La noche llegó y con ella también Damián...La mansión está en completo silencio, ya que todos duermen. Damián acaba de llegar y los dos estamos en medio de la estancia, mirandonos fijamente con seriedad y tal vez algo de nerviosismo.—Gracias por esperarme —empezó a hablar rompiendo el hielo. —Por favor, pasemos a la biblioteca —propuso indicándome que fuera delante, y sin decir nada, lo hice. Luego, él se adelanta un poco para abrir la puerta de la biblioteca.Su caballerosidad en este momento solo consigue ponerme más nerviosa o tal vez me irrita que actúe con tanta tranquilidad, cuando yo me siento tan tensa.Entro permaneciendo aún en silencio, y él entra después de mí.Camino un poco más rápido evitando cualquier otro acto de caballerosidad de Damián, y me siento frente a su escritorio. Él toma asiento frente a mi, al otro lado de este.Damián entrelaza sus manos mientras las apoya sobre la superficie de madera, adoptando una postura bastante formal y rígida.—Primero que todo —
Jennifer me mira ansiosamente buscando aprobación. Sin embargo, al verme guardar silencio, baja su cabeza con tristeza.—Parece que no te agrada la idea de que salga con Lucas —lamentó.—No, no es eso, solo me pareció repentino —me excusé tratando de no hacerla sentir mal.—¿Entonces no te importa que salga con él? —me preguntó mirándome entusiasmada.—¿No crees que es un poco mayor para ti?, porque Lucas tiene 28 años y tú solo 23, además de que posiblemente a Damián no le gustaría que salgas con él, porque es el chófer —intenté explicarle.—No me importa lo que piense Damián —negó rotundamente. —Y la verdad, la diferencia de edades es lo de menos. Solo mírate tú con mi hermano, él tiene 33 y tú 25; te lleva 6 años y Lucas a mi 5, no veo en que pueda estar eso mal —agregó.La sinceridad de Jennifer me tomó por sorpresa, ¿Desde cuándo sabía lo que había entre Damián y yo?—P-pero entre tu hermano, digo, el señor Damián, y yo no hay absolutamente nada —traté de negarlo.Jennifer se cru
Mi sorpresa se convirtió en rabia rápidamente, al ver cómo Belinda se le insinúa a Damián. Esta más que claro que le gusta; no se ha despegado ni un segundo de él. A pesar de que le está presentando a los empleados, ella sigue enganchada de su brazo y aprovecha cualquier oportunidad para acariciarle el cabello e incluso su cuello.—Bueno, Belinda, este sería todo el personal, y ya conociste previamente al chófer. Si tienes alguna inquietud, te recomiendo hablar con Olivia, ya que es la encargada de toda la casa —le informó Damián.—Estoy a sus órdenes, señorita —pronunció Olivia.—Muchas gracias, han sido muy amables conmigo. Es maravilloso —expresó con una sonrisa enteramente falsa.—Es un placer. Ahora, me disculparás, pero debo ir a la empresa, te quedas en tu casa —pronunció Damián, y Belinda le da un beso en la mejilla innecesariamente largo.—Cuídate mucho mi Dami —dijo después de dejar la marca de su labial en su piel.Damián parece incómodo, y mientras evita mirarme, se despi
Después de aquel abrazo, Damián dijo que quería hablar con Lucas, y Jennifer accedió con la condición de que fuera después de la cita. Finalmente, ella salió de la biblioteca, no sin antes guiñarme un ojo mientras cerraba la puerta. Entonces me di cuenta que me quedé a solas con Damián, y en cuanto nuestras miradas se cruzaron, pude notar el deseo con el que sus ojos me miraban. Quería correr hacia él y dejarlo besar mis labios hasta desgastarlos.—Ya es hora de descansar —dijo rompiendo con el silencio.—Tiene razón —contesté con nerviosismo.Mi cuerpo tiembla ligeramente, insistiéndome a gritos que corra a sus brazos. Damián se acerca a mi, haciendo más difícil que me controle.—La extraño tanto —susurró con un tono profundo y varonil. Me quedé en silencio, incapaz de responderle, y permanecí con la mirada baja —Antes, por lo menos, me buscabas para discutir. Ahora ni siquiera me mira —agregó.—E-es lo mejor —titubeé nerviosa y retrocedí un paso.—¿Por qué se aleja? —me preguntó tom
Después de aquel enfrentamiento con Belinda, decido ir a mi habitación para calmarme y luego volver con Linsey, pero al llegar, me encuentro con Jennifer. —¡Me encantó, simplemente me encantó! —dijo emocionada.—¿De qué hablas? —fruncí el ceño confundida.—De cómo pusiste a la víbora de Belinda en su lugar. ¡Me fascinó! —expresó con una sonrisa de oreja a oreja, y yo me reí un poco.—Deberías dejar de escuchar detrás de las puertas.—Soy muy curiosa —contestó con orgullo, y continuó. —Pero de verdad Daphne, al principio pensé que te dejarías humillar de esa estúpida, y estuve por entrar a defenderte, pero no lo hiciste, te defendiste de una forma magistral —me felicitó.—Bueno, solo espero que ya le haya quedado claro que no le voy a permitir que me humille y mucho menos que me amenacé, y si sigue metiéndose conmigo, me voy a defender.—¡Así se habla!, ¿Y ahora qué te parece si vamos con Linsey y ambas me ayudan a escoger mi outfit para mi cita con Lucas?, Por fin llegó el día, y te
A pesar de todas las amenazas y de sus comportamientos; Lucas para mí no ha dejado de ser la persona en la que más confío y mi mejor aliado.Somos mafiosos, criminales que buscamos a toda costa salirnos con la nuestra, así que en parte lo entiendo. Cuando entré a esta casa, vi a todos como mi escondite y nada más; no soy diferente a Lucas, y al igual que él ahora, esta familia también me hizo cambiar.—No te preocupes, ambos aún tenemos un pasado con el cual luchar, y secuelas de lo que fuimos. Pero desde que llegué a esta casa, simplemente quiero cambiar —expresé pensativa.—Últimamente yo también —respondió.—¿Y quién te motiva a eso? —le pregunté conociendo de antemano la respuesta.Lucas se sonroja nuevamente y sonrío.—Ya no más amenazas, te lo prometo.—Te lo agradezco.Lucas me abraza y yo hago lo mismo. Me doy la vuelta para entrar a la casa, pero la voz de Lucas me detiene.—Si te das cuenta de lo que esto significa, ¿Verdad? —al escucharlo me giro hacia él y lo miro expectan
————Al día siguiente————Había sido una noche horrible, y la más dolorosa desde que llegué a esta casa. No pude conciliar el sueño, así que hoy me sentía agotada, física y mentalmente. Sin embargo, tenía que reponerme, y sonreirle a mi pequeña.Como todas las mañanas de escuela, la ayudé a arreglarse, a revisar que sus útiles estuvieran completos, y a desayunar. Luego venía la parte que más me costaba, despedirme de ella.—Te amo mucho —le dije abrazándola con fuerza.—Yo también te amo Daphne, te amo mucho y voy a extrañarte —expresó Linsey sin querer irse.Cada mañana era igual, no nos queríamos separar. Pero hoy en especial, necesitaba todo su amor y todo su cariño; sentía que eso me mantenía aflote.Solo bastaba que sus bracitos me abrazaran con fuerza para sentirme mejor y segura.—Tendré que llevarlas a ambas a la escuela —bromeó Lucas, quién esperaba a Linsey.Ambas nos reímos y luego nos separamos un poco para mirarnos.—¿Y si vienes conmigo, Daphne? —me preguntó esbozando un
Jennifer, Lucas, Olivia y hasta Linsey, se enteraron de lo ocurrido. Justo ahora todos estamos en la cocina esperando la llegada de Damián. Mientras tanto yo trato de calmar a Linsey que no ha parado de llorar.—No quiero que te vayas —sollozó con tristeza.—No mi corazón yo no me voy a ir —le dije tratando de consolarla, pero Linsey parecía no poder calmarse.—¡Maldita sea la hora en la que esa arpía llegó a esta casa! —soltó Jennifer con furia.—Yo no pensé que la señorita Belinda fuera... bueno... tan ella —dijo Olivia tratando de mantener ese respeto que siempre ha tenido hacia las personas.—Es un ser humano despreciable —espetó Jennifer.—Bueno es obvio que cometió un error metiéndose contigo Daphne, tú eres de las que se deja pisotear de nadie —agregó Lucas, quién acaricia suavemente los hombros de Jennifer, intentado tranquilizarla.Linsey recuesta su cabeza en mi pecho tratando de dejar de llorar mientras yo la abrazo y acaricio su cabello.—Aún así, creo que no debí ser tan