Capítulo 10

Ya tengo dos semanas trabajando con Lucas y hasta hora no ha pasado nada importante; sólo acontecimientos políticos, pero eso cambió en aquella noche...

La única desventaja de mi trabajo es que cuando había noticia, Lucas llamaba, sin importar la hora. Siento mi celular vibrar a las 2 a.m. y, "¡Maldito será!" Porque sé que es por trabajo.

¡Me cago en to' lo malo del mundo entero te odio Helen! –Grito mientras me llevo el celular al odio para hablar-. ¿Lucas, qué pasa?

Vístete, paso por ti en dos minutos. –Soltó el rubio al otro lado de la línea-.

¿Te das cuenta de la hora que es?

Como si fuera algo nuevo... –Dice el muy gracioso-. Lucía, no comas nada.

Me levanto de la cama y me pongo unos jeans negros, una camisa azul, una botas negras y mi abrigo gris. Tomo mi gorro de lana porque está nevando y haciendo un frío de mil demonios.

Mientras espero a que el café esté, me doy cuenta de que mi vecina va llegando a su apartamento, desde aquí se le ve su vestido negro manchado con viñetas rojas. "Esa mujer no sabe lo que es frío". Me froto los ojos por el sueño que tengo, sirvo el café en un termo y siento cómo Lucas vuelve y llama por teléfono.

Ya voy.

–Salgo de mi apartamento y llego al pequeño parqueo donde está Lucas estacionado-.

¡Buenos días! ¿Lista para nuestra hermosa cita?

Muy gracioso Lucas, mira cómo me río. ¿A dónde vamos?

Calle "Las Ramblas".

Déjame adivinar...¿un político asfaltando la calle?

Tú y tus comentarios...hubo un asesinato. –Dijo Lucas mientras conducía concentrado en la carretera-.

...

La policía cubría la escena, se veían miles de flash, Lucas estaba hablando con un policía, me hace señas con la cabeza para que lo siga.

Cuando nos acercamos a la escena, una chica de por lo menos 20 años, está en el suelo con múltiples puñaladas, el cuchillo está a un lado clavado en algo al lado del cuerpo, no logro identificar bien qué es exactamente.

Lucas se dirige hacia el policía a cargo, mientras yo me encargo de anotar todo lo que veo. Escucho cómo unos policías hablan de que aparentemente no fue un robo, pues el cadáver posee todas sus documentaciones, dinero y prendas.

La chica estaba boca abajo, pero se le podía apreciar una melena color gris y negra, pero la parte gris estaba casi totalmente teñida por la sangre, también tiene varios cortes en la cara y sus manos están cerradas en puño como si estuviera sujetando algo.

Después de tomar las fotos y hablar con todos los implicados: posibles testigos, policías, forenses, otros reporteros...nos dirigimos a la morgue.

Mientras nos dirigíamos al auto de Lucas le dije...

¡Vaya hermosa cita a la que me has traído! Ver un cadáver es tan romántico que siento que me enamoré mientras olfateaba la sangre y observaba a la pobre chica como si fuera una jugosa carne.

¡Dios, Lucía! ¡Estás enferma de amor por mí, lo sabía, siempre lo supe, desde la primera vez que me viste entre todos esos documentos a mi alrededor!

Antes de entrar al carro, le di una última vista a la escena y algo llamó mi atención; la pelirroja de mi vecina estaba ahí parada con un largo vestido rojo concentrada, observando el cadáver con curiosidad.

Lucia, ¿te vas a subir o prefieres ir caminando?

Subí al carro y me quedé pensando en lo extraña que es mi vecina .

...

Lucas habla con un doctor y pasamos donde están analizando el cuerpo de la chica, miro mi reloj y son las 6 a.m.

Entonces Doc', ¿Qué me tiene?

¿Quién es la chica, Lucas?

Ah, ella es Lucía, mi asistente.

–Le extiendo mi mano al doctor y me presento-.

Lucas, ven, tienes que ver esto.

–Nos acercamos al cadáver y lo que ven mis ojos no dan crédito.

A la chica le dieron catorce puñaladas –Dice el doctor-. Y no se conformaron con eso; le sacaron el corazón, riñones y ojos. Su hora de muerte fue alrededor de las 10 p.m., y lo más raro fue que le insertaron un guante rojo en lugar de su corazón.

¿"Un guante"? –Pregunté sorprendida-.

Sí, un guante, pero lo curioso es que este no es el primer caso que llega a nuestro laboratorio, este es el tercero. La policía ha mantenido todo esto fuera del conocimiento público, así que por el momento querido Lucas, lamentablemente no puedes decir nada.

...

Cuando llegamos a las oficinas Lucas me encomendó investigar todas las desapariciones y asesinatos de estos últimos seis meses. Me tomó alrededor de cuatro horas acumular toda la información de toda España, pero pude encontrar un total de veintiséis niñas desaparecidas y catorce muertas. En Barcelona han muerto 5 niñas, todas de 20 años, con un modus operandi muy similar, hasta ahora todas vagabundas o prostitutas.

Después de eso volví a la morgue, necesitaba más información.

Entonces... ¿Está diciendo, que todas tienen el mismo corte y que después la suturan para que se vayan desangrando poco a poco?

Efectivamente, mientras sacan los otros órganos, el corazón sigue funcionando y así sufre menos daño.

Y, ¿qué cree usted?

La verdad no tengo idea, en las calles durante noche se ven muchas cosas,

es peligroso, pero este asesino, no se anda con juegos; sabe muy bien lo que hace.

Decidí ir al apartamento, terminaría el reporte en la casa, estaba muy cansada. Cuando voy entrando, me encuentro a Don José, está cerrando el café, lo saludo y sigo mi camino, presiono el botón del ascensor, espero que llegue, mientras espero siento a alguien detrás de mí. Cuando veo esos ojos grises y azules mirándome tan profundo me temblaron las piernas.

Hola Hades, ¿cómo estás? Tiempo sin verte.

Sí, hola, estaba fuera de la ciudad.

–El ascensor llegó y los dos subimos sin pronunciar ninguna palabra-.

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