Emir compró un teléfono prepago y regresó con las chicas para explicarles la idea.—Miren llamaremos el número, necesitamos saber quién es la persona responsable de todo este delito, puedo llamar yo o Eve.—Yo también puedo hacerlo. — Romina sentía que tenía que ser ella quien se arriesgara, no sabían si era una persona peligrosa o armada, no quería poner en riesgo a sus amigos. — No Romina— Respondió claramente Emir— No puedes recuerda que te pueden identificar, no podemos arriesgarnos a ser descubiertos, menos ahora que vamos empezando, ésta— Dijo moviendo la pequeña agenda— es nuestra única guía para encontrar a tu hija, si la perdemos, estaremos de nuevo sin nada.Romina sabía que Emir decía la verdad, que a pesar de lo que ella creyera o quisiera hacer, él tenía razón, en este punto tendría que ser una espectadora de su propia lucha, quería destruirlos, quería que fueran castigados y haría todo lo que fuera necesario para conseguirlo.— Yo llamaré, no creo que me recuerden, fu
Aranza está encantada con la mansión Osuna ( la de Gabriel) es amplia, refinada y elegante, acorde a su personalidad, todo el día lo había pasado decidiendo el acomodo de su guardarropas, incluso en su bolso ya tenía una tarjeta con crédito ilimitado que le había entregado Gabriel al llegar, todavía la emocionaba lo que le había dicho su ahora esposo.“Nada te faltará de ahora en más, seremos una familia yo me encargaré de eso”Aranza se deja caer emocionada a la cama, por fin su cuento de princesas se estaba cumpliendo tal cual lo quería.Tocan la puerta y segundos después entra una mujer con uniforme de servicio.— Disculpe señora— Mary había ido a avisarle que era hora de cenar— Vengo…— ¿disculpe? — Aranza se levantó inmediatamente de la cama— ¿escuchaste que te di el paso?—No… — Mary se quedó sorprendida, jamás nadie le había gritado así en su vida.Aranza comenzó a negar.— Entonces no puedes abrir, ¿Entiendes?— Mary asintió tímidamente — Bueno ahora dime a que venías.— El
Después de haber esperado que uno de sus agentes de seguridad privada y su equipo llegaran al departamento de las chicas, y que les tuvieran un reporte de lo que pudo haber sucedido Emir les dice. — Me dice mi agente que pudo tratarse de un acto no aislado, las cosas están rotas, no desacomodadas, ¿tienen a alguien en mente que pueda desearles algún mal? Ambas tanto Romina como Evelyn, pensaron en alguien en específico. Romina no quería creer que Gabriel fuera capaz de seguirla atormentando después de solo mandarla a enfrentar el mundo literalmente con lo que traía puesto, aunque él creía que lo había engañado debía ser suficiente castigo haberle arrancado toda su realidad de un solo tajo y jamás volver a darle la mano. En cambio Eve pensó en un hombre que años antes de ser quien era ahora, amaba verla nerviosa y desesperada, aunque según ella se había encargado de borrar sus pistas, para que jamás la encontrara, para este punto debería tener otra pobre victima entre sus manos. E
Habían pasado varios días en los que no habían tenido noticias de la Cigüeña, aunque nadie decía lo que pensaba, todos estaban estresados, la posibilidad que sí los hubieran descubierto rondaba en la cabeza de todos. — Sigo con la idea que pudo ser ella quien mando destrozar el departamento.- Dijo Romina nerviosa, aunque una parte de ella se negaba a aceptarlo, la batalla no podía terminar tan rápido, no cuando ella aun no tenía a su hija con ella. — Si fuera así, también nos hubieran seguido hasta mi casa, y apuesto que no se pondrían en mi contra. Emir estaba seguro que de haber visto algún indicio diferente de lo normal, sus agentes se lo hubieran notificado, pero hasta el momento sólo se encontraban recabando datos, para utilizarlos en el momento que fuera oportuno. — Suena un poquito pretencioso de tu parte, señor Palacios— Eve lo dijo con tono de burla, Emir puso los ojos en blanco. Eve ya se había dado cuenta que Emir se incomodaba cuando lo llamaba así, y ella estaba de
El ambiente estaba muy tenso todo el camino estuvieron en silencio, ya que querían tener privacidad absoluta para poder hablar libremente, Emir las llevó directamente a su casa, el lugar más vigilado para su privacidad.—Dime entonces todo lo que sepas— Emir hacia un férreo esfuerzo para concentrarse en el tema principal de la situación y no en el sabor de los labios de Romina.—Tenía una serie de preguntas, que para que fecha era conveniente el parto, las características de mi esposo, las características de los padres de mi esposo, el tipo de sangre, que tipo de cabello quería, incluso me preguntó si el tono de piel del bebé sería un inconveniente, el sexo deseado del bebé. – Eve estaba repitiendo todo tipo de preguntas recordando la gran mayoría. —No recuerdo mucho más.—No te preocupes lo tengo grabado, quería saber si habías visto algún detalle que se pudiera haber pasado— Comento Emir de manera despreocupada— El problema aquí es que necesitamos adelantarnos a la fecha próxima de
Romina no había visto a nadie que estuviera tan roto, que tuviera la mirada tan llena de dolor como la de Emir, acercarse a él era una necesidad que brotaba desde lo más profundo de su ser.Mina creía entender esa clase de dolor, después de perder a Ángela no sabía qué hacer, o si sería correcto destruir todo a su paso, para hacerlos comprender su propio dolor, pero toda esa incertidumbre del mañana, que ella sintió en ese momento Emir lo tenía retenido en esos ojos que la veían pero realmente estaban enfocados en otro tiempo.¿Qué dolor tendría oculto, que verlo así la hacía necesitar quitar de cualquier manera todo el dolor que el pudiera estar sintiendo en ese momento?¿Qué pasaría si se acercaba a él y le arrancaba un suspiro?Romina decidió seguir sus instintos y sus deseos, más profundos, negados desde hacía tanto tiempo ya que al estar en negación en lugar de desaparecer lo único que había conseguido era que tuvieran raíz más fuerte.Con delicadeza Romina se acercó al rostro de
Emir estaba complacido al ver la cara de circunstancias de la doctora Lombardo, por personas como ella era que había tanto dolor en el mundo.Personas que se creían inmunes a las reglas terrenales y por sobre todo a las reglas divinas, el lo sabia, no era ni de cerca un dios ni mucho menos, pero sí que podia hacer valer la justicia.La doctora estaba estupefacta ante la situación tenía mucho tiempo haciendo lo mismo y nunca se había filtrado la información.-Me darás la información -continuo metiendo presión Emir- o verémos qué tan real y profundo es el amor que dices tenerle a tu hija. Se mira muy feliz disfrutando del dinero sucio que gana su madre.Emir lo sabía, estaba dandole dónde más le duele a cualquier padre, pero ¿ella no hacía lo mismo con las demás personas? Eso disminuía el castigo que ya tenía preparado para el en el infierno.-No te daré la información, no sé que es lo que quieres pero tengo gente que me respalda.La doctora no estaba dispuesta a dar su brazo a torcer,
Emir había revisado toda la información que la doctora le había dado.Emir no se sentía cómodo pensando en esa mujer como doctora, para él esa persona sería la cigüeña y así seguiría siendo, decidió.En el archivo que tenía frente a él, había mucha información toda muy bien ubicada.Nombre de los compradores de los bebés, cantidad de bebés, además de la cantidad cobrada, poder adquisitivo de las familias receptoras, fechas y los nombres de las mujeres que habían perdido a sus bebés y el hospital dónde habían extraído al menor.Todo lo que estaba mirando era prácticamente oro, la información era clara y concisa, hasta el país en el que estaban actualmente esos bebés, posiblemente tenerlos rastreados les daba seguridad para que nadie abriera la boca, porque claro los únicos que tenían esa información eran los receptores.Emir desesperado buscó el nombre de Romina, y a un lado encontró el nombre de la persona que odiaría el resto de su vida Samuel Ortiz. ¿ Quién sería este hombre? y ¿po