—Peyton, bebé —Walter toma su mano sobre la mesa de aquel club que frecuentan desayunar.
—¿Si? Ella se hace la tonta, pero tiene un presentimiento de que le pedirá matrimonio. Walter besa su mano, saca algo de su bolsillo y Peyton cierra sus ojos esperando la noticia. El matrimonio es muy importante para su familia, si ella se casa, habrá más razones por el cual su padre la tomará en cuenta, al fin y al cabo, el matrimonio es un negocio del que todos salen beneficiados. —Debemos terminar —dice Walter y suelta la mano de Peyton. Ella abre sus ojos y ve que él solo estaba sacando su billetera para pagar la cuenta. Muchas emociones empiezan a invadir su cuerpo. —¿Disculpa? —se hace la ofendida. —Sí, es que ya no siento lo mismo. —¿Después de cinco años juntos, Walter? —Exacto, ya no te amo —dice Walter y suelta la mano de Peyton. Luego se levanta y ella ve como se va teniendo la última palabra, además de sacarle una lágrima. A pesar de no ser el centro de todos en el club, Peyton se siente avergonzada, sin embargo, se seca las lágrimas y sale de ahí como si fuese una victoria. Sus pensamientos están divididos, están debatiendo si estar triste por la verdadera ruptura o esperar que todo sea mentira y ver hasta el día siguiente a que él la llame y se reconcilien. Peyton llega a la empresa de su padre y camina hacia su oficina, su padre tiene una oficina para su hijo y para su hija e involucrarlos en la empresa, solo que quiere que Logan sea su sucesor. A través de las paredes de cristal de su oficina, nota que su hermano está revisándola, por lo que entra y lo interrumpe. —¿Se te perdió algo? —lo ve con severidad. —Te diría que es mi zarcillo, pero no sería muy obvio. —usa un tono divertido. Su hermana rueda sus ojos e insiste con las preguntas. —¿Qué haces aquí? —¿No querías que nos encontráramos aquí? —Si, pero no que hurtaras en mis cosas. ¿Qué buscas? —La lista de candidatas que me seleccionaste. —¿Y que pensabas hacer con ellas? —Tal vez adelantar un poco de trabajo —se encoge de hombros. —Te conozco y lo más probable es que quería sabotear mis planes, ¿Y que crees? Aunque los sabotees, tengo buena memoria. ¿Por qué quieres sabotearme? Creí que me ayudarías. —No puedo ayudarte si sigues con el imbécil de tu novio. —¿Y que pinta él entre nosotros? —Que no me cae bien y buscarme pareja, sería mantenerme muy ocupado para que juegues a la casita. —Logan… —Además de que quiero hacerte trabajar el doble para que no tengas tiempo de pensar en él. —Tú no lo entiendes Logan. —No, por supuesto que no lo entiendo, ¿Cómo ese imbécil te hace llorar y aún sigues con él? Te falta amor propio. —Esto ya no es cuestión de amor propio, es de imagen, para lo que fuimos criados. —¿De verdad quieres esto? —Mas que nada, Logan, por favor. —¿Por qué? —Porque no quiero ser la sombra de nadie, quiero que todos vean mi inteligencia, valor, de lo que soy capaz, no quiero ser solo un apellido. No quiero que nadie me tome por tonta, Logan. —Yo jamás te he tomado por tonta. —Camina hasta ella y la abraza—. Por loca y mandona si, pero tonta, jamás —la hace reír y besa su cabeza—. Bien, ahora dime, ¿Cuál es la primera candidata? —Ya te muestro las fotos. —Nada de fotos, programa citas diarias y ya está, si voy a casarme por lo menos que sea con alguien con quien tenga buena conexión. —Vale. Se separan del abrazo. —¿Lo programo para mañana? —pregunta Peyton yendo a su escritorio mientras ve su teléfono. —Para ya mismo, en diferentes lugares, misma ropa. —Le escribiré a las que estén disponibles y no es por desconfiar, pero voy a estar cerca monitoreando. —Menos mal que no eres desconfiada —suena sarcástico. —Es que ya sabes cómo me gusta tener el control. “Como me gustaría cambiar eso”, piensa Logan mirando el cuerpo de su hermana de una forma a la que está acostumbrado a mirar sin que ella lo note, aquel vestido le trae imágenes a su mente despertando sus fantasías más oscuras. El día se va volando con alrededor de 4 citas organizadas por Peyton, ella monitoreando cada una de ellas por lo acordado. Ahora se encuentran en un restaurante a unas cuantas mesas alejadas de su hermano y su cuarta cita del día. Se programo la hora y parece que la última chica se ha llevado horas extras. Peyton ve como su hermano y la chica ríen de lo que sea que estén hablando, se ven tan bien juntos que siente envidia y celos. “Cómo quisiera estar así con Walter”, piensa Peyton, revisa su teléfono para ver la hora y checar si su novio le ha escrito, pero no hay ninguna notificación de él. Peyton bosteza y le escribe a su hermano. “Me voy a casa, suerte” Levanta la vista y nota que su hermano saca el teléfono de inmediato, por lo que responde a su mensaje. “¿Ya la niñera me soltará la correa tan rápido?” “Estoy cansada y veo que te estás divirtiendo” “Pareces una vieja, ¿Quieres que te acompañe?” “Descansar temprano evita ojeras, deberías aplicarlo a ver si te quitas esas bolsas de los ojos. Y no, tú tranquilo me voy con Finick” “Ok. Y oye, son bolsas de fiestas y creo que me hace ver más guapo, o si no, ¿Por qué no me han dejado de amar las chicas?” “Que tonto eres, hasta mañana” “Descansa” Dejan de mensajearse y conectan sus miradas, sonriéndose hacia el otro. No hay nada más difícil para Logan, no poder ir tras su hermana y que no piense en nadie más…Luego de su agradable cita, Logan regresa a casa en su auto y estaciona este en el garaje, entra por la cocina y se sirve un poco de agua antes de irse a dormir.“La última chica no estuvo tan mal, sin embargo, no creo que pueda existir una conexión más fuerte por la que siento por Pey, es enfermo, lo sé, pero desde la adolescencia me he sentido así por ella, tal vez porque crecimos juntos”, piensa Logan.—Joven Wallace, que bueno que ha llegado —sonríe Tonya, su ama de casa.—Buenas noches Tonya —le sonríe de vuelta—, ¿Alguna novedad?—Sus padres han llamado a casa porque no contestaban el celular.—Peyton y yo estábamos trabajando para hallar a mi futura esposa, no deberían preocuparse tanto.—Es que eso fue lo que le dije, pero el señor se preocupó porque Peyton no le contesta.—Pues debe estar dormida. —Se encoge de hombros.—No Joven Wallace, la señorita no ha llegado y lo sé porque Finick no se ha pronunciado en la entrada.—¿Qué? —Logan no puede creerlo y se aterra de inmediato
Logan se ríe por las palabras de su hermana y la sube a la zona privada de la casa de Vin, quién hay un guardaespaldas de suma confianza que no deja subir a cualquiera. Finalmente entran a la habitación de huéspedes y Logan deja a su hermana sobre la cama.—¿Dónde habrás dejado tu ropa hermanita? —se pregunta a sí mismo, ya que contar con su hermana ebria es inútil.—La tiré por ahí —responde ella divertida y su hermano se sienta a su lado.—Tu conjunto favorito, lo perdiste —dice mientras se quita su saco y se desabotona la camisa.—Está noche decidí que no me importaría nada.—¿Por qué? —Le coloca la camisa a su hermana y se la abotona, sentir su piel le da un escalofríos. Al terminar ve a su hermana y tiene los ojos cerrados.—No le digas a mi hermano, pero Walter terminó conmigo otra vez y creo que está vez es en serio, no me ha llamado desde que lo hizo.—Lo siento tanto… ¿Y por qué no le quieres decir a tu hermano?—Porque me gusta tener la razón y normalmente la tengo, pero cua
Logan no logra tener fuerza de voluntad, a él le enloquece todo de ella y unos pensamientos le dicen que disfrute antes de volver a la realidad.Con sus dos manos aprieta su cintura y las baja hasta su trasero para apretarlo y masajearlo. Peyton pasa las manos por su pecho y las baja detallando cada zona ejercitada de Logan, sus manos llegan hasta su pantalón y antes de que meta sus manos, él abre sus ojos y reacciona.—No Peyton, está mal —la baja de ella y la coloca a un lado.—Agh, como quieras, solo quería ayudarte con tu situación, luego no digas que nunca te ayudo —le da la espalda y se duerme.Logan se sienta en la cama y vigila que su hermana no haga otro movimiento del que tal vez no tenga control. Detalla su cuerpo con su camisa y le provoca tanto que… decide taparlo con una sábana. Cubre su rostro con sus manos y se siente el peor hermano del mundo, pero lo que más le importa es que su hermana no lo odie luego.En la madrugada Logan lleva a su hermana a casa luego de que l
Logan se encuentra en el mismo restaurante de la noche anterior en la cuarta cita. Ambos están sentados en la mesa para dos y charlan sobre lo que viene para su futuro.—Ok Jessie, eres muy linda y una increíble chica, pero solo te he hecho venir hasta aquí por negocios.Acomoda su saco y enlaza sus sobre la mesa para hablar con severidad.—Créeme que también acepté venir por negocios, necesito esto, pero tengo entendido que tú hermana quiere tu puesto y la verdad es que no estoy de acuerdo con ello.Jessie se cruza de brazos y entre cierra sus ojos esperando a ver qué dice Logan.—¿Acaso eres machista? —Arquea una ceja.—Si lo fuera, no estaría aquí negociando un matrimonio por contrato.Logan toma un poco de su copa y se prepara para escuchar los términos, tal vez piensa que se lo está tomando a la ligera, pero investigo lo suficiente para darse cuenta que sería beneficioso una unión de ambas familias.—¿Qué es lo que quieres? —pregunta él dispuesto a negociar.—Que te hagas cargo d
Chiara nota la pierna inquieta de su hijo y se acerca a él para acariciar su cabeza y tranquilizarlo, aunque su pierna haya dejado de moverse, a él no se le quita la ansiedad.—Te veo ansioso —susurra su madre en su oído—. ¿No estás drogado, cierto?La pregunta hace que ellos se miren. Logan no puede creer que su madre desconfíe tanto de él, por lo que la ve horrorizado.—¿Qué? No, tengo que ser digno para mí novia.—Así se habla —dice muy orgullosa de él—, pero entonces ¿Tienes hambre?Insiste y Logan sabe la excusa perfecta para que su madre no siga con tanto interrogatorio.—No mamá, ya sabes cómo me ponen estos temas. —le recuerda.—Vale.Chiara vuelve a su puesto y entra en la conversación que tiene su esposo con Jessie. Logan no aguanta más y ya quiere ver a su hermana.—Creo que iré por mi hermana, se ha tardado mucho, ¿no creen? —le pregunta a todos.—Es tú hermana, ya sabes cómo es —dice su madre encogiéndose de hombros.—Solo quieres buscarla porque no te gusta hablar de la
Esas palabras le caen mal a Logan en el estómago.—¿Y? ¿No lo estás considerando, cierto? —se alarma—. Siempre te hace lo mismo, terminan haciéndote llorar y luego quiere volver, quiere volverte dependiente a él ¿O que? Es un loco tóxico, además de que casi arruinas tus planes por él. Hay muchas cosas negativas por las cuales no deberías considerarlo y puedo nombrarlas con gusto.Regresa esa sensación de proteger a su hermana de cualquier tonto que no la vaya a amar como él la ama.—Él estaba arrepentido y cuando te necesitaba, te fuiste.—Lo siento, pero vi que lo estabas manejando bien. Logan en parte creía que su hermana estaría bien y por el hecho de que no la creyó tan tonta como para seguir en el juego de Walter.—Porque había que encontrarte esposa, no tenía tiempo para llorar, pero cuando me dijiste que te mudarías y que ya la habías hallado, tuve mucho tiempo sola, tuve mucho que pensar y llorar. Además, mamá me preguntó por él y le mentí diciendo que estaba de viaje, él es
—Solo… hazlo —pide él.—Ok, está bien.Peyton se tapa los senos y se levanta para ver a su hermano, pero este le da la espalda y termina de vestirse.—Ya estamos vestidos, ¿Y ahora? —pregunta ella cruzándose de brazos.—¿Cómo que ahora que? Perdón, pero eres mi hermanita, esto no debió pasar, de verdad lo siento mucho, yo siempre quise evitar esto…Ella lo interrumpe con otro beso, lo hipnotiza nuevamente, le encanta mucho sus labios y su forma de besar, hasta que reacciona y la aparta de él.—Peyton, no me estás ayudando —se pone de mal humor.—¿Y por qué querría ayudarte? Me costó asimilarlo, pero creo que desde hace mucho ambos no nos sentimos como hermanos.—Una cosa es sentirlo Pey, pero lo somos.—No quita el hecho de que me gustes.Las mariposas se le alborotan a Logan en el estómago, está loco por ella que la idea de estar juntos lo hace feliz.—Peyton creo que lo tragos te afectan de más.—No Logan, verte con Jessie me afecta, creo que si no estuvieras con ella, jamás me habr
Niega su cabeza seguidamente para reaccionar del transe que le produce su cuerpo.—Peyton… —regaña—. ¿Qué quieres?—Tal vez recrear esa pijamada que le dijiste a tu novia, podemos desordenado la habitación para que no parezca que estás mintiendo… Solo voltea su rostro y lo ve con sonrisa perversa.—Si pones de tu parte, podríamos lograrlo… podemos revolcarnos en toda la habitación haciéndome tuya en cada rincón —le guiña el ojo.Logan vuelve a morder su labio sintiéndose provocado por ella.—Sal de mi habitación Peyton, mi novia me cree y confía en mí, no necesitamos recrear nada.—¿Tu novia por contrato? —Se burla.Él se enfurece consigo mismo por no poder controlarse e insiste.—Pey, ¡Fuera! —señala la puerta.—Ay ya, no te amargues, solo voy a usar tu ducha, la mía se dañó y desde que no estas, uso la tuya.—Bien, pero hazlo rápido…Da un suspiro y ve hacia otro lado.—No te preocupes, será rápido, Walter no debe tardar en llegar.Él la mira sin poder creerlo y a la vez esta enoja