Dentro de las cosas que no esperaba que sucedieran este año, incluyendo el intento de violación, mi amor a un boxeador profesional y el bullying que sufrí durante meses en el instituto, sin duda esto estaba primero en la lista: mi Papá. Esto, sí que no lo vi venir.
– ¡Emma! Estuve esperándote, ¿Por qué estás tanto rato en el instituto?
–Papá qué haces aquí. –solté disgustada. Miré su rostro detenidamente, sin duda los años se le habían caído encima. Se veía agotado, llevaba una barba de varios días y llena de canas.
–Qué dices, ¿Acaso no puedo venir a conversar con mi hija? –tras decir eso, soltó una risa forzad
Para los que se preguntan, éramos una bella y normal familia, hasta que mi mamá se enteró de que mi papá le era infiel y tenía otra familia. Mi mamá le pidió el divorcio, pero él no quiso, y tuvimos que ir a juicio por demanda. Luego de mucho tiempo, ganamos nosotras y mi papá quedó pobre. Al parecer ahora, se separó de su amante también a la cual trato de estafar y salió perdiendo.–Yo solo quería saber cómo estabas. –dijo, mirándome con esa sonrisa cínica que tanto me molesta. Rodé los ojos. Vino el mesero a dejar nuestros cafés. Tomé un sorbo y suspiré.–Dime la verdad. Te dije que solo tienes una hora, no hay tiempo para formalidades idiotas.S
Era Marc. Había vuelto sin avisar y estaba justo detrás de nosotros mirándonos. Me había visto.– ¿Marc? –dije, al instante Jack volteó también. En ese segundo Marc se congeló. Vio que era Jackson Callen, su ídolo de toda la vida, aquí a mi lado.– ¿Emma? –dijo él, caminando unos pasos más. Me levanté de golpe, al segundo Jack hizo lo mismo.– ¡Marc! ¿C-cuando volviste?–Recién. –Me miró a mí con desdén y luego a Jack–. ¿Sabes? cuando te vi a lo lejos supe enseguida que eras tú. Pensé en golpear al imbécil que estuviera a tu lado. Ahora veo que no
Esa noche caminé a mi casa sintiéndome mucho mejor, como si hubiese dejado atrás un gran peso que traía encima. El dolor de mi pecho desapareció. Pero aún debía hablar con Jack, y no sé qué resultará de eso… su fría reacción después de ver a Marc sigue dando vueltas en mi cabeza: “parece que tienes algunos problemas, confusiones, o lo que sea. Háblame cuando estés decidida” ¡AHGGGG! ¡Por qué tiene que ser tan maduro maldición!Estaba por llegar a mi casa cuando me detuve en seco. No podía esperar hasta mañana. Me voy a volver loca con el serio rostro de Jack paseándose por mi subconsciente. No puedo más. Salí corriendo y crucé
–Le dije a mi mamá que llegaría tarde… –dije, jugando con mi taza de té.–Quédate a dormir.Tragué saliva. ¿Acaso sabe lo que provocan sus palabras en mí? Me sentí ansiosa. No, no puedo quedarme.–No sé Jack. –ladeé la cabeza, sin poder ocultar mi sonrisa nerviosa.–No te haré nada. –dijo él con tranquilidad, enseguida me ericé como pavo alarmado–. Si quieres duermo en el sillón.– ¡No, no, no! ¿Qué dices? No es por eso. No hay problema con eso. –Mi cara se volvió roja al instante. Jack sonrió y tomó mi ma
–Papá ella es Emma.–Sí, la recuerdo.Mierda…Me sentía como una súper estrella caminando junto con Jack y su staff. La gente se movía alrededor, las luces de las cámaras de los periodistas, y los fanáticos. Era increíble. Parecía una película, estoy viviendo con Jack como es siempre antes de una pelea. Su trabajo, su pasión, su todo. Llegamos hasta un largo pasillo con varias puertas. Allí los guardias detuvieron a todos los que nos seguían. Caminamos hasta llegar a una habitación con una placa dorada donde salía escrito: Jackson Callen. Lo admiré los pocos segundos que estuve allí
Emma. ¿Emma?–¿Si? –abrí la puerta del baño y me encontré con Jack frente a mí. Acarició mi cabeza y me miró a los ojos.–Emma, quiero avisarte que todo el proceso antes de la pelea es algo rápido y estresante. Tampoco podré estar contigo mucho tiempo.–Jack, está bien… tú no te preocupes por mí. Solo concéntrate en tu pelea.¡Callen retrocede! ¡Callen retrocede!Round 2¡Suena la campana! ¡Jack se salva por poco! No puedo creer lo que estoy viendo, Jack parecía alterado. Volvió a la es
Tomé su mano y le di un beso en la mejilla antes de que abrieran las puertas del ascensor. Habían palabras estancadas en mi lengua que no pude dejar salir. ¿Lo asustaría? ¿Pensaría que soy infantil? Después de todo, qué se yo de eso. Jack me hacía sentir bien. Me hacía creer que lo sé. Pero la verdad es diferente.¡Esta pelea está que arde y solo vamos en el tercer round! Oigo a la multitud pedir un nocaut... ¡La cosa es saber de quién! Nunca me había emocionado tanto una pelea. ¿Era realmente la pelea? ¿O mis ganas de apoyar a mi novio? sonreí como idiota al pensar en esa palabra. Me sentí parte de todo esto. De su mundo. Tanto así, que me uní a los gritos de los demás.&
Me arrepentí de no haber estado allí desde el primer momento. Sé que no es mi lugar, aún no sé nada de boxeo, y aquí están las personas que lo ayudan, que le enseñaron desde que era solo un niño. Pero aun así no quería dejar este puesto. Me sentía más cerca de él. Y su figura en el ring, en los reflectores, era anonadante. No podía dejar de admirar cada centímetro de él. Es increíble. El boxeo es increíble.¡Empieza el quinto round y la arena está que arde! ¿Esperamos ver un nocaut este round? Es lo más probable. En un intercambio de golpes que comenzó al instante luego de la campana, mi corazón saltó como conejo. La vibra y potencia de los golpes era completamente diferente a cuando un