Después de verlo dar tres vueltas, Fane no pudo evitar sostener su hombro.

—¿Por qué estás tan emocionado? Creo que no es difícil de adivinar. Si solo practico una técnica de combate de nivel Cielo Salvaje inferior, no podría ganar tan fácilmente contra esos dos que me atacaron juntos. ¡Solo una técnica de combate de nivel Cielo Salvaje superior podría desplegar ese tipo de poder!

Benedicto inhaló profundamente, sus ojos brillaban de emoción. En ese momento, sentía que su mente estaba hecha un lío, con pensamientos caóticos revolviéndose en su cabeza.

Después de un rato, dijo: —¡Ah, ya veo! ¡Entonces, cuando le dijiste la verdad a Néstor, él se sintió tan emocionado y sorprendido!

Fane lo afirmó con la cabeza. Benedicto inhaló profundamente, su excitación gradualmente se calmó, y comenzó a aceptar la realidad poco a poco.

Él levantó la cabeza y miró a Fane con seriedad: —¡Nunca antes había imaginado que llegaría a conocer a un practicante de una técnica de combate de nivel Cielo Salva