La tengo sentada entre mis piernas sobre este sofá que está siendo testigo del mejor momento de nuestras vidas. Mis brazos la sujetan fuertemente mientras que su espalada está apoyada sobre mí —Aun no lo creo.— Comenta haciéndome reír.
—Te lo dije...— Replico. —Parece que te conozco más que tú a ti misma.— La escucho resoplar y sé que por una parte le da rabia que haya tenido razón, cosa que me hace mucha gracia.
—¿Cómo lo supiste?— Pregunta volteando su rostro un poco para poder verme.
Una enorme sonrisa se dibuja en mi rostro e intento no reírme. —Bueno, primero que nada, es que hemos estado buscando a este bebé como dos locos.— Digo y finalmente me rio contagiándola a e
Si la curiosidad matara, yo ya estaría muerto. Desde que ha llegado a la casa con esas bolsas, no me ha querido decir que es lo que tiene en mente. Apenas estoy asimilando la noticia de que seremos padres y ahora no tengo ni idea de lo que ella ha preparado para pagar su apuesta. Terminamos de cenar bajo miradas llenas de felicidad y palabras que no nos salen de la boca y ella se levanta de la mesa.—Nene, encárgate de lavar los platos que yo tengo una sorpresa que preparar. Te espero en la habitación en como veinte minutos.— Me dice abrazándome desde atrás y me da un beso en el cuello que me deja sonriendo como un tonto.Yo sé que está loca, que no es de esas mujeres normales las cuales está llorando de emoción ante la noticia de su embarazo, y me encanta que sea así, pero en momentos como este
La tengo abrazada entre mis brazos con su rostro apoyado sobre mi pecho mientras que nuestras respiraciones vuelven a la normalidad, y no puedo dejar de pensar en la sorpresa que me he llevado. Rio solo ante mis pensamientos y mi esposa inmediatamente me mira con sospecha.—¿Qué te sucede? ¿Te has vuelto loco que ríes solo?— Pregunta en un tono burlón que me hace reír nuevamente.La adoro, es tan única y divertida, que dudo que algún día pueda aburrirme con ella —Solo pensaba en lo extrañamente única que eres y no dejo de preguntarme si escondes alguna otra sorpresa... No sé, quizás sabes karate o sabes bailar lambada o no se... Señora Marín, ¿hay alguna otra cosa que me tenga que enterar y en estos meses no me hayas dicho?— Inquiero con un to
Hoy ha sido uno de esos días donde ella se ha levantado de la cama demasiado temprano y no ha dormido casi nada. Sé que la videoconferencia la tiene muy nerviosa, la observo preparar el desayuno a toda velocidad, y no la culpo por como se siente, hoy se define parte de nuestro futuro. Si le aprueban la oficina aquí, estaremos más tiempo juntos, y si no lo hacen no sabemos cómo haremos. Lo único que sé es que no pienso alejarme de ella y de nuestro hijo ni un solo momento.Se mueve tan rápido por toda la cocina, tanto que me estoy mareando. —Rubia, ¿podrías bajar la velocidad? Me estoy mareando, y creo que nuestro hijo debe de estar sintiendo lo mismo.— Digo entre risas intentan disminuir un poco el estrés que hay en ella.—Es que estoy muy nerviosa, no pude dormir y mi me
Las mismas horas que llevo solucionando problemas de la empresa, son las que lleva ella encerrada en su estudio ocupada con la videoconferencia. Sé lo nerviosa y ansiosa que estaba con todo eso y también soy consciente que nuestro futuro depende en gran parte de lo que los accionistas decidan. Dejo mi laptop a un lado, y me acuesto en el sofá mirando al techo.Mi mente divaga por las diferentes situaciones que pueden ocurrir y lo único que tengo por seguro, es que decidan lo que decidan, no habrá nada que me separe de ella. Amo muchísimo a mi país, a mi tierra, a mi gente, pero de ser necesario, me iría con ella al fin del mundo con tal de tenerla a mi lado para siempre. Cierro mis ojos e intento dejar mi mente en blanco para no empeorar los nervios que ya siento.Un par de manos se posicionan sobre mis ojos tapánd
Unos días despuésEl sol pega fuerte en mi piel y me encanta, estos últimos días de verano son los que aprovecho con más ganas antes de que llegue el otoño y la caída de las hojas de los arboles. Debo admitir que no es mi estación del año favorita, pero de alguna manera marca el inicio de un cambio, es donde las hojas caen para dar paso a aquellas nuevas y llenas de vida, así es como me siento. Mañana es el inicio de una nueva vida para nosotros; mañana es nuestra boda, esa que es consecuencia de nuestro amor y no de una borrachera. Mañana inicia todo entre nosotros.Unas manos cubren mis ojos que ya estaban cerrados y sonrió al saber que es ella. No sé como lo hace, pero consigue acercar su boca a la mía y besarme al revés, tal como aquella famosa escena en l
No comprendo el nivel de nervios que tengo 《Gianluca, tú ya estas casado con ella.》 Me repito a mi mismo parado al final del pasillo de esta iglesia donde todos me observan detenidamente. Acomodo el moño de mi esmoquin una vez más, y mi hermano ríe.—¡Fratello, que vas a romper el moño!— Me dice entre risas y rio de los nervios.—¡No puedo más!— Comento y él ríe mucho mas.—No te da miedo hacer presentaciones frente a cientos de personas, ¿y te da miedo esto?— Me pregunta sin poder entender mi lógica, y vamos... yo tampoco la entiendo.Él no entiende lo que me sucede, no solo es
Después de lo que ha sido una sesión de fotos digna de portadas de las revistas más importantes del mundo, entramos al recinto donde se lleva a cabo la celebración de nuestra boda. Cabe destacar que es en uno de sus lujosos hoteles aquí en Roma, a este punto, no es sorprendente el altísimo nivel de todo lo que nos rodea, y mucho menos la atención que nos brindan todos.Bajo el sonido de una música instrumental, entramos al salón y el lugar se colma con aplausos de los presentes. Todos nos vuelven a felicitar a pesar de que ya lo han hecho en la iglesia y debo de admitir que estas felicitaciones son las más importantes de mi vida; bueno quizás es nada queden en el segundo puesto. Hemos decidido contarle a mi familia lo del embarazo esta noche y se cómo se pondrán...—Mi amor. &mdash
La celebración de nuestra boda es increíble, jamás imagine que podíamos bailar tanto. Los invitados también parecen estar pasándola increíble, y mi familia aun sigue celebrando la noticia del nuevo integrante de la familia. Nos han regañado por haber elegido el momento del vals para darles la noticia, pero vamos... nosotros no somos una pareja típica, ¿Por qué serlo en este momento?Hemos cumplido con todos los protocolos de la ceremonia y ahora seguimos bailando pegados. Nos movemos al compas de la música y el roce de su cuerpo con el mío despierta miles de sensaciones en mi. —Amor...— Me susurra al oído mientras nos movemos y ella busca que nuestros cuerpos queden aun más juntos.—Dime rubia mía.— Le respondo de la misma manera mientras mis