Esposa elegida para mi hermano
Esposa elegida para mi hermano
Por: Danger Nigga
A cargo de mi hermano

—No, no, no y no —Patrick pasa las fotos de las candidatas con una mirada desaprobadora.

—Peyton, estás chicas se ven que no son buenas para acomodar la imagen de tu hermano —dice Chiara, su madre.

—Pues entonces tendremos que castrarlo y ya está —responde y se encoge de hombros.

Los tres se hallan en la oficina de Patrick discutiendo quien será la futura esposa de su hija y hermano, Logan.

—No podemos hacer eso, queremos herederos en la familia en un futuro —dice Patrick.

—Pero se nos está saliendo de control Patrick, y ya tenemos que viajar, no podremos cuidar su imagen de lejos…

—Lo sé Chiara, tenemos negocios más importantes que resolver la vida de nuestro hijo adulto con comportamientos inmaduros —se frustra Patrick.

Hay tensión en la habitación y se quedan en silencio pensando en una solución. Por lo pronto a Peyton se le ocurre una excelente idea.

—Yo me encargo de él durante su viaje —ofrece Peyton.

—¿Segura hija? Logan es muy problemático y no quiero que sea una carga para ti. —Chiara no está segura de ello.

—Es mi hermano mamá, puedo con él, lo conozco, prometo que en cuanto vuelva, será un Logan nuevo. —asegura Peyton.

—Perro viejo no aprende truco nuevo Peyton —le recuerda su padre.

—Por favor papá, dame está oportunidad de convertir a mi hermano en el hijo que necesitas y mereces —junta sus manos en suplica esperando la decisión de su padre.

En cuanto le anuncia su decisión, Peyton sale enojada de la oficina de su padre y se dirige a la habitación de su hermano, entra sin permiso y corre las cortinas para que el sol le molesten en el rostro.

—Logan, despierta. 

Se pone frente a él sin tapar el sol y cruza de brazos mientras lo ve.

—Estoy despierto, desde hace un buen rato —arruga su rostro por el sol en su cara—, solo que no he querido abrir mis ojos.

—Como sea, ya es de día, así que levántate.

—Déjame descansar Pey, pase toda la noche despierto —se cubre la cara con una almohada.

—¿Y la pasaste trabajando? —pregunta irónica—. De ser así, pues te dejo descansar.

—No seas molesta, además, ¿Por qué no tocas la puerta?

—Porque tocar la puerta es darte tiempo para que huyas de la responsabilidades.

Ella conoce muy bien a su hermano.

—Pero si para las responsabilidades estás tú.

—Logan, es en serio, por favor, no arruines esto.

Lo señala con su dedo en forma de advertencia.

—No estoy arruinando nada.

—Claro que sí, sabes que desde que nací he que querido ser el orgullo de mi padre y que me tome en cuenta, pero así tú no quieras hacerte cargo de las empresas quiere obligarte porque no soy una opción —se frustra—, no puedo creer que soy la hija perfecta y aún así te quiere a ti liderando… sin ofender.

—No te preocupes, aunque hubieras nacido primero que yo, él me querría en la estúpida empresa… ahora lo que no entiendo, es porque lo ayudas a acomodarme.

—Porque en cuanto nuestro padre se de cuenta quien es la nueva cabeza de la empresa, no quiero que tus tonterías dañen nuestra imagen.

—¿Y por eso es necesario comprometerme?

—El compromiso refleja madurez, Logan.

—Cuando sea libre, maduraré.

—Por favor… —se arrodilla y junta sus manos—. Ayúdame a que mi padre vea que soy capaz de todo, incluso de controlarte.

Logan suspira, se quita la almohada, se coloca boca arriba y queda sentado en la cama.

—Te ayudaré, pero ambos sabemos que papá no se rendirá hasta que yo tomé las riendas, así que ingeniaremos un plan donde yo me controle y las riendas las tomes tú.

—Gracias —le sonríe.

Él toma su mano y besa la parte superior en forma de decirle “de nada”. Peyton ve a su hermano con agradecimiento, pero también no puede evitar ver su erección cubierta por la sabana.

—¡Que asco! —aparta su mano—. No me beses mientras tienes una erección.

—Ay por favor, ni que lo que hiciera con doble intención. —rueda sus ojos.

—Pero se ve raro.

—Cuando éramos pequeños nos duchábamos juntos. —bromea por molestar a su hermana.

—Es muy diferente ahora Logan, estamos grandes y… —es interrumpida por una chica, quien sale del baño personal de Logan.

—Cariño, la tina está lista —explica la chica desnuda muy sensual.

—¿Es en serio? —Peyton ve a su hermano severamente.

Ella no puede creer que apenas su padre le ha dado la confianza y Logan ya tiene una chica que no es su futura esposa en su habitación, bueno, no cuenta si no es bajo su supervisión.

—¿Por qué más crees que es la erección? —pregunta obvio.

—Por tus sueños húmedos. —bromea con él.

—Ni que fuera mujer. —Rueda sus ojos.

—Disculpa… —se cubre la chica sintiendo vergüenza de su desnudes.

—Ni te preocupes linda, no eres la primera y no creo que seas la última —le sonríe Peyton, acostumbrada a ver chicas desnudas que están con su hermano.

—¡Peyton! —regaña su hermano.

—Ahora vístete, debemos ir con tu esposa. —le avisa Peyton a su hermano.

—¡¿Eres casado?! ¡Dijiste que era especial para ti! —La chica se enoja, luego llena un vaso con agua y se lo echa encima a Logan.

—Claro que fuiste muy especial, fueron los mejores 5 minutos de mi vida.

—¿Lo dices por ti o por mi? —lo ofende la chica y Peyton se ríe, mientras que su hermano la ve mal.

La joven se viste y se dirige a la puerta.

—Te recomiendo irte por la salida de empleados, la furia de mi madre te quemará —le aconseja Peyton antes de que la chica azotara la puerta.

—Eso no es cierto —dice Logan—, y ahora por tu culpa no podré bajarme la erección, ¿Dónde estaba mi hermana cool?

—Ha madurado y ha aprendido que no debo permitir que su hermano juegue con las mujeres, esa podría ser yo y con tu problema… pues para eso tienes la manos, ¿No? Y ahora te quiero en diez minutos en la entrada principal, nuestros padres ya se irán de viaje y debemos despedirlos.

—Deja de dar órdenes y salte de mi cuarto de una vez Peyton, a menos que me quieras ver desnudo.

—¿Mmm sabes? Quisiera ver si sigue siendo del mismo tamaño de cuando éramos pequeños —se burla.

—Por eso no duras con novio, pareces más hombre que mujer.

—Es culpa de papá y tuya, ustedes querían un varón más.

Peyton tiene la última palabra y sale de la habitación de su hermano, baja a la entrada y en diez minutos como su hermana lo pidió, ya estaba listo para despedir a sus padres.

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