Chloe: Las bebidas están puestas en el lugar correspondiente, las botanas también y la música está a todo dar. Está será una noche increíble, al menos eso espero, ya solo quedan dos días para que regresemos y se dé por culminado este viaje entre amigos y familia. Zoe toma la mano de Fredd y se va corriendo por la orilla de la playa, como una pareja romántica y a su vez, como unos niños pequeños disfrutando del atardecer. Todo va bien, hasta que el rubio se dobla el pie y cae de cara en la arena, entonces mi hermana menos trata de ayudar pero primero se ríe de sus desgracias. Bufo. Ella necesita ser un poco más humana de lo que es, porque eso de estar burlándose de las personas no siempre termina por ser algo bueno, yo soy la prueba viviente de ello. Siento unos brazos posarse sobre mis hombros, el aroma que emana su perfume llega de lleno hasta mis fosas nasales y no lo dudo ni un minuto para dejarme llevar. Estar con Ethan ha sido lo mejor que me ha pasado en muchísimo tiempo,
Chloe:—¿Estás segura de esto? —Zoe frunce el ceño y sigue tirando de la ropa que meto en la maleta al suelo, llevando la contraria siempre. Desde pequeña es un verdadero grano en el trasero, pero debo admitir que es una de las personas que han mejorado mi vida con el paso de los años, la adoro.—Demasiado segura, —digo.Tomo los papeles de encima de la mesa de noche y esos, sí los coloco dentro del morral que planeo llevar con ciertas cosas personales para que a mí pequeña hermana no se le pase por la mente indagar y sacar lo que no debe.Hago un mohín con los labios. Zoe está llorando en el lugar de la cama en dónde se encuentra sentada, a ella mamá la va a llevar directo a la Universidad mientras que yo, he pensado en irme por cuenta propia para aprovechar el momento y pensar en lo qué debo o no hacer cuando llegue hasta allá.Ethan, Freddy, Ryan y Esteban se van en auto particular. Ellos dijeron que sus padres no planean meterse en sus vidas solo para no tener conflictos con ellos
Mi madre y mi hermana por poco derrumban la puerta de mi habitación de tanto tocar para que salga a comer, les dije que estaba estudiando que pronto bajaría pero siendo sincera no tengo hambre, ni una pizca de ánimo de vivir.~FlashBack~— Mírenla, ¡Parece una anoréxica! —comentó la rubia de nombre Sasha, y todas las chicas estallaron en carcajadas.Hace unos meses me había pegado la separación de mis padres, mis notas bajaron y mi apetito desapareció.— ¡Es un costal de huesos e idiota!— gritó una morena que nunca en mi vida había notado, mientras las demás no dejaban de reír.Salí del baño a medio vestir y me fui a casa, para encerrarme en la habitación******El verano de ese mismo año me encontraba trabajando en un restaurante de comida rápida a mitad de la noche.
Suena el despertador a todo lo que da por la habitación, me muevo entre las sabanas como todo un gusano para alcanzarlo cuando lo e logrado lo tiro de un fuerte golpe a un lado de la habitación y el infernal sonido desaparece.— Uff... Al fin podré dormir, —me cubrí hasta la cabeza y me largué a soñar.— ¡Brad Summers, ya es hora de levantarse! — grita mi madre apenas entra.— Cinco minutos más mamá —musito.¿A quién no le molesta que lo despierten a las seis de la mañana para ir al instituto luego de quedarse hasta las dos de la mañana viendo películas de terror? El que me diga 'Yo' o 'A mí no me molesta' definitiva debe ir a un psicólogo o biólogo para saber si es humano.Me acomodo un poco más entre las sabanas cuando siento aquel Tsunami caer sobre mí — ¡Joder! &mdash
"Nuevos compañeros"Entre al salón de químicas llevando varios suspiros y sonrisas coquetas ¡Ja! Que intente superar esto el chico nuevo.Tome asiento en uno de los puestos del final junto a Ryan y Esteban, mis amigos del alma por así decirlo.Comenzamos a hablar sobre el partido que se estaría dando el día de mañana y por el cual, hoy habría selección de dos nuevos integrantes por que los últimos se retiraron por tontas 'lesiones'— Buenos días clase, — Giramos de mala gana a ver a el profesor Tomas alias “Gafotas” debido a sus enormes lentes tipo 'trasero de botella' — Hoy tendremos un nuevo alumno. Demos la bienvenida al señor Brad Summers — Adiós a la calma, hola a la tormenta… El chico nuevo entro al salón con carita aniñada dando una sonrisa que me revolvió el
"Ayuda, salven al rubio"— Bien, ya hice lo que querías Zo y estoy en el equipo, ahora vamos a casa que apesto — comente al apenas ver a mi hermana quien brincaba de alegría por formar parte de las porristas.— No seas aburrido, —hizo puchero— vamos a disfrutar que esto no es todos los días. — Rodé los ojos y me encamine a la salida mientras ella se despedía.Note que ese chico Fredd trataba de encender su moto, lo deje pasar hasta que escuche el pitido de un carro que por lo visto el chico no escucho por los audífonos.Grite que se quitara del medio pero ni si quiera me miraba, así que sin más corrí hasta él.Todo paso como en cámara lenta, salte sobre el chico, dimos vueltas en el suelo y vi como el auto se llevó la motocicleta por delante sin pararse.— ¿¡Pero qu
"¿Nuevos amigos?"Baje del auto algo apurado ya que llegaría tarde a clase de Biología y todo porque Zoe cambio mi reloj alarma, por uno de vidrio con forma de balón de futbol que no aguanto un golpe.Corro por los pasillos hasta que choco con alguien.¡Carajo que dolor! Levanto la mirada y ¡Oh genial! El chico del ego enorme y apellido famoso, Ethan.— Lo siento, — digo al ponerme de pie y notar que este tiene el ceño fruncido.— No llego el profesor de biología, así que no llegas tarde.— Se notaba la molestia en su tono de voz, asentí para irme pero alguien me tomo de mis hombros.— Hola Brad ¿Cierto hermano? — fruncí el ceño al no reconocer al rubio que me tenía agarrado— Soy Fredd, me salvaste ayer. — Asentí al recordar el rico pote de
"Una fiesta de locos"Tuve la vaga idea de que se olvidarían por completo de que debía asistir a su reunión, pero noté al ver a Fredd pegado a la ventana de mi habitación dejando sus asquerosos fluidos allí que no me salvaría de ellos.Al terminar de cambiarme baje, deseando que estos ya no estuvieran pero mi suerte era pésima, ya que los cuatro chicos me esperaban sentados en su camioneta, trepe por la puerta y Ryan quien manejaba arranco.— ¿Cómo saben dónde vivo? —los mire con el ceño fruncido debido a mi curiosidad.— Ah, fue sencillo. Solo te hemos seguido —comento Fredd tan natural y con una enorme sonrisa mientras yo intentaba abrir la puerta para arrojarme .— Tiene seguro, no voy a dejar que manches la calle, —Ryan ladeo la cabeza y todos me miraron.— ¿Acaso son unos secuestr