Una hora tardó Alexander viajando hasta donde vivía su amigo Tony Rizzo, tenía la necesidad de que su amigo le ayudara a encontrar una explicación a la ilusión que había crecido en su corazón cuando Samantha se había acostado con él. Tony estaba esperando a Alexander, ya que cuando lo vio llegar salió a su encuentro, realmente se veía con una carga emocional bastante grande, le pasó la el brazo por la espalda y le dijo palabras de confort. — A ver mi querido amigo; ¿que está sucediendo? Me preocupa ver tu rostro compungido, al parecer tienes un dolor grande. Alexander que venía con su corazón apretado no aguantó más y lloró como un niño que ha perdido algo muy preciado. Tony solo le pasaba la mano por la espalda en señal de consuelo. — Desahogate amigo, es bueno limpiar el alma— dijo Tony. — Me siento fatal amigo, no entiendo qué sucedió con Samantha, se supone que estaba enamorada de mí, hicimos el amor, y ahora dice que solo fue una noche de copas— le dijo Alexander— me detes
Simone miró a Arnold y éste se alzó de hombros, y ella dijo:— ¿Te das cuenta, de todas las vueltas que diste para ir a enamorarte del hombre que huiste, para evitar el matrimonio por negocios?— dijo Simone meneando su cabeza de un lado a otro. — ¿Estás diciendo que Alexander O'Sullivan es el hombre con quien buscabas formar una alianza comercial?— preguntó Samantha con curiosidad. — Así es Señorita terquedad— dijo Simone— y ahora eres madre soltera y con un hijo que es de él, me imagino que no deseas estar con él, porque de burló de tu amor. — Supones bien mamá— dijo Samantha— no quiero que se me acerque. — Ahora entiendo porque estás metiendo a Reginald en tu cama— dijo su madre— ese muchacho es un pobre diablo, nada digno de ser tu marido, mucho menos el padre de mi nieto. — Mamá, yo soluciono mi vida, por favor dejame en paz— terminó diciendo Samantha. Salió de allí dejando a sus padres sin más que decir, estaba enojada por haber reconocido delante de ellos que si hijo era h
Alexander miró a Simone Martin por unos segundos y luego dijo:— Es lo que más anhelo en mi vida señora, pero tengo mi palabra con Olivia, quien no tiene la culpa de lo que sucedió entre Samantha y yo. — Entonces tu palabra está por encima del amor y tu responsabilidad como padre— dijo Simone levantándose de su asiento— que decepcionada me voy, mi hija entonces tiene razón, mejor que Reginald Lambert le de el apellido a Samuel y se olvide de tí para siempre. Alexander al ver que Simone Martin pensaba salir dijo:— ¡Espere un momento! Usted tiene razón, debo velar por mi hijo, iré a hablar con Samantha y me casaré con ella, es mi responsabilidad atender a mi familia. La mirada de triunfo se apoderó de Simone quien habló diciendo:— Esa respuesta me gusta más— y preguntó con interés— ¿Que harás con Olivia Walsh? — También voy a solucionar eso— dijo Alexander con resolución. Simone salió complacida del despacho de Alexander, en la sala estaban los padres de él y ella ahora habló c
Olivia se quedó mirando a Simone Martin y dijo:— ¿Samantha sabes que estás aquí? — No, si es por ella, te entrega a Alexander con lazo y todo, envuelto en papel para regalos— dijo Simone con ironía— estoy acá porque no voy a permitir que mi nieto crezca sin su padre. Olivia arrugó el entrecejo, no le gustó la intromisión de la madre de Samantha y no iba tampoco a permitir que le quitaran a Alexander. — Simone yo entiendo que estés preocupada por el futuro de tu nieto, pero Samantha tiene a Reginald Lambert, ella me dijo claramente que no le interesa mi Alexander, — dijo Olivia con la barbilla altiva. — Primero fue sábado que domingo querida Olivia, y Alexander no es tuyo, más es de Samantha que tienen un hijo juntos— dijo Simone sin inmutarse— además Reginald es solo un pelele que mi hija está utilizando para alejar a Alexander por culpa tuya. — ¿Por culpa mía? — refutó Olivia— querida cuando me comprometí con Alexander, Samantha no estaba por ningún lado— se defendió Olivia— aho
Al fin ella dijo con voz de derrota. — Está bien Alexander, se hará como tú digas, me casaré contigo, pero dame a mi hijo— pidió Samantha. Él sonrió con sonrisa de lobo que sabe que tiene su presa atrapada. — No confío en tí— dijo Alexander— te vienes conmigo y el bebé o me llevo a mi hijo conmigo, mientras se prepara la boda, así me aseguro que no huirás de míSamantha se sintió acorralada, porque ese era su plan una vez que saliera de su casa, no le quedó más remedio que decir. — No voy a huir, cumpliré mi palabra— dijo Samantha— el niño necesita alimentación y yo soy parte de su dieta por la leche materna. Alexander se sintió satisfecho y dijo:— Ve por tus cosas y las del bebé te vienes conmigo a casa. Samantha apretó sus labios en señal de impotencia y rebeldía y salió hasta su habitación a cumplir la orden de Alexander, siempre huyó de las imposiciones de su madre y allí estaba claudicando ante él, solo por su hijo. En el camino hacia su habitación se encontró con su padr
Arnold giró sobre sus talones y dijo irónicamente. — Si, tendrá a las dos mujeres al mismo tiempo. Salió y dejó a Simone pensando en lo que había escuchado, era una broma de muy mal gusto se su esposo, Alexander no era capaz de esa aberración, de todas maneras se iba a asegurar si lo que había dicho Arnold, era cierto. Mientras en casa de Olivia ésta pensaba en sus estrategias para eliminar de una vez por todas a su amiga Samantha del camino y quedarse definitivamente con Alexander O'Sullivan.Buscó su celular y marcó el número de su prometido y esperó unos minutos, escuchó la voz de él y dijo:— Hola querido, ¿no piensas venir a verme? — De hecho estoy saliendo hasta tu casa, nos vemos en unos minutos, dile a tu padre que también esté, necesitamos hablar— dijo Alexander y cerró la llamada. Minutos más tarde llegaba y Olivia se encontraba nerviosa, había notificado a su padre y este esperaba pacientemente, mientras ella se devanaba el cerebro buscando la razón de aquella conversa
Era ya hora de la cena cuando Alexander llegó a su casa, había tenido un día agotador, su madre estaba en el salon y tenía cara de preocupación, Alvin no estaba bien, había pasado el resto del día con taquicardia. — ¿Por qué no me llamaste mamá? ¡Hay que ir hasta la clínica!— dijo Alexander con urgencia en su voz— ¿Dónde está Samantha? — No ha salido de su habitación— dijo Eve— no se, supone que ella está enamorada de tí, no parece estar a gusto acá. Alexander se pasó las manos por sus cabellos y dijo:— Después hablamos de éso, ahora lo importante es la salud de papá— dijo él— vamos a buscarlo e ir hasta la clínica, en el camino llamamos al doctor. — Yo lo llamé, pero al parecer anda fuera de cobertura, no respondió— dijo Eve. Salieron lo más pronto que pudieron y Alexander llamó al doctor encargado de la, salud de su padre, después de unos momentos respondió:— Ya iba a llamarte, ví las llamadas pérdidas de tu madre, ¿qué sucede? — Es papá, no se siente bien, vamos camino a la
Olivia había salido unos minutos antes respirando odio por Samantha, Eve la vió salir justo cuando salió de su habitación, se preguntó: «¿Qué hacía esa chica allí? ¿Estaría molestando a Samantha? Nunca le había gustado que Alexander se estableciera un compromiso con ella, le había parecido peligrosa y vulgar. No había dicho nada porque ya no quiso más enfrentamientos con su hijo, eso solo había traído distanciamiento y mucho dolor a su esposo, un dolor que lo había llevado a la tumba, nuevamente se encerró en su habitación a llorar por la partida física de su marido. No vió que instantes después Samantha abandonaba la mansión con su nieto. Mientras ésta llegaba a su casa y al entrar estaba Simone allí sentada en el. vestíbulo. — ¡Hola mamá! — saludó Samantha. — ¡Hija! ¿Qué haces acá? ¿Te peleaste con Alexander? — preguntó Simone. — Ese hombre es un pervertido mamá, ¿puedes creer que está conmigo y Olivia al mismo tiempo?— respondió Samantha con indignación. — ¡Es cierto entonce