POV: Stella Sanders.No importaba cuánto intentara acercarme a Alexandra, simplemente no podía. Si yo decía hola, ella decía adiós, si le hablaba del trabajo se concentraba más en lo que hacía, si le hacía un cumplido respondía con un cortante «Gracias».—Deberíamos salir después del trabajo — dijo de manera efusiva Karina, me dí la vuelta con una sonrisa pero no estaba hablando conmigo sino con Alexandra.Si ¡Que emoción tener una nueva compañera!.Quizás si ella no estuviese Alexandra se aburriría lo suficiente como para querer hablar conmigo.No debería estar siendo tan poco empática pero lo único que quería era poder hablar con Alexandra y a este ritmo parecía que iba a ser imposible.—¡Perfecto! Le avisaré a unos amigos y buscaré un lugar lindo — respondió Alexandra emocionada.Si, ya había perdido a mi única amiga y eso de socializar simplemente no se me daba. Debía resignarme a una vida solitaria, al menos tenía a Jayden, me iba a tocar comenzar a chismear con él.Me mantuve al
POV: Stella Sanders.El día del evento había llegado y yo aún me sentía un poco sobrecargada con el asunto de Alexandra. Todo el tiempo estaba con Karina, todo el tiempo salía con Karina y por alguna razón que no comprendo les gustaba hablar de sus planes en voz alta para que todos los demás escucháramos, es una tonta, ambas son insoportables.Divago en estos pensamientos negativos mientras me coloco mis pendientes, pincho mi dedo sin quererlo y rápidamente despierto.Al menos las cosas con Jayden marchan bien, puedo notar el esfuerzo que hace en nuestro relación e incluso me siento tonta al recordar el día en que peleamos. A veces me gustaría poder controlar mejor mis emociones, tantos problemas que podría evitar si solo supiera hablarlo con tranquilidad en lugar de ser tan impulsiva.—¿Ya estás lista? No quiero llegar tarde — alertó mamá entrando a la habitación con su vestido de color azul y el olor de un viejo perfume que siempre me genera cierta nostalgia.—Ya casi, me pongo los
POV: Stella Sanders.Todos miraban fijamente a Jayden, las personas, las cámaras, incluso me atrevería a decir que los micrófonos aunque carezca de sentido. Él era el centro de atención en estos momentos.—Quiero darles la bienvenida, amigos, conocidos e invitados de la prensa, me alegra que hayan asistido todos el día de hoy. Como todos saben el Hotel Laurent fue fundado por mi familia, hemos sido sus únicos propietarios y hemos tratado de estar presentes en su dirección durante años, no ha pasado mucho tiempo desde que la responsabilidad de este gran lugar cayó sobre mis hombros y he de admitir que me siento dichoso por gozar de tal privilegio, muchos se preguntan a que han venido, a que se debe tal evento, ¿qué tiene de especial éste día? Bueno, el día de hoy el hotel pasa a manos de otro miembro de nuestra familia, y es con gran nostalgia y felicidad que hago éste anuncio, pues, siento que no podría quedar a cargo de mejores manos, con ustedes, la nueva dueña del hotel, la señorit
POV: Jayden Laurent.—Disculpen pero creo que necesito un momento a solas con mi hijo — Dijo mamá en voz alta.Yo no podía hacer más que mirarla, pues un cóctel de emociones se encontraba ahora en mi interior y yo estaba comenzando a sentirme ebrio de ellas. Todos se retiraron sin pensarlo dos veces y sin decir nada más, incluyendo a Stella quien solo se dio la vuelta con una mirada triste y se dirigió al salón de eventos. Esto realmente iba a ser agotador, aunque esperaba salir riéndome de aquí y que fuese un tema de conversación interesante al siguiente día.—¿Qué prosigue, madre? ¿Éste es el momento en que me mandas al bosque con tres viejas hadas madrinas? — pregunté con cierta ironía.—No, Hijo. Éste es el momento en que me explicas lo que está sucediendo.—Tú sabes lo que está sucediendo — respondí sin poder evitar esbozar una risita.—Eso no te da el derecho a regalar el patrimonio de la familia — replicó ella con cierta molestia.—De hecho si, mamá. El patrimonio pasó a mis m
POV: Stella Sanders.Jayden se quedó hablando con su madre, ya había pasado un buen rato y aún no salían, todos se preguntaban qué estaba sucediendo.Si, era un desastre y además resultaba incómodo, me miraban de cierta manera no amigable, sino curiosa e incluso burlona.—Tiene mucho sentido que haya venido la mismísima Carola De Laurent hasta aquí — comentó Leila viniendo hacia nosotros.Era la único que me faltaba en este momento, como si no bastara con todo lo demás que tenía en la cabeza.—¿Qué haces aquí? — pregunté cansada.—Como les había comentado antes, mi padre trabaja en este tipo de eventos y en ocasiones yo le acompaño, algo me decía que ésta noche iba a ser interesante — respondió con una risita que me resultaba bastante molesta.—¡Felicidades! Tuviste una buena corazonada — contesté con una sonrisa tan falsa como mis ganas de seguir en este lugar — ¿Qué estás esperando? ¿Un premio? ¿Trofeo? ¿Medalla? No, de hecho déjame voy y te busco todo acompañado de un diploma, para
POV: Stella Sanders.—¡Eso es absurdo! — declaró Karina riéndose en frente de mí.Había decidido contarles a mis compañeras sobre mi compromiso apenas un día después en el trabajo, después de todo creí que ellas iban a apoyarme.Un presentimiento que no estuvo del todo correcto.—Son demasiado jóvenes, no se conocen lo suficiente, es apresurado, no tiene sentido — añadió Alexandra casi enfadada y lo peor era que lo decía sin atreverse a mirarme a la cara, obvio, por delante de todo estaba su orgullo.—No entiendo cual es el problema — repliqué mirando hacia otro lado — si, tal vez es algo pronto pero se supone que cuando dos personas se aman…—No puedes saber si realmente amas a una persona en tan poco tiempo — contestó Alexandra de manera seria interrumpiendo mi argumento.Yo trataba de mantener la calma, pues, esperaba que este fuese un lindo momento, realmente estaba feliz y no quería que un intercambio de palabras lo arruinara.—¿Saben qué? Tienen toda la razón, una chica que tuvo
POV: Jayden Laurent.Stella no volvió a responder mis mensajes ni mis llamadas, me resultaba molesta e inmadura su conducta. No podía solo abandonar todo lo que estaba haciendo cada vez que ella comenzara a ignorarme por razones que yo desconocía, la amaba pero quería algo más maduro que esto.Me fui a dormir con la convicción de que el siguiente día sería mucho mejor y al despertar no sabía qué pensar. Toda mi oficina estaba llena de obsequios y reporteros que luchaban ferozmente por entrevistarme.—¿Qué está sucediendo? — pregunté con cierta molestia a la señora Maggiore.—Señor es que… se rumorea que va usted a casarse con la señorita Stella Sanders — contestó ella por lo bajo.—Es demasiado alboroto por una boda, éste pueblo necesita algo que los mantenga entretenidos ¿acaso no tienen televisores? Los dramas de las Kardashian son mucho más interesantes — respondí restándole importancia al asunto.—Es que eso no es todo… — respondió la señora Maggiore con cierto temblor en su voz.
POV: Stella Sanders.En el momento en que Jayden cruzó la puerta sentí como algo se quebró dentro de mí, no podía llorar, no podía levantarme, no podía reaccionar, me sentía casi vacía, casi, porque un sentimiento aún persistía en mí: La ira.Me levanté de mi cama, tomé un bolso y lo llené de mis cosas esenciales, me arreglé como pude y luego huí.Estando en el baño tomé las tijeras entre mis manos y corté mi cabello tanto como pude, me miraba en el espejo, sintiéndome menos que la sombra de lo que era hace un par de días, me habían dañado profundamente, lo habían logrado.Mamá se encontraba en la habitación viendo una película, Sofía estaba dormida, quizás viendo comiquitas, mientras yo salía por la puerta trasera y me saltaba a la casa vecina para despistar a los reporteros.Como pude llegué al corazón contento, el día de hoy no habían tantos comensales, quizás por el escándalo, quizás por el clima.Sin pensarlo fui hasta la cocina para encontrarme con Alexandra, la señora Alicia, l