Liam, es el niño raro de la escuela. El que solo se la pasa haciendo sus tareas sin la ayuda de nadie. Hasta ahora.
Los primeros años de su vida son borrosos, pero agradece que sólo sean espejos del pasado y nada más. Lo único que sabe de su pasado es todo lo que sus padres le han dicho y es toda la verdad. Y eso es algo de lo cual está agradecido, porque está más que seguro de que sus padres son los mejores del mundo al igual que su hermano Theo.
No todos en la familia saben por lo que pasó, solo los que estaban presentes en el suceso. Lo único que desea es que lo único que lo hace sentir mal, desaparezca de su cuerpo de una buena vez por todas.
Desde que entró a la escuela, todo se hizo color negro.
Por otro lado está Damien Nichols, el profesor más peligroso en toda la escuela. Los alumnos que caen en sus manos son aquellos que nunca en su vida desearon estar en ese lugar. Ese hombre no da tregua con sus clases y eso que apenas tiene veintiocho años y ya tiene su reputación en ese lugar.
Posa sus ojos en ese niño desde el primer momento en que lo vio entrar como un perrito asustado a su salón de clases. La sonrisa que ocultó durante el día, mientras lo veía solo en el mismo árbol cerca de su salón de clases no era para nada una cariñosa.
Él tenía que hacer suyo, aunque rompiera el juramento que alguna vez le hizo a su abuelo y era: No te metas con mi familia o todo el daño que le hagas lo pagaras con sangre.
— Tenemos un nuevo estudiante..., sabemos que el año escolar está muy avanzado pero eso no quiere decir que el nuevo estudiante no pueda ponerse al día con las clases —lo miró esperando que se presentara.— H-Hola, mi nombre es Liam Hamilton Jackson mucho gusto —el salón completo se llenó de murmullos desde que dijo su nombre y apellido.*****— Tu familia tiene fama en todo el mundo —tomó de su bebida, sin despegar la mirada de Liam—. Aunque, no creo muchas de las que dicen como que tus abuelos son mafiosos o que en tu familia todos los hijos que han nacido son propios y no adoptados, pero que sobre todo que un hombre puede tener hijos.— Es
Sus padres a lo largo de los años se encargaron de demostrarle que no era un bicho raro por ser diferentes a ellos. Sus ojos eran una muestra de que al parecer no era de esa familia, porque todos tenían los ojos marrones o verdes y las únicas personas que tenían los ojos azules era su primo Jedward y el padre de éste. Pero sus abuelos no tenían los ojos de esos colores tan llamativos como eran los suyos.Ese día sus padres insistieron demás con que debía de ir a una escuela normal con los demás chicos para tener un poco de socializar con los demás, pero le era imposible hacerlo. Todos en ese sitio parecían niños fresados y él parecía un cordero a medio morir.Las pocas personas que había en el pasillo eran estudiantes que hacían de las suyas al escaparse de
Cristian metió a Liam en el baño de la escuela después de que tocaron el timbre para que volvieran a ingresar a clases. Vio como todos los cubículos del baño estaban vacíos y cerró la puerta para que nadie entrara.Liam observaba cada uno de los movimientos de Cristian esperando que este le dijera algo de lo que estaba esperando desde que entró a ese lugar. Con una sonrisa nerviosa sacó su larga cola del pantalón de la escuela y Liam pudo observar del color que era, era del mismo color que el mechón que tenía Cristian en su cabello.Era de color blanco, se veía de una forma tan suave que le dio curiosidad en saber cómo se sentía al tocarla. Cuando lo hizo se sorprendió al sentirla tan suave al tacto. Dio varios pasos hacia atrás y tambi&e
Cristian salió de la escuela mirando a las personas que estaban pasando por su lado como si él no existiera y eso era algo que agradeció enormemente. Tenía sus audífonos puestos por lo que el ruido de la calle pasaba a segundo plano, un segundo plano muy alejado de su realidad.No pudo evitar rodar los ojos cuando el carro de Nick pasó por su lado haciendo más ruido del que era debido hacer. Eso solo implicaba que tendría que comenzar a hacer las clases él solo una vez más.Odiaba cuando le ponían algún trabajo junto con Nick, la mayor parte del tiempo le tocaba hacer todo a él solo, por lo que las notas del otro eran igual de altas que las de él en algunas asignaturas.Saludó al portero con una
Le dirigió una pequeña sonrisa a su padre, en cuanto vio que se estacionaba en la entrada de la escuela a la hora acordada. Habían pasado algunos días en los cuales no se había vuelto a mencionar el tema entre su profesor y él, acerca del pequeño trato que tenían por lo que estaba feliz.Sus padres de vez en cuando le hacían preguntas sobre cómo había sido su día en la escuela, de cómo las cosas estaban mejorando para ellos en ese país, y sobre todo de cómo veía un cambio en su físico sin importar que tuviese un pequeño defecto en su parte trasera y en sus ojos.Cristian se volvió un gran amigo para él en la escuela, ya no se sentía tan solo que como estaba en Londres, Inglaterra, con esos niños que lo ve&iacu
Damien contó hasta diez en su mente, cerrando los ojos fuertemente para no impulsarse y terminar de arremeter con todo contra el chico al cual terminaba de quitarle la virginidad.Abrió los ojos para ver al chico que tenía debajo de él con la cara tapada, dejando ver algunas lágrimas que traspasaron sus manos. En un intento de que el chico dejase de llorar, comenzó a repartir besos en la pierna que tenía sobre su hombro para evitar que este siguiese llorando y también para quitar algo de malestar en el cuerpo del chico en lo que se acostumbraba.Liam comenzó a soltar pequeños suspiros, llenándose el cuerpo completo de satisfacción al recibir tales atenciones por Damien. Quitó sus manos de su rostro, al mismo tiempo que desaparecía las lágrimas
Con pasos lentos fue hacia donde estaban sus padres en la entrada de la escuela junto con su hermano Theo, el cual estaba mostrando su mejor sonrisa al verlo.No es que se llevaran bien, es que su hermano Theo sentía que desde que su hermano fue rescatado hace algunos años en Venecia, las cosas con su padre se volvieron aún más frías de lo que ya eran.Ya no tenía el mismo cariño de antes, según él, porque sus padres se preocupaban por el niño que rescataron. Pero, eso era algo que solo Theo sabía. Les dio un abrazo a todos como siempre hacía y luego se inclinó para besar la pancita de su padre que con cada día que pasaba parecía que su hermano o hermana deseaba salir de allí.Al menos podía d
Cristian estaba en la ventana de su habitación, mientras veía como Nick llegaba con sus amigos totalmente borrachos. Seguido de eso, era dejado como si fuese un perro en la acera del edificio.Con un suspiro arrastró los pies hasta el elevador para buscarlo y evitar que algún loco le hiciera algo, cuando lo vio intentando levantarse del suelo tuvo compasión de él para no dejarlo en plena noche de un fin de semana. Con algo de esfuerzo colocó en su hombro uno de sus brazos y como pudo y sin ayuda lo llevó hacia el elevador donde lo dejó caer de golpe en el piso.— ¿Era necesario dejarme caer de esta forma? —preguntó Nick, o al menos eso fue lo que el chico entendió.— Si, quizás no recuerdes nada de lo este go