Mi sorpresa se convirtió en rabia rápidamente, al ver cómo Belinda se le insinúa a Damián. Esta más que claro que le gusta; no se ha despegado ni un segundo de él. A pesar de que le está presentando a los empleados, ella sigue enganchada de su brazo y aprovecha cualquier oportunidad para acariciarle el cabello e incluso su cuello.—Bueno, Belinda, este sería todo el personal, y ya conociste previamente al chófer. Si tienes alguna inquietud, te recomiendo hablar con Olivia, ya que es la encargada de toda la casa —le informó Damián.—Estoy a sus órdenes, señorita —pronunció Olivia.—Muchas gracias, han sido muy amables conmigo. Es maravilloso —expresó con una sonrisa enteramente falsa.—Es un placer. Ahora, me disculparás, pero debo ir a la empresa, te quedas en tu casa —pronunció Damián, y Belinda le da un beso en la mejilla innecesariamente largo.—Cuídate mucho mi Dami —dijo después de dejar la marca de su labial en su piel.Damián parece incómodo, y mientras evita mirarme, se despi
Después de aquel abrazo, Damián dijo que quería hablar con Lucas, y Jennifer accedió con la condición de que fuera después de la cita. Finalmente, ella salió de la biblioteca, no sin antes guiñarme un ojo mientras cerraba la puerta. Entonces me di cuenta que me quedé a solas con Damián, y en cuanto nuestras miradas se cruzaron, pude notar el deseo con el que sus ojos me miraban. Quería correr hacia él y dejarlo besar mis labios hasta desgastarlos.—Ya es hora de descansar —dijo rompiendo con el silencio.—Tiene razón —contesté con nerviosismo.Mi cuerpo tiembla ligeramente, insistiéndome a gritos que corra a sus brazos. Damián se acerca a mi, haciendo más difícil que me controle.—La extraño tanto —susurró con un tono profundo y varonil. Me quedé en silencio, incapaz de responderle, y permanecí con la mirada baja —Antes, por lo menos, me buscabas para discutir. Ahora ni siquiera me mira —agregó.—E-es lo mejor —titubeé nerviosa y retrocedí un paso.—¿Por qué se aleja? —me preguntó tom
Después de aquel enfrentamiento con Belinda, decido ir a mi habitación para calmarme y luego volver con Linsey, pero al llegar, me encuentro con Jennifer. —¡Me encantó, simplemente me encantó! —dijo emocionada.—¿De qué hablas? —fruncí el ceño confundida.—De cómo pusiste a la víbora de Belinda en su lugar. ¡Me fascinó! —expresó con una sonrisa de oreja a oreja, y yo me reí un poco.—Deberías dejar de escuchar detrás de las puertas.—Soy muy curiosa —contestó con orgullo, y continuó. —Pero de verdad Daphne, al principio pensé que te dejarías humillar de esa estúpida, y estuve por entrar a defenderte, pero no lo hiciste, te defendiste de una forma magistral —me felicitó.—Bueno, solo espero que ya le haya quedado claro que no le voy a permitir que me humille y mucho menos que me amenacé, y si sigue metiéndose conmigo, me voy a defender.—¡Así se habla!, ¿Y ahora qué te parece si vamos con Linsey y ambas me ayudan a escoger mi outfit para mi cita con Lucas?, Por fin llegó el día, y te
A pesar de todas las amenazas y de sus comportamientos; Lucas para mí no ha dejado de ser la persona en la que más confío y mi mejor aliado.Somos mafiosos, criminales que buscamos a toda costa salirnos con la nuestra, así que en parte lo entiendo. Cuando entré a esta casa, vi a todos como mi escondite y nada más; no soy diferente a Lucas, y al igual que él ahora, esta familia también me hizo cambiar.—No te preocupes, ambos aún tenemos un pasado con el cual luchar, y secuelas de lo que fuimos. Pero desde que llegué a esta casa, simplemente quiero cambiar —expresé pensativa.—Últimamente yo también —respondió.—¿Y quién te motiva a eso? —le pregunté conociendo de antemano la respuesta.Lucas se sonroja nuevamente y sonrío.—Ya no más amenazas, te lo prometo.—Te lo agradezco.Lucas me abraza y yo hago lo mismo. Me doy la vuelta para entrar a la casa, pero la voz de Lucas me detiene.—Si te das cuenta de lo que esto significa, ¿Verdad? —al escucharlo me giro hacia él y lo miro expectan
————Al día siguiente————Había sido una noche horrible, y la más dolorosa desde que llegué a esta casa. No pude conciliar el sueño, así que hoy me sentía agotada, física y mentalmente. Sin embargo, tenía que reponerme, y sonreirle a mi pequeña.Como todas las mañanas de escuela, la ayudé a arreglarse, a revisar que sus útiles estuvieran completos, y a desayunar. Luego venía la parte que más me costaba, despedirme de ella.—Te amo mucho —le dije abrazándola con fuerza.—Yo también te amo Daphne, te amo mucho y voy a extrañarte —expresó Linsey sin querer irse.Cada mañana era igual, no nos queríamos separar. Pero hoy en especial, necesitaba todo su amor y todo su cariño; sentía que eso me mantenía aflote.Solo bastaba que sus bracitos me abrazaran con fuerza para sentirme mejor y segura.—Tendré que llevarlas a ambas a la escuela —bromeó Lucas, quién esperaba a Linsey.Ambas nos reímos y luego nos separamos un poco para mirarnos.—¿Y si vienes conmigo, Daphne? —me preguntó esbozando un
Jennifer, Lucas, Olivia y hasta Linsey, se enteraron de lo ocurrido. Justo ahora todos estamos en la cocina esperando la llegada de Damián. Mientras tanto yo trato de calmar a Linsey que no ha parado de llorar.—No quiero que te vayas —sollozó con tristeza.—No mi corazón yo no me voy a ir —le dije tratando de consolarla, pero Linsey parecía no poder calmarse.—¡Maldita sea la hora en la que esa arpía llegó a esta casa! —soltó Jennifer con furia.—Yo no pensé que la señorita Belinda fuera... bueno... tan ella —dijo Olivia tratando de mantener ese respeto que siempre ha tenido hacia las personas.—Es un ser humano despreciable —espetó Jennifer.—Bueno es obvio que cometió un error metiéndose contigo Daphne, tú eres de las que se deja pisotear de nadie —agregó Lucas, quién acaricia suavemente los hombros de Jennifer, intentado tranquilizarla.Linsey recuesta su cabeza en mi pecho tratando de dejar de llorar mientras yo la abrazo y acaricio su cabello.—Aún así, creo que no debí ser tan
Ambos hemos perdido la noción del tiempo, y no teníamos planeado separarnos. ¿Cómo podríamos después de negarnos tantas veces este amor?, Hemos sido víctimas de nuestra propia terquedad, de nuestros miedos y confesiones no dichas, pero hoy todo eso a quedado sepultado por el amor que en silencio sentimos desde la primera vez que nuestras miradas se cruzaron.Las manos de Damián se posan en mi cintura, y al hacerlo, las aprieta con firmeza, haciendo que mi corazón dé un salto.—No sabes cuánto deseé que esto pasara... —dijo sin dejar de besarme. Él tampoco podía soltar mis labios, al igual que yo no podía soltar los tuyos.—Te amo, Damián —expresé extasiada.—Te amo tanto, Daphne —respondió con la misma emoción en su voz.Por fin separamos nuestros labios, y nuestras miradas se encuentran. Puedo ver en sus ojos el deseo, y sé que él puede verlo en los míos.Sus manos se mueven inquietamente en mi cintura mientras las mías bajan de su cuello, hasta su pecho. Nuestras respiraciones se vu
Deseaba tanto estar en sus brazos que estaba por empezar a caminar hacia su habitación sin perder ni un segundo más. Sin embargo, había algo que me detenía...Mordí labio inferior tratando de calmar un poco mi ansiada de él.—Yo también muero por estar entre tus brazos, pero no con ella aquí —pronuncié viéndolo fijamente con decisión.Damián me observa en silencio por un momento y luego suelta un suspiro acompañado de una pequeña sonrisa, mientras acaricia delicadamente mi mejilla.—Tienes razón, es mejor esperar —concordó.—¿De verdad estás de acuerdo?, ¿No te molesta? —pregunté insegura.—Claro que no, por ti esperaría la vida entera si es necesario, y jamás haría algo con lo cual te sientas incómoda. Además que ella se irá mañana a primera hora —afirmó haciéndome sonreír.—Te amo —pronuncié.—Yo más, mi amor —respondió, y unimos nuestros labios en un beso lleno de pasión.Al día siguiente desperté con la misma sonrisa con la cual me fui a dormir. Hasta ahora no había tenido una noc