Ricardo la tomó del brazo, acarició sus delicadas manos, e hizo hacia atrás un mechón de su cabello que cubría su tímido rostro–Hija mia, será un viaje para nosotros tres, , la abuela Esthela tu y y yo, es lo que siempre quisiste oh no–incorporó Ricardo, colocando una gran sonrisa en el rostro de la chica.Para Carmina significaba mucho regresar a Venecia, era la ciudad de origen de su madre y su abuela Lorena, y donde había construido gran parte de su historia. Ricardo no sabia,pero en el corazón y en la mente de aquella adolescente, dias atrás, habian empezado a generarse algunos cuestionamientos sobre su familia, Carmina habia demostrado ser mucho mas lista de lo que su padre pensaba, la joven aun no podia entender cuales eran los conflictos que cubrian la vida de su abuela materna y la de su padre, para ella habia quedado mas que claro, que esos dos no se soportaban, pero, ¿ por qué razón? Era lo que ella se había propuesto a investigar, no tenía que decirle nada a su papá, pe
Mientras Ricardo batalla con la incertidumbre que le había provocado el comportamiento de su hija, y las excusas que había expresado ella para acercarse a Bianca, cuando meses atrás parecian inseparables, Bianca, Estefy y Lorenzo, se dirigian al estudio, el abogado ansioso no podía esperar mas para revelar los detalles del mensaje que había recibido del detective perdido.Bianca había salido favorecida en esa última audiencia, con seguridad sabia que el mensaje que habia dado a la prensa, estaba resonando en los oidos de su tía.El sol en Venecia brillaba y se sentía con la misma intencidad que en Florencia a pesar de las temperaturas bajas que estaban presentando durante ese invierno. El día tenía todavia mucho para brindar, el reloj de Bianca marcaba las trece horas, ella abrió las cortinas que cubrian las ventanas de la amplia oficina de su abogado, mientras dejaba que el sol entrase con ímpetu a través de los cristales, se acomodó en un sofá al lado de su amiga incondicional, l
Cada minuto que pasaba Estefy con sus ojos fijados en la pantalla del computador, la llevaban a la misma conclusion de que estaban tratando con una criminal que se escondia detrás de su oficio como abogada. El testimonio del oficial del manicomio fue desgarrador para Bianca, ella no soporto escuchar los quince minutos que duró aquella confesion, y ni hablar el de la enfermera, que relataba con exactitud, la llegada de Paulo al hospital ese día.Bianca se alejo en silencio hacia la ventana, necesita aire fresco porque sentia que se desmayaba, Estefy y Lorenzo advirtieron la situación y decidieron poner pausa al videoNo era una situación agradable ni facil de digerir para Bianca, pero era muy valiosa y los abogados necesitaban discernir como y en que momento usarla. Estefy se aproximo a su amiga, la tomo de la mano, Bianca no disimulo su angustia, y se aproximo hacia ela con una mano en el pecho y los ojos llenos de lágrimas–Amiga debes ser fuerte, se lo mucho que te afecta cada d
Habian pasado dos o tres días desde que Ricardo y Bianca se sepraraon, para que cada uno se ocupase de sus asuntos. El empresario quien habia arreglado con su hija y su madre para volver a Venecia, bajo la mascara de unas vacaciones en familia, estaba preparado para volver a ver a su mujer.Un día después de la invitación que le habia hecho Ricardo a su mama y a su hija, ya todo estaba listo para volar ese mismo díaCarmina no empacó mucha ropa, su padre le dijo que comprarian ropa nueva, una motivacion bastante importante para ella, pues amaba ir de compras como toda señorita.Carmina no habai revelado su plan de fuga para ir a ver a su abuela mientras estuvieran en Venecia, pero algo iba a hacer, de eso estaba seguraEran las diez de la mañana y el avion privado de Ricardo ya estaba listo para volar a Venecia, el hombre esperaba deseoso el encuentro con su amada, pero no perdía de vista, los gestos o pequeñas actitudes de su hija, ¿ como iba a reaccionar ante Bianca? Se cuestiona
Bianca y Ricardo se perdieron ese día, entre besos y caricias, ambos volvieron a percibir lo que les producia estar juntos, sin duda alguna estaban destinados el uno para el otro, a pesar de que no se imaginaban la cantidad de cosas que les esperaba para atravesar, pero en ese momento, esas cosas no importaban.–Como no te conocí antes–bisbiseo Ricardo al oido de su mujer, quien permanecia entre sus brazos, recostada, sonriendo de placer–En la vida, todo tiene un tiempo de ser–respondió ella, con voz pasiva, tras besuquear y mordisquear los labios del hombre–¿Eres feliz conmigo?–le pregunto Bianca, aveces, a pesar de los fantásticos momentos amorosos que ambos vivian, ella dudaba de si era la mujer correcta para el.–yo soy el que debo preguntartelo ¿te hago feliz? Aun sabiendo que no te podré dar un hijo–añadio él, los dos estaban acostados boca arriba en la cama, mirando hacia el techo de la habitación, Ricardo prefirio no verla a los ojos, por miedo a la expresión en su rostro.
Habian pasado unas horas desde la llegada de Ricardo y su familia al hotel, y el aun permanecía allí encerrado en la suite, disfrutando de la compañía de su mujer, Bianca lo ayudo a encontrar un poco de paz ante la situacion que estaba atravesando con su hija, la mujer no podia percibir que la dulce chiquilla que conocio casi un año atrás, quien le habia demostrado tantas muestras de cariño, se haya convertido en una chica malcriada como su padre suponía.A pesar de que las cosas entre ella y Bianca, tampoco estaban muy bien, aun asi, la morocha persistio en que su comportamiento eran propios de la edad que estaba atravesando, en gran parte era cierto, pero seguian subestimando que la niña era lista, y que sus ojos y oidos han estado mas prestos de lo que Ricardo creía.–Creo que es tiempo de salir de aquí e ir con Carmina y tu madre, crees que ella quiera escucharme–preguntó Bianca, pues las diferencias entre ellas todavía seguian sin ser resueltas, el saludo calido que se dieron cu
El miedo que Bianca tenia por no ser bien tratada por parte de Esthela,se fue disipando cuando Ricardo le confeso, que su madre ya estaba al tanto de la realidad que ella estaba viviendo en ese momento, apartir de esa instancia, su tarea era ver como estaba Carmina con ella, ¡volverian a ser lo que fueron antes de su regreso a Venecia, o simplemente Carmina la seguiria ignorando fingiendo que no le importaba su presencia!Esa tardeal acercarse a la señorita,no vio mucho progreso, Carmina no se habia percatado de la presencia ni de su padre ni de Bianca, o al menos eso parecía, pues sus mirada aun no se habia apartado de la pantalla de su celular, Bianca y Esthela se saludaron, la mirada que se dieron en ese momento, paraecia que comunicaba algo, pero ninguna se atrevio a decir mas que un “Hola” acompañado de una grata sonrisa por parte de ambas, eso bastó para Bianca y se sentó a su lado, no tenian nada planeado para hacer, solo pasar la tarde juntos, o recorrer las instalaciones de
La hermosa morocha de ojos grises, caminaba al lado de Carmina por la recepcion del hotel, no muy convencida de que si las cosas habian quedado claras para la señorita, pues Carmina seguia callada, aunque habia guardo su celular y fingía prestar atención a su alrededor, y a las pocas palabras que decia Bianca, pues para ese momento, la mujer ya estaba convencida que verdaderamente Carmina habia cambiado totalmente, ¿a donde se había ido la pequeña parlanchina? Se pregunto mientras la observaba caminar al lado de ella, no lo sabía, pero indudablemente sintio que habian perdido muy adentro de la nueva Carmina.A la mujer se le terminaron las palabras, solo daban pasos sin rumbo, pero parecía que la chica disfrutaba de lo que veía, el espectáculo de la entrada y salida de gente, además,el trio musical que había en la recepción, pareció llamarle mucho la atención.La joven se detuvo justo en frente de ellos, puso su atención particularmente en el chico que tocaba la guitarra, era un jove