Poco después, tanto James como Ryan se toparon con Érika, a la cual ya podrían llamar amiga, o bueno, una persona de confianza. Por lo que quedo de la "fiesta" fue mucho más llevadero, pues la chica era divertida y es más, había llevado a su pareja, cosa que si, vaya locura, pero su pretexto era que era un buen amigo. Bueno, James no estaba haciendo algo diferente a Érika, él también tenía a su pareja a su lado, y su pretexto era que este era su guardaespaldas y nada más.
Esto no estaba yendo mal, pero James lo sabía, cuando todo mundo se fuera él estaría en serios problemas. Joder, estaba aterrado pero se decía a sí mismo que solo serian golpes, muy fuertes golpes, pero nada que lo matara. Solo esperaba que Ryan no reaccione de la peor manera, que no se volviese loco y terminará asesinando a su padre. Porque sabía que
Las heridas de James aun no dejaban de sangrar, pero la sangre ya no brotaba en demasía; Las rápidas acciones de las tres mujeres ayudo mucho en ello, y aun seguían atendiendo con preocupación a James, el cual no daba señales de despertar. Las gasas sobre la espalda de este estaban bañadas de sangre, había sangre en todo su alrededor. Una escena para nada agradable.—¿Y bien?— Érika preguntó a la mucama,—¿En cuanto vendra el doctor?— Ella seguía presionando y limpiando las zonas lastimadas. Era horrible, la espalda de James estaba tan marcada, el látigo había hecho un espantoso trabajo.Eleanor respondió mientras cambiaba las gasas,—Dijo que estará aquí en quince minutos, y que presionemos la zona lastimada mientras él llegaba—Natalie se miró las man
Los dotores se habían ido ya hace media hora, y ellos dejaron instrucciones para tratar los puntos en los siguientes días, y también el doctor a cargo volvió a repetir que James no debía de hacer ningún esfuerzo y que lo mejor era que permaneciera en cama al menos unos tres días. Era un tanto riesgoso mucho movimiento en los primeros días, los puntos podrían abrirse. Ryan fue atento al escuchar más allá de su preocupación, y no solo él, pues Eleanor lo hizo también ya que ella estaría ayudando a James en su recuperación.Ahora solo Ryan se encontraba en la habitación, su mirada clavada en el rostro durmiente. James ya no parecía sentir dolor, fue un pensamiento tonto pues Ryan sabía que al irse el efecto del sedante este volvería a sentir molestias en su espalda. Una maldición se escuchó de parte
—Sabes, no es necesario que estés presente— Dijo Hiddleston luego de terminar de explicar mucho mejor las cosas.Ryan negó,—Lo mismo para ti, ¿no tus hombres harán todo el trabajo? Yo tengo mis razones, ¿cuáles son los tuyos?— Aunque algo sabía, ya que este tipo le había dejando bien en claro que su relación con Zev Dawson no eran las mejores, es más, habían rencores pasados y actuales.Comenzando a caminar, este respondió:—Supongo que los mismos que los tuyos, pero en mi caso yo me encargare de asesinar directamente a Dawson. y me gustaria usar mis propias manos para ello— Por supuesto, Hiddleston no solo tenía esa contextura por solo hacer algo de duro ejercicio. Él solía hacer trabajos sucios, pero bien, era algo sabido para algunos. Y puede que no todo el mundo que lo rodease supiera de aquell
El día siguiente había llegado muy pronto para la molestia de James, pues Ryan ya estaba alejándose de su lado con la excusa de que debería ir por el desayuno. Pero James tuvo que recordárselo, habían empleados para ello, y si, aquello no había sonado muy bien que digamos, aunque fue bueno que el mismo James se hubiera dado cuenta de su actitud de niño rico. Por lo que terminó soltado a Ryan a regañadientes.—No tardaré— Ryan dejó un beso en la mejilla hinchada de James ante su muy notorio puchero. Dejando la habitación, Ryan recibió un mensaje, se trataba de tres mensajes de Matt, el cual ya se encontraba afuera en la entrada, en el portón. Cambiando de rumbo, Ryan salió de la mansión y caminó hacia donde Matt le saludaba muy efusivament
La mirada de Oliver permanecía en la mejilla lastima de Matt, ese hematoma se veía terrible, tenía un color verdoso y morado. —¿Harrison te hizo eso?— Su brazo ya se estaba alzando, y los dedos de su mano fueron suaves y cuidadoso en posarse en la mejilla verdosa. —Te lo merecias— Y se alejó, no estaba importándole mucho, —Has estado molestándome por mucho tiempo—Matt se alejó, —Vete al diablo, ¿entonces si no era él, ibas a ser tú el que me golpeara?— Y lo sabía, este hombre aún seguía siendo un sádico y no debía de bajar la guardia en ningún momento, no al menos cuando eran solo ellos dos en una habitación.—No te golpearí
Ya era de noche, aun así...Ryan para nada de acuerdo de lo que estaba por hacer James, ya que lo mejor era solo hacer las maletas e irse a la mierda con él, así de simple, pero no, James quería mover su lindo culo hacia el despacho de Harrison y hablar con él. Aquello no era una buena idea, aunque no habían buenas ideas para esto, simplemente el resultado seria el mismo, y tanto Ryan como James lo sabían, pero bien, lo que Ryan quería evitar era un enfrentamiento. Era obvio que Harrison no dejaría ir tan fácilmente a su hijo, y por ello estaría reteniéndolo, muy seguramente, a los golpes.—Borra esa expresión de tu rostro, tú estarás conmigo de todas formas, nada va a sucederme, se que no lo permitirás— Le volvió a repetir James,—Además, él no puede retenerme, soy mayor d
James retrocedió aun más, no quería que las manos de Ryan lo tomaran y que sus brazos lo contuvieran, él no estaba seguro ni de sí mismo ni de Ryan. No confiaba. No confiaba en sí mismo logrando mantener una distancia debida, además de que estaría perdonándolo de manera inmediata, sin importarle realmente nada. Aquello no debía pasar, no cuando aun no había escuchado nada salir de la boca del hombre que supuestamente decía amarlo.—Por favor, no crees pensamientos equívocos— Dijo Ryan al fin dando los pasos necesarios para estar justo al frente de James, a solo centímetros, sus brazos comenzaron a moverse de nuevo, y sus manos llegaron a tocar al chico de ahora mirada aterrada y preocupada.&mda
Harrison Lawrence no hizo aparición en su mansión hasta que la hora del almuerzo llegó, y para esa hora James ya tenía su maleta preparada, al igual que Ryan. Lo único que quedaba por hacer era realizar el encaro. James estaba preparado para encarar a su "padre", ahora más que nunca, ahora sabiendo la verdad las cosas serian mucho más fáciles. A Lawrence no le quedaría de otra que dejar ir a su único hijo.Caminando fuera de su habitación, James se encontró yendo hacia el despacho del hombre, claro él estaba siendo seguido por Ryan. Le dio una mirada antes de tocar la puerta, James también le dio un beso a su guardaespaldas, uno fugaz. Entonces un adelante se escuchó del otro lado de las puertas. Bien.La puerta fue abierta, James ingresó y borró inmediatamente su sonrisa, tenía que ser serio ahora, deján