—¿Estás queriendo decir que ese auto es el que casi te choca en el estacionamiento?— Michelle estaba llena de curiosidad. Erika se mantenía en silencio, mirando fijamente el vehículo que estaba delante de ellas, —Ese creo que es el auto de Scarlett, ¿Crees que ella haya Sido capaz de matarte?

—No lo sé.— Erika movió la cabeza de un lado a otro, —Ella tiene razones para hacerlo. Pero no puedo culpar a nadie. Además existen muchos autos similares a éste.

—Tenemos que buscar la manera hacer justicia y de protegerte.— Michelle la abrazo, —Por nada del mundo quiero que te pase nada. Erika, tienes que cuídate.

—Pero, ¿Cómo? No sé en quién puedo confiar. Está familia tiene demasiados secretos y es poca la cantidad en la que se puede confiar.— Erika camino dos pasos adelante.

—¿Qué está pasando?— Ángela llegó caminando hasta ellas, —Con solo ver sus caras al parecer no es nada bueno, ¿Qué pasó? ¡No me digan que se murió alguien más!

—¡No, para nada! Solamente que bueno alguien trato de ma