—¡Malditos mediocres!— bufó Liam, ya que se le está haciendo muy fácil deshacerse de los escoltas

Liam muy audaz, trata de arrastrar el cuerpo hacia los arbustos para ocultarlo y así no despertar la sospecha de todos.

El Rogue al asomar un poco su cabeza, escucha un sonido, como una sirena lo cual no le agrada, al ver escoltas salir de la casa y que arman anillos de protección.

—¡Carajo!— gruñó entre dientes y mira al hombre que está agonizando, por lo que Liam no termina de matar, así es él, no tiene compasión

Liam no tiene más opción, su idea es quitarle la ropa al escolta y así, hacerse pasar por uno para poder tener ingreso a la casa y cuando lo pudo hacer, agarra el arma y el radio de comunicación.

El sale como si nada y empieza a caminar con el arma, como si estuviera haciendo guardia y así, logra entrar a la casa, pero no tan fácil, porque se encuentra al jefe de seguridad.

—¿Quién eres?— pregunta, porque jamás había visto a Liam

—¡Qué te importa!— Liam pasa por su lado, pero e