--Señorita, ¿Se encuentra bien?—preguntó preocupada la tía Maya al ver a Rouss salir corriendo para el baño. No era la primera vez que lo hacía, ya llevaba varios días en ese estado y el joven amo no lo sabía ya que la señorita no quería preocuparlo, alegando que solo era un virus pasajero y estaría bien en unos días. ¡Pero ya habían pasado varios días y seguía igual o peor!. ¿Qué debería hacer?. --Estoy bien, no te preocupes—respondió Rouss lavándose la boca. Al mirarse en el espejo, su rostro estaba un poco demacrado, su piel se veía pálida y sus ojos cansados. Con un repentino pensamiento, los ojos de Rouss se abrieron conmocionados, ¿No podía ser posible?. Recordando las fechas, se dio cuenta que algo estaba mal. Apresuradamente salió del baño como un torbellino asustando a la tía Maya. --Señorita, ¿Piensa salir?—preguntó con voz ansiosa y mirada preocupada. --Solo será por muy poco tiempo, volveré antes de la cena--. La tía Maya no se sentía bien con que Rouss saliera sol
La figura de la tía Maya camina desesperada de un lado a otro en la puerta de la entrada, sus ojos angustiados intercalaban miradas entre el reloj y la entrada deseosa que la señorita llegará.Ella había dicho que volvería en dos horas, ¡Pero ya habían pasado tres horas y no llegaba!. ¿Y si le pasó algo?. Ella no había estado bien de salud, podría haberse desmayado a mitad de la calle…El rostro de la tía Maya palideció adquiriendo una expresión aterrada al tener tal pensamiento, así que salió corriendo a tomar el teléfono y llamar a Daniel.Por su parte, Daniel había pasado toda la mañana con una inquietud en su ser, sentía una sensación de opresión que no podía explicar. En ocasiones tuvo que aflojarse la corbata y desbotonar los botones de la camisa a la altura de su cuello para poder respirar.Su mirada inquieta se dirigía a su reloj donde el punto rojo palpitante como el corazón de su esposa latía sintiéndose más tranquilo al verlo, pero esa sensación volvía a surgir.Sin poder a
Después de haber pasado un mes, los integrantes de la familia Wyner fueron sentenciados.Lizzy fue internada en un hospital psiquiátrico ya que su estado mental había colapsado, pasaba gritando que ella era Rouss y que mandarán a llamar a Daniel y a Bratt para que la sacarán de ese lugar.Había días en las que estaba consiente y no tenía alucinaciones, en esos días se tornaba como una bestia sedienta de sangre con un aura asesina queriendo destruir a Rouss, y más al ver la horrible marca en forma de X en su mejilla que la acompañaba todo los días.Ella siempre fue vanidosa, siempre cuidada su apariencia, y ahora su rostro estaba dañado por esa perra. ¡Y no solo era eso!.Janet la había ido a intimidar en busca de venganza, en su último visita, le había hecho otra cicatriz en la mejilla izquierda.¡Esas malditas!.Mientras Lizzy gritaba y maldecía, una feliz pareja de esposos escuchaba los latidos del corazón de su pequeño hijo nonato, una gran sonrisa adornaba sus labios.Los ojos de
La villa jamás había estado tan animada como lo estaba en la actualidad, y todo se debía a los nuevos integrantes de la familia. Una hermosa sonrisa estaba enroscada en lo labios de Rouss al ver a sus hijos. Si le hubieran dicho hace diez años que se casaría con él hombre más rico y temido de toda la ciudad y que además volvería amar y tendría hijos, se había reído fríamente y le habría lanzado una afilada mirada fría congelando hasta la muerte. Pero ahora no solo tenía seis años de casada con él hombre más poderoso y que a la vez era un sinvergüenza intimidador sino que tenía tres hermosos hijos con él. Su hijo mayor tenía seis años, y los gemelos tenían tres años y…cabe la posibilidad que este nuevamente embarazada, aunque solo es una sospecha, aún no la confirmado. --Mami, mami, ¡Nya quiere jugar!—gritó su pequeña hija de tres años alzando sus brazos para que la sostuviera. Rouss dejo la taza de te sobre la mesa levantando a su pequeña princesa en brazos, los ojos negros de Nya
--Papi, papi, usemos esas diademas de cachorrito—gritó Nya apuntado en un puesto específico.Rouss se acercó y compró las cinco diademas y se las colocaron.--Te ves como un inofensivo chorrito. Pero en realidad eres un lobo-- le susurró Rouss a Daniel viéndolo mirarla con sus profundos ojos dilatados.--Mamá, ¿podemos subirnos en ese?—preguntó Nil apuntando un tren que se desplazaba sobre la superficie del agua interrumpiéndolos.Al ver que era seguro, Rouss los dejo subirse.Nya y Nil sonreían alegremente mientras daban el recorrido y Niel aunque no sonreía como sus hermanos, también se estaba divirtiendo.Al bajarse, se subieron a muchos juegos más hasta que se hizo de noche y el parque apagó sus luces.Al volver a la villa, los pequeños tomaron una ducha, Rouss les leyó un cuento como todas las noches y se quedaron dormidos.Al ir a su habitación, Daniel la estaba esperando con una copa de vino en la mano, acercándose a ella con una sonrisa sexy y seductora entregándosela.Rouss l
Este debería ser el mejor día de la vida de Rouss Wyner, en unas cuantas horas se casaría con el amor de su vida, con su hombre perfecto, con el que soñaba todas las noches y con el cual estaba dispuesta a pasar el resto de su vida. Llevaban saliendo hace dos años, había rechazado a muchos porque solo Él estaba en sus ojos y arraigado en lo más profundo de su corazón. El día cuando se convirtieron en novios fue el más feliz de su vida, atesorando ese recuerdo como uno de los más hermosos que tenía, y los cuales eran poco. Muchos la habían perseguido confesándole sus sentimientos con la leve esperanza que ella los aceptara, pero todos fueron rechazos sin tener la más mínima oportunidad. Desde que se había enamorado en la secundaria de Bratt Miller, no había lugar ni espacio para nadie más en su vida ni en su corazón, ni tampoco quería darles lugar, ya que todo su mundo giraba alrededor de Bratt. Bratt era el primer hijo de la familia Miller, la cual era la tercera familia más influ
–Así es Rosy, tu madre te dejó una herencia, la cual heredaras después que te cases– le confirmó con una sonrisa. –te pareces tanto a ella– recalco acariciando su mejilla viendo a su querida Lilly atreves de Rouss. –Ya es hora de tu boda mi Rosy, te veo en la ceremonia– Luisa acaricio su mejilla suavemente marchándose con un sonido de –tac–, –tac–, –tac– que dejaba el bastón al golpear el piso, siendo ayudaba por su ayudante al salir. Su abuela era una de esas otras personas que podía contar con una mano, y por supuesto Bratt, solo ellos merecían su amor y su atención. …. Ya era la hora, el momento había llegado, solo estaba a minutos de estar por fin casada con Bratt y ser totalmente feliz a su lado. Un golpe en la puerta le indico que ya debía salir, con sus manos sudando y los nervios floreciendo, toma el ramo de rosas blancas para salir. Inhalando y exhalando para calmar sus nervios, abre la puerta para salir, pero en ese instante es interceptada por Bratt Miller q
El cuerpo de Rouss yacía en el piso, su cabello estaba despeinado, sus mejillas estaban rojas he hinchadas, sus labios ensangrentados temblaban levemente mientras se mordía el labio inferior saboreando el sabor metálico para aguantar los sollozos que querían escapar. Los murmullos de la multitud que se habían agrumado se podían escuchar. –¿Qué está pasando?, ¿Por qué la novia está en el piso?–. preguntó alguien que acababa de llegar con desconcierto. –No lo sé exactamente, pero ya que su prometido no hace nada, deben de haber terminado– respondió tranquila e indiferentemente, pero con mucha satisfacción la joven interrogada. –Ohh, debe ser así– musito la otra chica sin darle importancia. Algunos otros murmullos más continuarán, el cuerpo de Rouss temblaba levemente y sus largas pestañas revoletearon humedecidas para esparcir las lágrimas que querían brotar. En el siguiente segundo, siente como es tomada del brazo bruscamente levantándola del piso quedando frente a su padre que l