Olivia se quedó mirando a Simone Martin y dijo:— ¿Samantha sabes que estás aquí? — No, si es por ella, te entrega a Alexander con lazo y todo, envuelto en papel para regalos— dijo Simone con ironía— estoy acá porque no voy a permitir que mi nieto crezca sin su padre. Olivia arrugó el entrecejo, no le gustó la intromisión de la madre de Samantha y no iba tampoco a permitir que le quitaran a Alexander. — Simone yo entiendo que estés preocupada por el futuro de tu nieto, pero Samantha tiene a Reginald Lambert, ella me dijo claramente que no le interesa mi Alexander, — dijo Olivia con la barbilla altiva. — Primero fue sábado que domingo querida Olivia, y Alexander no es tuyo, más es de Samantha que tienen un hijo juntos— dijo Simone sin inmutarse— además Reginald es solo un pelele que mi hija está utilizando para alejar a Alexander por culpa tuya. — ¿Por culpa mía? — refutó Olivia— querida cuando me comprometí con Alexander, Samantha no estaba por ningún lado— se defendió Olivia— aho
Al fin ella dijo con voz de derrota. — Está bien Alexander, se hará como tú digas, me casaré contigo, pero dame a mi hijo— pidió Samantha. Él sonrió con sonrisa de lobo que sabe que tiene su presa atrapada. — No confío en tí— dijo Alexander— te vienes conmigo y el bebé o me llevo a mi hijo conmigo, mientras se prepara la boda, así me aseguro que no huirás de míSamantha se sintió acorralada, porque ese era su plan una vez que saliera de su casa, no le quedó más remedio que decir. — No voy a huir, cumpliré mi palabra— dijo Samantha— el niño necesita alimentación y yo soy parte de su dieta por la leche materna. Alexander se sintió satisfecho y dijo:— Ve por tus cosas y las del bebé te vienes conmigo a casa. Samantha apretó sus labios en señal de impotencia y rebeldía y salió hasta su habitación a cumplir la orden de Alexander, siempre huyó de las imposiciones de su madre y allí estaba claudicando ante él, solo por su hijo. En el camino hacia su habitación se encontró con su padr
Arnold giró sobre sus talones y dijo irónicamente. — Si, tendrá a las dos mujeres al mismo tiempo. Salió y dejó a Simone pensando en lo que había escuchado, era una broma de muy mal gusto se su esposo, Alexander no era capaz de esa aberración, de todas maneras se iba a asegurar si lo que había dicho Arnold, era cierto. Mientras en casa de Olivia ésta pensaba en sus estrategias para eliminar de una vez por todas a su amiga Samantha del camino y quedarse definitivamente con Alexander O'Sullivan.Buscó su celular y marcó el número de su prometido y esperó unos minutos, escuchó la voz de él y dijo:— Hola querido, ¿no piensas venir a verme? — De hecho estoy saliendo hasta tu casa, nos vemos en unos minutos, dile a tu padre que también esté, necesitamos hablar— dijo Alexander y cerró la llamada. Minutos más tarde llegaba y Olivia se encontraba nerviosa, había notificado a su padre y este esperaba pacientemente, mientras ella se devanaba el cerebro buscando la razón de aquella conversa
Era ya hora de la cena cuando Alexander llegó a su casa, había tenido un día agotador, su madre estaba en el salon y tenía cara de preocupación, Alvin no estaba bien, había pasado el resto del día con taquicardia. — ¿Por qué no me llamaste mamá? ¡Hay que ir hasta la clínica!— dijo Alexander con urgencia en su voz— ¿Dónde está Samantha? — No ha salido de su habitación— dijo Eve— no se, supone que ella está enamorada de tí, no parece estar a gusto acá. Alexander se pasó las manos por sus cabellos y dijo:— Después hablamos de éso, ahora lo importante es la salud de papá— dijo él— vamos a buscarlo e ir hasta la clínica, en el camino llamamos al doctor. — Yo lo llamé, pero al parecer anda fuera de cobertura, no respondió— dijo Eve. Salieron lo más pronto que pudieron y Alexander llamó al doctor encargado de la, salud de su padre, después de unos momentos respondió:— Ya iba a llamarte, ví las llamadas pérdidas de tu madre, ¿qué sucede? — Es papá, no se siente bien, vamos camino a la
Olivia había salido unos minutos antes respirando odio por Samantha, Eve la vió salir justo cuando salió de su habitación, se preguntó: «¿Qué hacía esa chica allí? ¿Estaría molestando a Samantha? Nunca le había gustado que Alexander se estableciera un compromiso con ella, le había parecido peligrosa y vulgar. No había dicho nada porque ya no quiso más enfrentamientos con su hijo, eso solo había traído distanciamiento y mucho dolor a su esposo, un dolor que lo había llevado a la tumba, nuevamente se encerró en su habitación a llorar por la partida física de su marido. No vió que instantes después Samantha abandonaba la mansión con su nieto. Mientras ésta llegaba a su casa y al entrar estaba Simone allí sentada en el. vestíbulo. — ¡Hola mamá! — saludó Samantha. — ¡Hija! ¿Qué haces acá? ¿Te peleaste con Alexander? — preguntó Simone. — Ese hombre es un pervertido mamá, ¿puedes creer que está conmigo y Olivia al mismo tiempo?— respondió Samantha con indignación. — ¡Es cierto entonce
Alexander no podía entender cómo fue a enredarse con ésta mujer, tan sumisa que parecía cuando llegó a su oficina rogando por ayuda para su padre, solo era una trepadora y además estaba loca see remate. Ya buscaría la manera de zafarse de esta mala influencia en su vida, ahora lo importante era encontrar a Samantha, que tenía el destino en contra del amor de ellos dos, ¿porque nuevamente ésta separación? Sintió vibrar su dispositivo móvil y vió un mensaje de Olivia, o mejor dicho un video, lo abrió y vió las escenas que la muy desgraciada había grabado de él y ella, todo había sido parte de un plan para destruir su posibilidad de casarse con Samantha. Él como un mismo estúpido había caído en la trampa, era tan idiota si tan solo hubiera esperado hasta encontrar a Samantha, todo hubiera sido diferente,al parecer era una costumbre de ella esconderse de los problemas, en vez de enfrentarlos. Ya habían pasado unos días y Alexander aún seguía sin saber nada de Samantha y su hijo se sen
Alexander seguía esperando que el detective que había buscado quien le estaba ayudando a encontrar a Samantha, no se la podía haber tragado la tierra, el hombre era muy astuto y estaba husmeando por todos los lugares. Se decía que alguien tuvo que verla salir a alguna hora, una persona no se había esfumado en el aire, así que hablaba con cada persona del servicio doméstico para obtener cualquier indicio que lo pudiera llevar a encontrar a Samantha Martin; No era tan fácil, pero el hombre hacía su esfuerzo. Un mes más había pasado y el detective se reunió con Alexander esa tarde, tenía noticias pero nada concreto aún. — Señor O' Sullivan, su novia salió de la casa de sus padres a media noche por alguien que vino por ella, — dijo el hombre— pero hasta ahora no se quien la ayudó a salir, obviamente viajó en ese auto por eso no hay registros ni en los aeropuertos ni en las estaciones terrestres. — Otra vez estoy a oscuras con Samantha, — dijo Alex— pero no voy a darme por vencido así m
El padre de Samantha miró a Alexander con tristeza y dijo:— No Alex, no sé donde está. No quiso informar que ella lo había llamado, porque realmente no sabía de dónde había llamado su hija. Alexander hizo una mueca con sus labios y salió de la Oficina, ya mañana estaría casándose con Olivia, no la había visto desde el día que la visitó en su casa, pero sabía qué todo ya estaba listo para el día siguiente por el padre de ella. Ese día Samantha decidió aparecer nuevamente, había recordado que Olivia le había pedido ser la madrina de su boda, así que cuando su padre llamó arregló sus cosas y muy de mañana estaba en casa de sus padres. Simone al verla casi le da un infarto de pura alegría. — ¡Samantha hija que alegría verte! ¡Te he extrañado tanto! — Hola mamá también me alegra volver a estar en casa— respondió ella.Simone de inmediato tomó a su nieto en brazos que ya estaba próximo a cumplir los ocho meses. — ¡Ven acá Samuel con tu abuela que te adora mi niño hermoso!— exclamó S