Nadie le creyó en absoluto. Era imposible que fueran solo conocidos. Su relación debía ser más cercana. Aún así, no sabían con certeza cómo habían llegado a conocerse.

“Bueno, esa es una forma muy única de elegir a tu último discípulo. Supongo que eso explicaría por qué el candidato que elegiste es un poco... único también. En cualquier caso, puedes pensar que hiciste la elección correcta, pero ¿no crees que es un poco demasiado confiado en sí mismo?".

El Anciano Godfrey solo parpadeó inocentemente y no dijo nada. El Primer Anciano se rio con frialdad. Habría usado otras palabras si no fuera porque tenían una audiencia ante ellos.

En cambio, se dio la vuelta y le dijo a Fane: “Dices que eres más fuerte que Oliver, ¿eh? Bueno, ¿por qué no lo demuestras? ¡La plataforma de batalla está justo delante de ti! ¡Un combate y sabremos quién es más fuerte!”.

Un destello peligroso apareció en los ojos de Oliver. “¡El Primer Anciano tiene razón! Tú y yo, ¡a la plataforma de combate ya!".

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