Caminando tomados de las manos por el estacionamiento de la agencia, Julie susurra:—¡Esto es increíble! Esta es la agencia más grande que he conocido en toda mi corta vida. Y vaya que he conocido muchas.—Y eso que aún no has visto nada —El sonríe—. La agencia que te dirige en Londres debería mejorar el manejo de sus modelos. ¿Sabes a qué me refiero? —Se aclara la garganta — Exponerlos más, no hacerlos tan exclusivos. Deberían pensar más en grande... No sé, no dejarlos solo estancados en Europa, sino hacerlos más internacionales.Julie asiente.—Estoy de acuerdo, supongo que no lo hacen por temor a perdernos, ya sabes… Que nos salga un contrato más jugoso. —Ella ríe al escucharlo reír.—Y en eso tienes toda la razón, porque yo pagaría el precio que fuera por tí. —Susurra eso último en voz alta.Julie detiene su andar al escucharlo decir tal cosa y por instinto Marcos también lo hace, aunque no suelta de su mano en ningún momento. Ella le sostiene la mirada con fuerza y con la misma i
—¿Estás bien? —Ella pregunta mientras lo ve tomar asiento en su silla ejecutiva y luego la sienta en su regazo.La mirada fija de Marcos hacia la puerta, hace que Julie se pregunte a sus adentros qué puede tenerlo así. Más allá de lo yá vivido, sabe que él está batallando con algo más fuerte de lo que tan siquiera ella pueda imaginar.«Sé que hay algo que te está atormentado y aún no me has dicho. ¿Pero qué? ¿Tendrá su suegro algo que ver?» —Marcos… —Ella susurra a pocos centímetros de sus labios mientras acaricia sus mejillas con ambas manos— Por favor, dime, ¿Qué tienes? ¿Qué sucede? ¿Hay algo que pueda hacer por ti?En vista de que no obtiene respuesta, ella va a ponerse de pie para buscarle un vaso de agua. Pero Marcos no se lo permite al tener ambos brazos rodeando su cintura con fuerza.No la quiere lejos, no quiere soltarla. Sabe que su vida está pendiendo de un hilo después de lo que a hecho.Retar a su peor enemigo y suegro frente a todos, en la sala de juntas…Hacer eso no
Marcos observa con cautela mientras Giorgio toma las medidas de Julie y al mismo tiempo, ve como Marcela elige la ropa que Julie debe modelar para el comercial.Solo pensar que le hizo el amor de manera tan feroz hace unos veinte minutos atrás en su oficina, lo hace sonreír. Recordar que ambos se han confesado su amor, en un momento tan íntimo y pasional… Para él, no tiene precio.Es otro desde que la conoció.Otro hombre por completo.Vuelve a sonreír cuando ella le sonríe, hasta que escucha la voz de su suegro hablándole por detrás:—Vaya, vaya... Pero no pierdes el tiempo.—Suegro... —Dice con sarcasmo— ¡Vaya que tú tampoco pierdes el tiempo!Las mejillas de Julie pierden el color al ver a Franco y como este la mira con evidente sarcasmo por unos segundos. Luego, este se gira para estar de frente a Marcos y ambos hombres se retan con la mirada.—¿A qué estás jugando? —Franco susurra para que solo Marcos escuche y este sonríe.—A lo mismo que tú estás jugando.Julie ve como ambos ho
Sábado 09:00 AMJulie habla con Eliza sobre su situación sentimental con Luciano, en el salón de televisión mientras los chicos preparan juntos el desayuno.—¡Estuviste con Luciano y no me contestaste nada! —Julie chilla y su amiga frunce los labios— ¡Tienes que contarmelo todo! ¿Cómo te sientes? Pensé que no querías nada con él.—Y lo mantengo, no quiero nada serio con él por los momentos.—Ay... Y yo que pensaba que ambas estábamos viviendo un romance de verano al mismo tiempo—Julie sonríe ante los gestos de su amiga— El es un gran chico y se nota que le gustas, Eli.—Lo sé, pero sabes que no estoy lista para una relación. ¡Vivo por mi trabajo! Es todo en lo que puedo pensar ahora.—Pero tanto trabajo te consumirá, no estás viviendo los verdaderos placeres de la vida. Me preocupa que por estar tan obsesionada con el trabajo, nunca te atrevas a rehacer tu vida otra vez.—¿Realmente crees que si algún día me daré la oportunidad de rehacer mi vida, lo haré con una persona que vive a c
19:00 AM Julie se mira en el gran espejo del armario y, suspira profundamente al ver lo hermosa que se ve en el vestido de gala que Marcos le dejó como regalo junto a una nota en la inmensa isla del armario.Realmente fue una sorpresa, ella no se lo esperaba. Marcos en ningún momento le mencionó algo sobre el vestido y ella de hecho había considerado pedirle uno prestado a su amiga Eliza, ya que debido a su situación, teme hasta salir de compras. Y con obvias razones, después de lo vivido.El vestido es de un color azul marino, ceñido al cuerpo, de finas tiras que relucen sus hombros y le roza los tobillos.Hace destacar su belleza en todos los sentidos.—Estoy nerviosa, no sé si este preparada para ver a Marcos celebrando su compromiso con otra mujer —Susurra para sí misma mientras se mira en el espejo— Aunque sea algo por conveniencia, y no haya relación entre ellos. Nunca había considerado que algo así me pasaría.Soltando un suspiro, ella procede a peinar su flequillo y luego a r
Mirando hacia el jardín desde el hermoso balcón de la gran casa de los Danisse, Julie suspira y se pierde en la inmensidad de la noche.Las emociones que esta reunión le han generado en su ya golpeado corazón, han sido mucho más de lo que esperaba.Sin la compañía de Luciano, está segura de que no habría soportado tanta tortura.Pero apoyar a Marcos en lo que sea que necesite, jamás será algo que debatir.Sin importar qué, ella siempre lo hará. Estará para él así como él lo ha estado para ella desde el primer día.Aunque le cueste la vida y le rompa el corazón.Así es el amor.Así es lo que ella siente que es el verdadero amorY está bien sentirlo así también.Pues el amor, tiene más de mil formas para verlo y sentirlo.Y también... Para demostrarlo.—Hola, Julie... —La voz de Franchesca la toma por sorpresa y la hace girarse de inmediato sobre sus talones— ¿Cómo estás?Su mirada se encuentra con la de Fran y ésta sonríe con sinceridad. Tragando con fuerza, Julie suspira y segundos de
• Una hora antes de ir al aeropuerto... —Lindo apartamento, Lucious. —Julie murmura en tono burlón y Luciano la fulmina con la mirada.—¡Ni te atrevas! —Gruñe— Odio que me llamen "Lucious" Julie suelta una carcajada y alzando ambas manos en el aire, musita:—Esta bien, no más Lucious. —Vuelve a reír y Luciano sin poder evitarlo, ladea una sonrisa.—Ya vuelvo, enpacare una muda de ropa, mis cosas de aseo personal y nos vamos de inmediato al aeropuerto. Estas en tú casa...—Me parece bien, gracias, no te preocupes por mí.El asiente y se pierde en el pasillo que da hacia su habitación, Julie se gira sobre sus talones y dajando sus maletas cerca de la puerta, camina hacia la sala y detalla las obras de arte que destacan en la pared.«Vaya que Luciano es un amante de los bosquejos.»Julie sonríe cuando lee el nombre de ‘Lucey Paoli' en una de las pinturas, pues es una de sus artistas favoritas y se queda mirando el cuadro por al menos, un minuto entero.—No sabía que eras amante del art
De camino a la casa de su abuela, Marcos conduce su Jeep mientras Julie canta a todo pulmón una canción de su adorada Lana del Rey.Sí, Ride. Marcos sonríe al verla tan feliz y eso le hace olvidar todo el revuelo que dejó en Milán.Franco estuvo a punto de hacer de las suyas contra Franchesca al no poder llevar acabo su plan contra Julie.Se puso furioso cuando notaron que ella y Luciano se habían marchado sin previo aviso antes de poder perjudicarla.Marcos tuvo que guardar la compostura para no matarlo al ver personalmente su desfachatez.Franco estuvo a punto de golpear a Franchesca delante de todos si no es porque Marcos interviene, no le importó la presencia de los pocos invitados que aún quedaban en la casa, cuando él y sus hombres se dieron cuenta de la ausencia de Julie. Franco estaba fuera de sí. Y aparentó ante su esposa y familiares que todo se debía a un mal negocio que le había salido y que por ello, había estallado de esa manera.A Franchesca le pedio disculpas con evid