Sebastián se quedó helado al escuchar a su ex novia, guardó su celular en su bolsa y la tomó del brazo pero en el momento que la quiso sacar fue detenido por Lauren.— Lo que ella quiere decirte nos involucra a ambos, no quiero ignorar las cosas por mi supuesto bienestar y si esta mujer se encuentra embarazada de ti debes responder ante tu hijo o hija.— ¡Él es el padre! — Mileydis respondió furiosa ante la insinuación de Lauren — no tengo duda alguna, son cuatro meses de embarazo y antes de terminar conmigo tuvimos sexo, ¿O lo vas a negar Sebastián?— No lo pienso negar — él la soltó y cerró la puerta — pero también te recuerdo que si me separé de ti fue porque me fuiste infiel con ese viejo, no puedo asegurar que esa criatura que estás esperando es mi hijo o hija.— Es tuyo y punto, me tienes que responder con todas las de la ley — ella miró a Lauren — tendrás que olvidarte de Sebastián, él se va a casar conmigo y responderá dándole su apellido a nuestro bebé.— Te has olvidado de u
Sebastián se sintió dolido por las palabras de Lauren y se decía que ella se encontraba molesta por todo esto, el señor Rivera sacó a su hijo de la habitación y dejó a su esposa con su nuera, ellos se alejaron lo suficiente para tener un poco de privacidad. — Pensaba que las cosas habían cambiado entre ustedes pero al parecer me equivoqué por completo, dime qué fue lo que hiciste para que Lauren dijera lo que acaba de decir. — No hice nada papá — él se mostró frustrado — Lauren simplemente no puede creer que realmente me encuentro enamorado de ella y se niega rotundamente a lo que le he venido diciendo, sinceramente esta situación me tiene al borde de la locura porque no sé de qué forma hacerle entender que la amo profundamente. — Tienes que tener paciencia muchacho, Lauren es una mujer que ha pasado por mu
Ella lo abrazó con tanta fuerza que el hombre se le dificulto respirar en cierto punto pero la felicidad que tenía en ese momento era tan grande que ignoro cualquier otra cosa que no fuera esto.— Gracias por amarme — ella lo miró con los ojos brillantes — ¿Qué va a pasar cuándo los bebés nazcan? Supuestamente nos íbamos o nos vamos a divorciar.— Nada de eso va a pasar — él apoyó su frente con la de Lauren — te quiero tener presente en mi vida hasta que mi tiempo en este mundo se acabé, ahora que tengo este precioso tesoro en mis manos no lo voy a dejar ir, sería un idiota si lo hago.La sonrisa de Lauren se mostró más brillante que nunca, ella asintió al saber que ya no se volvería a divorciar nunca más y que el hombre que tenía frente a sus ojos era alguien que tenía sus defectos como cualquier otro, no obstante sus virtudes eran mayores que cualquier otra cosa, la había protegido a pesar que era capaz de hacerlo por sí misma y eso era algo que siempre deseo tener en su pareja. —
El rostro de Sol comenzó a hervir como porra en ebullición, ella por primera vez mostró una faceta que nadie había visto y Alejandra se reía de su amiga de forma disimulada.— Y sumemos los chocolates que me da Lauren, si, estoy más que completa referente a los postres — ella se miró pensativa — tú cocinas bien, también el tío Sebastián, sip, me encuentro perfectamente bien, no moriré en esta vida o al menos no de hambre.— Andrea — Sol miró a la niña tratando de contenerse — tengo unas galletas con chispas de chocolate, si te las doy me puedes hacer el favor de callarte.— Si tengo la boca ocupada obviamente tendré que callarme — ella sonrió — al menos por el momento, ya después no prometo nada. Sol sacó una bolsa muy grande de galletas para Andy y esa fue la única manera que la pequeña se pudo quedar callada, Jake por su parte se encontraba completamente sereno e incluso parecía que ya se encontraba acostumbrado a las locuras de su hija.— La señora Rivera me pidió que te viniera a
Tanto Lauren como Sebastián se quedaron dormidos, al día siguiente que despertaron se pusieron a esperar la visita del doctor. — Espero que hoy me den de alta, no quiero seguir en este sitio — Lauren suspiró pesadamente — me iré a duchar, si viene dile que no demoró y por favor no salgas con la locura de que me vas a bañar porque te mandaré por un tubo. Sebastián se quedó callado y dejó que Lauren se fuera a bañar, el doctor entró justo en el momento que ella salía del baño. Le hicieron un ultrasonido y el médico movió la cabeza de un lado al otro dando a entender que el alta no podía ser dada. — Aún es necesario que se quedé en hospitalización, el bebé se encuentra estable pero sigue teniendo la placenta desprendida, en si no es que ella va a regresar a su posición original sin embargo es necesario administrar medicina y tenerla bajo observación por cualquier inconveniente que se presente, comprendo que quiere ir a casa y espero que usted también entienda que no es recomendable qu
Las palabras de Lauren estaban llenas de una confianza que desconcertó a muchos pero no a Sebastián y al señor Rivera, ellos sabían muy bien que la mujer era muy decidida cuando se proponía algo y más si se trataba de proteger a sus bebés. — Muy bien, entonces vamos a ir a juicio y espero que esos tres paguen por lo que le hicieron a mi esposa. Si es necesario también pienso testificar y decir todas las zanganadas que ese malviviente le hizo a Lauren, las veces que la golpeó e incluso en una ocasión que la lleve al hospital con la cabeza abierta y ni siquiera la conocía; ella pensó que era un uber lujoso que había pedido. Lauren se sorprendió al escuchar a Sebastián y él le guiño el ojo, el abogado terminó por irse sumamente contento por haber logrado lo que se había propuesto. Los demás decidieron sentarse para conversar y Sol sacó un pastel de selva negra que estuvo escondiendo de Andy durante todo el trayecto ya que sabía muy bien que era una glotona de primera categoría. — Se m
La fuerza que ejerció terminó por ocasionar que una línea de sangre se deslizará por su cuello, Sebastián al ver esto se puso con la piel de gallina, Mileydis no parecía sufrir a pesar que sangraba de un lado y todo se miraba bastante mal. — Escucha Mileydis — Sebastián extendió su mano — dame ese cuchillo y hablemos, no puedes estar haciendo esto. — ¡No te acerques! — ella gritó — si no quieres que mi muerte caiga en tus manos vas a acceder a todas mis peticiones, no pienso ser madre soltera y menos no acceder a la fortuna de tu familia. — Muy bien, me voy a divorciar de Lauren y me casaré contigo — él se mostró preocupado — pero suelta ese cuchillo de una buena vez, prometo que vamos a ser felices — ¿Acaso piensas que soy tonta? No Sebastián, no lo soy — ella sonrió con cinismo — en este momento llamas a ese remedo de mujer y le dices que te vas a divorciar, hay de ti que vengas a decirle lo que está pasando en estos momentos. Sebastián no tuvo más opción que llamar a Lauren,
Sebastián se llevó su mano a su rostro, él estaba preocupado por la criatura que Mileydis esperaba a pesar que no sabía con certeza si era suyo. — Hay que trasladarla de inmediato entonces, no voy a poner en riesgo a mi hijo solo porque ella no es capaz de cuidarse a sí misma, ¿Ya están listos los resultados de ADN? — Lo lamento pero no, los resultados estarán listos dentro de dos semanas y es mi culpa no haberlo dicho antes — el doctor se miró apenado con este detalle — una vez que lo tenga en manos le haré saber de inmediato, de igual forma la intervención se le iba a hacer a la paciente ya que demostramos que no es seguro que este libre. Al final se llevaron a Mileydis a la clínica mientras lanzaba miles de maldiciones a todo mundo, en el momento que vió a Lauren le escupió en el rostro y se movió en violentas convulsiones como si la quisiera atacar pero cualquier intento se vió frustrado por los hombres que la llevaban bien sujeta. — Cariño — Sebastián sacó un pañuelo y limpi