¡Hola, se viene un poco de acción!
Esta no había sido la idea, nada de esto estaba planeado, en serio Ryan no quería involucrarse más en problemas, pero no podía hacer la vista gorda en situaciones como estas. Él quería hacer las cosas bien, lo correcto. Y había algo más, Ryan pudo darse cuanta que tal vez no podía vivir sin este tipo de cosas en su vida. La adrenalina que sentía era casi única, y Ryan esperaba que esto no fuera un problema a futuro. Sobre todo para el bien de James. Los enemigos eran fáciles de hacer en este tipo de situaciones y entornos, en especial cuando eres de los buenos e intentas estropear los planes malignos, por así decirlo. Y sin duda era algo que ya había quedado más que en claro.Ryan tenía muy en cuanta todo eso, lo hacía, y por ello debía de ser cuidadoso, lo más cuidadoso posible. Pero era consciente de que tal vez tuviera que arriesgarse un poco. Sabía que iba a tener que hacer uso de su arma, esperaba que no, pero no iba a engañarse.Él volvió a recibir otro llamado, era claro supo,
Obligadamente, Ryan se vio tuvo que retroceder, porque no se trataba de una persona, sino que pudo distinguir dos voces dirigirse hacia donde él estaba. Y lo que menos debía de hacer ahora era llamar la atención, por lo que volvió a la habitación sin puerta, donde aun el tipo se encontraba inconsciente el piso. Ryan esperaba que el hombre no volviera en sí en estos momentos. Chasqueando la lengua, Ryan fue atentó, escuchando a los dos tipos hablar y no llegando hasta donde él estaba, donde su compañero inconsciente estaba. Fue algo a su favor, pero sobre todo, lo fue el que ellos abrieran la puerta cerrada, donde se encontraba Melissa. Era el momento. Ryan sacó su cabeza, observando, no dando con nadie cuidando afuera de la puerta, y era algo lógico, puesto que ninguno de ellos se esperaba a que alguien fuera en busca de la mujer. Nadie imaginaba que alguien se colara a la fabrica con ese motivo. Ya con arma en mano, Ryan comenzó a moverse de nuevo, siempre manteniendo la calma y s
Luego de unas dos largas horas en el hospital, dando explicaciones a la policía y los médicos que se encargaron de Melissa, Ryan ya estaba volviendo a su camioneta, ahora si poniéndose en marcha hacia la mansión. En el camino pensó en si llamar a James, para al final decidir que no, prefería tener una conversación cara a cara que por celular. Además, estaba al volante.No le tomó mucho tiempo en llegar, solo un poco más de media hora gracias al transito liberado, y Ryan en parte estaba algo así como aliviado, pero por otro lado sabía que iba a ganarse un buen y gran regaño, solo esperaba que James no estuviera enojado con él por mucho tiempo. Uh, eran muy malos cuando de estar enojados se trataba, parecía que no podían manejarlo con la madurez necesaria, aunque al final, ellos terminarían envueltos entre sí y debajo de las sabanas. El sexo de reconciliación sin duda era más que bueno, pero todo el estrés anterior a aquello no lo era, y a decir verdad, Ryan prefería no tener sexo de re
—¿Estas seguro que quieres que siga con esto?— Preguntó Ryan luego de que ambos se hayan dicho buenas noches. Claro, Ryan no podía dormir aun, no al tener la duda en mente. Y no habían discutido, no cuando estaban siendo rodeados y claramente era un tema de los dos, no de los demás.James se removió, acariciando su mejilla contra el bíceps de su pareja, también movió su pierna y la ubicó sobre las caderas de Ryan, pronto sintió una mano sobre su glúteo. Ahora si estaba bastante cómodo. —Lo estoy— James le sonrió, —Después de todo lo que pasamos, sobretodo tú, se que puedes con cualquier cosa. Uhm... eres difícil de matar— Rió un poco, aunque no debía de hacerlo por el simple hecho del tema que estaba tocando, pero no pudo evitarlo, agregó:—Eres como John McClane de duro de matar— Volvió a reír un poco.—¿En serio?— Ryan ya tenía una sonrisa algo ingenua y una ceja alzada, aunque en la oscuridad no se podía divisar muy bien. Solo teniendo la luz de la luna colándose por la cortina mal
James no dijo nada más con respecto al tema, no sabía que decir de todas formas, pero si se quedo pensando en como deberían de actuar con respecto a ello. No era algo fácil, no sería algo fácil. Luego James se preguntó si debían de acudir a la policía de Londres, pero tal vez aquello sería algo adelantado por hacer, es decir, puede que no sea un gran problema; James esperaba que no fuera un gran problema, y que Emily tuviera salida rápida sin consecuencias de por medio y de futuro.—¿Estas bien?— Preguntó Ryan, su mano presionando el muslo izquierdo de James.—Si...— Solo que a James le gustaría despertar un día sin tener que preocuparse de nada ni de nadie. Una diminuta sonrisa sin trasmitir nada se coló en sus labios, pensando en lo irónico que estaba siendo ahora, pues él, apenas ayer por la noche, le había comentando a Ryan sobre la idea de que se convertirá en un policía, cosa que si, era muy contradictorio a su sentir de ahora. Pero había una diferencia, Ryan estaría involucrado
Ryan fue muy preciso con sus preguntas, necesitaba serlo para poder entender todo el asunto, y de porque de la desaparición de Roy, aunque tenía algo mente, algo bastante simple a decir verdad. Porque estaba bastante en claro para ambos que Roy había desaparecido, luego de haber escapado de una muerte segura, por el bien de Melissa, no queriendo causarle más problemas de los que ya tenía. Pero claramente aquello no salió muy bien que digamos.Por lo que Ryan sabía hasta ahora, ambos hermanos habían estado involucrados con respecto al tema de las drogas, siendo Melissa la que se involucró primero, seguido por Roy, quien se vio obligado a ser participe cuando Melissa comenzó a recibir amenazas por no haber hecho algunos pagos. Y ya saben, en ese tipo de tratos, el pago a tiempo o pronto, era lo que te mantenía con vida. Cosa que no ocurrió, claro esta. Melissa también explicó que no había tenido la intención de traicionar a sus vendedores, y que ella iba a efectuar los pagos correspond
Sinceramente, Matt estaba aburrido, muy aburrido. Desde que Oliver se fue a Rusia por negocios, hace tan solo cuatro días, Matt se había encontrando haciendo casi nada, pasando su tiempo libre junto a James, cuando este no estaba con su novio, y con la cabeza metida entre sus aburridísimos libros de economía. Pero había que aclarar que no estaba pasando por un serio arrepentimiento de la carrera seleccionada, solo que... El extenuante estudio del día a día pasaba de largo una vez Oliver se encontraba de vuelta en la casa luego de una largo día de trabajo, y es más, a veces, muy seguido, Oliver llegaba antes, vamos, él era el jefe y se podía dar esos lujos, nada iba a salirse de control por ello. Y Matt se sentía nuevamente vivo y no como un maldito zombie. Era algo a lo que se había acostumbrado ya.Pero ahora, ahora que Oliver no estaba, Matt se sentía un tanto miserable, él apenas y podía dormir cómodamente en la gran cama de su habitación. Y por ello ahora tenía ojeras, no muy noto
El lugar citado resultó ser bastante concurrido para la sorpresa de Ryan, cosa que no había sido apropósito, en serio, simplemente Ryan no estaba al tanto del nuevo lugar que se estaba inaugurando. De todas formas, Ryan no llamó para cambiar el punto de encuentro, lo que sea, porque de hecho la multitud ayudaba a mantener las cosas al margen. Nada podía salirse de control, aunque podría resultarles un tanto molesto e inadecuado para la situación. Se suponía que no iban a tener una conversación común y corriente, no iban a hablar del clima o del día a día. No podían ser escuchados.Fue bueno que las personas comenzaran a moverse, yendo a dicha dirección de la inauguración, Ryan no preguntó de qué. De todas formas no iba muy sonriente, cualquiera cerca suyo salía corriendo. Literalmente hablando. Resultó un tanto gracioso, nadie rió.Ryan tomó asiento en una de las mesas libres afuera de la cafetería, escogiendo la más lejana al resto. Si, había elegido una cafetería para el encuentro,