba de forma rápida, lanzando muchas preguntas y apretujándome de alguna forma. —¿Es esto una estrategia electoral? —¿Dónde conoció al Señor King, realmente? —¿Tienen una fecha de boda? —¿Cuántos años tiene? Me detuve un momento mirando a la persona que hizo la última pregunta, y pensé: ¿cuántos años tenía el señor King? Los guardias terminaron por ayudarme a entrar a la residencia presidencial y no pude mirar atrás para saber sobre el despelote, porque a los guardias les ur
*DEBO HACERME CARGO AHORA* Kate Harris.La ráfaga de disparos cesó en un momento, mientras mi cuerpo estaba envuelto en esos brazos desconocidos. En medio del silencio que siguió escuché mi voz agitada, y como el señor King me miró con sus ojos bien oscuros.De un momento a otro, él se separó de mí para moverse hacia el frente, y allí me di cuenta cómo el cuerpo del presidente Hajun Park, se desplomaba frente a nosotros. Su sangre manchó su impecable traje en el instante e instintivamente me abracé a mí misma mientras mi corazón martilleaba en mi pecho.—¡El presidente está herido, necesitamos ayuda médica! —escuché la voz de Josh, tratando de llamar la atención de los guardias que rodeaban el vehículo—. ¡Ahora, m*****a sea! Dense prisa.Todo fue muy rápido.Los hombres abrían los autos con rapidez, pero no podía despegar los ojos del señor King.—Hajun… mírame… —El presidente lo miró, pero su boca estaba llena de sangre—. ¡Hajun! Aguanta, aguanta un poco… El señor King apretó una d
*¿SÍ O NO?* Josh King. Había un caos a mi alrededor, eso era seguro, pero decir que envolver a esta mujer en mis brazos, a pesar de estar fingiendo delante de la prensa que no me daba tregua, me hizo algo. No sé cuándo mis ojos se cerraron cuando el olor de su cabello se metió en mi nariz. Cuando mi cuerpo y extremidades se tensionaron al sentir sus brazos rodeándome como si de cierta forma entendiera mi posición ahora. Y tampoco sabía si esto era cierto o no, producto de su miedo de que la demandara o perdiera su trabajo, que estuviera haciendo un papel tan eficiente. Pensarlo incluso me enojó. Tenía un asunto terrible en mis manos. Hajun estaba muerto. La candidatura tendría un desplome y estaba seguro de que venía una división inminente, pero ahora eso no importaba. Había perdido un amigo, a pesar de ser Hajun lo que era, lo había perdido. La muerte de Hajun Park no solo había dejado un vacío en la presidencia, sino que también había sacudido mis propios cimientos. —Josh… —
*COMO SI…* Kate Harris. —Sí… Mi voz salió apenas como un susurro, pero fue suficiente para romper la barrera que nos separaba. En un instante, el aire entre nosotros se cargó de electricidad, y supe que nada volvería a ser como antes. Había cruzado un umbral invisible, había tomado una decisión que cambiaría el curso de mi vida para siempre, de eso estaba segura. Lo que me preguntaba ahora era. ¿No había tomado las decisiones equivocadas completas en mi vida, o aún me faltaba un recorrido suficiente como para joderme de lleno? La verdad es que después de todo lo que había pasado, no me importaba, sabía que en este espacio de mi vida marcaría un punto muy importante para mí, y lo que estaba haciendo este hombre con mis emociones, difícilmente me hacían pensar con cordura. Josh… solo pensar decir el nombre en mi mente, me agitaba, pero el plus eran esos ojos negros que brillaban con una intensidad que me dejaba sin aliento. Parpadeé varias veces cuando este hombre se levantó de