Luego de unas dos largas horas en el hospital, dando explicaciones a la policía y los médicos que se encargaron de Melissa, Ryan ya estaba volviendo a su camioneta, ahora si poniéndose en marcha hacia la mansión. En el camino pensó en si llamar a James, para al final decidir que no, prefería tener una conversación cara a cara que por celular. Además, estaba al volante.No le tomó mucho tiempo en llegar, solo un poco más de media hora gracias al transito liberado, y Ryan en parte estaba algo así como aliviado, pero por otro lado sabía que iba a ganarse un buen y gran regaño, solo esperaba que James no estuviera enojado con él por mucho tiempo. Uh, eran muy malos cuando de estar enojados se trataba, parecía que no podían manejarlo con la madurez necesaria, aunque al final, ellos terminarían envueltos entre sí y debajo de las sabanas. El sexo de reconciliación sin duda era más que bueno, pero todo el estrés anterior a aquello no lo era, y a decir verdad, Ryan prefería no tener sexo de re
—¿Estas seguro que quieres que siga con esto?— Preguntó Ryan luego de que ambos se hayan dicho buenas noches. Claro, Ryan no podía dormir aun, no al tener la duda en mente. Y no habían discutido, no cuando estaban siendo rodeados y claramente era un tema de los dos, no de los demás.James se removió, acariciando su mejilla contra el bíceps de su pareja, también movió su pierna y la ubicó sobre las caderas de Ryan, pronto sintió una mano sobre su glúteo. Ahora si estaba bastante cómodo. —Lo estoy— James le sonrió, —Después de todo lo que pasamos, sobretodo tú, se que puedes con cualquier cosa. Uhm... eres difícil de matar— Rió un poco, aunque no debía de hacerlo por el simple hecho del tema que estaba tocando, pero no pudo evitarlo, agregó:—Eres como John McClane de duro de matar— Volvió a reír un poco.—¿En serio?— Ryan ya tenía una sonrisa algo ingenua y una ceja alzada, aunque en la oscuridad no se podía divisar muy bien. Solo teniendo la luz de la luna colándose por la cortina mal
James no dijo nada más con respecto al tema, no sabía que decir de todas formas, pero si se quedo pensando en como deberían de actuar con respecto a ello. No era algo fácil, no sería algo fácil. Luego James se preguntó si debían de acudir a la policía de Londres, pero tal vez aquello sería algo adelantado por hacer, es decir, puede que no sea un gran problema; James esperaba que no fuera un gran problema, y que Emily tuviera salida rápida sin consecuencias de por medio y de futuro.—¿Estas bien?— Preguntó Ryan, su mano presionando el muslo izquierdo de James.—Si...— Solo que a James le gustaría despertar un día sin tener que preocuparse de nada ni de nadie. Una diminuta sonrisa sin trasmitir nada se coló en sus labios, pensando en lo irónico que estaba siendo ahora, pues él, apenas ayer por la noche, le había comentando a Ryan sobre la idea de que se convertirá en un policía, cosa que si, era muy contradictorio a su sentir de ahora. Pero había una diferencia, Ryan estaría involucrado
Ryan fue muy preciso con sus preguntas, necesitaba serlo para poder entender todo el asunto, y de porque de la desaparición de Roy, aunque tenía algo mente, algo bastante simple a decir verdad. Porque estaba bastante en claro para ambos que Roy había desaparecido, luego de haber escapado de una muerte segura, por el bien de Melissa, no queriendo causarle más problemas de los que ya tenía. Pero claramente aquello no salió muy bien que digamos.Por lo que Ryan sabía hasta ahora, ambos hermanos habían estado involucrados con respecto al tema de las drogas, siendo Melissa la que se involucró primero, seguido por Roy, quien se vio obligado a ser participe cuando Melissa comenzó a recibir amenazas por no haber hecho algunos pagos. Y ya saben, en ese tipo de tratos, el pago a tiempo o pronto, era lo que te mantenía con vida. Cosa que no ocurrió, claro esta. Melissa también explicó que no había tenido la intención de traicionar a sus vendedores, y que ella iba a efectuar los pagos correspond
Sinceramente, Matt estaba aburrido, muy aburrido. Desde que Oliver se fue a Rusia por negocios, hace tan solo cuatro días, Matt se había encontrando haciendo casi nada, pasando su tiempo libre junto a James, cuando este no estaba con su novio, y con la cabeza metida entre sus aburridísimos libros de economía. Pero había que aclarar que no estaba pasando por un serio arrepentimiento de la carrera seleccionada, solo que... El extenuante estudio del día a día pasaba de largo una vez Oliver se encontraba de vuelta en la casa luego de una largo día de trabajo, y es más, a veces, muy seguido, Oliver llegaba antes, vamos, él era el jefe y se podía dar esos lujos, nada iba a salirse de control por ello. Y Matt se sentía nuevamente vivo y no como un maldito zombie. Era algo a lo que se había acostumbrado ya.Pero ahora, ahora que Oliver no estaba, Matt se sentía un tanto miserable, él apenas y podía dormir cómodamente en la gran cama de su habitación. Y por ello ahora tenía ojeras, no muy noto
El lugar citado resultó ser bastante concurrido para la sorpresa de Ryan, cosa que no había sido apropósito, en serio, simplemente Ryan no estaba al tanto del nuevo lugar que se estaba inaugurando. De todas formas, Ryan no llamó para cambiar el punto de encuentro, lo que sea, porque de hecho la multitud ayudaba a mantener las cosas al margen. Nada podía salirse de control, aunque podría resultarles un tanto molesto e inadecuado para la situación. Se suponía que no iban a tener una conversación común y corriente, no iban a hablar del clima o del día a día. No podían ser escuchados.Fue bueno que las personas comenzaran a moverse, yendo a dicha dirección de la inauguración, Ryan no preguntó de qué. De todas formas no iba muy sonriente, cualquiera cerca suyo salía corriendo. Literalmente hablando. Resultó un tanto gracioso, nadie rió.Ryan tomó asiento en una de las mesas libres afuera de la cafetería, escogiendo la más lejana al resto. Si, había elegido una cafetería para el encuentro,
Ahora mismo Matt no estaba muy feliz, y por ello miraba de manara degustada a Ryan, pero no solo a él, sino que también a las caras nuevas, sobre todo al tal Jon. El tipo era más que peligroso y lo demostró, y Matt quería que echarlo, otra vez. Ya le había dicho que se largara apenas el hombre puso un pie dentro, pero fue ignorado y solo recibió una sonrisa y un saludo casi cortes. Matt lo rechazó por completo.—Tranquilo, él esta desarmado y tenemos a hombres competentes al rededor nuestro. Él podrá ser peligroso y todo eso, pero esta en desventaja, mucha desventaja— Aclaró James, —Sería detenido de inmediato si intentara algo, además, Ryan no lo hubiera traído hasta acá si realmente creyera que es una amenaza— Y es por esa razón que James se encontraba en calma, bebiendo de su jugo de naranja con una sonrisita en boca.Girándose, Matt observó a los hombres de pie junto al sillón principal del living, aun estaban hablando y estaban siendo algo así como amigables, no siendo los mejore
Troy no podía dejar de sonreír con bastante humor, porque lo que ahora Ryan tenía en mente no estaba siendo muy inteligente de su parte. Ryan apenas y le había dedicado una segunda mirada a Steven como para saber como era o si es que estaba tramando algo, Troy conocía al chico ya de hace unos días, y sin duda no podía ser una amenaza latente. Ryan estaba preocupándose de la persona equivocada. De eso estaba seguro Troy. Pero aun así Troy se sintió contrariado, porque la sospecha primaria la había tenido aquel hombre, Jon, quien a su parecer era un avezado en el tema, sin embargo el hombre no parecía ser del todo serio, mostrando una personalidad curiosa y divertida. —¿Entonces realmente quieres que sigamos al chico y lo espiemos?— Preguntó Troy en confirmación, su sonrisa ya no se mostraba.Ryan dio una mirada hacia donde estaba James, este le devolvió la mirada, luego de unos segundo regresó la mirada a Troy y asintió, —Es mejor precaver antes de lamentar, ¿no es lo que todos dicen?