Carlotta se sentía indignada, sabía que su amiga era impulsiva, pero esto que había hecho era inconcebible «¿Qué bicho raro se le metió a ella? ¿Cómo se le ocurre decir esas barbaridades a los medios?» se dijo mentalmente, porque lo que había hecho le parecía una completa locura. Por un momento se q
Sandro se veía amenazador, y Carlotta no pudo evitar sentir que su corazón saltara de la emoción en su pecho, porque a pesar de sus limitaciones, se atrevía a enfrentarse a Mike, le inspiró tanta ternura que sus ojos se humedecieron.Por su parte, Mike, dirigió su vista a su hermano y luego a ella,
—Gracias, Mike, por traerla, ella es la mujer más sensacional que he conocido —expresó con sinceridad, sin dejar de contener su emoción, tomó la mano de la chica, mientras ella daba un suspiro, preocupada, porque no deseaba ir de prisa, sin embargo, él se veía tan ilusionado, que tampoco deseaba rom
Tanto Carlotta cómo Mike, se quedaron observando a Sandro como si le hubieran salido dos cabezas, ella porque a pesar de que también le respondió que no, tenía sus razones y era por su reciente experiencia, no obstante, no podía negar que el chico le gustaba y mucho más de lo que recordaba que le gu
Al escuchar a su hermano empezó a mover la cabeza de manera negativa, —¡No! ¡Estás loco! ¿Cómo voy a hacerle eso? ¿Sabes que significaría para ella someterla al escarnio público, que la gente y sus colegas la señalen? No haré eso, si quiero hacerla feliz y que se dé cuenta de que ella me importa en
—Es que no quiero casarme con Sandro —pronunció con un ligero puchero. —Es tu opción, yo no quiero casarme contigo, ni con nadie, no nací para eso —expresó el hombre con un dejo de nostalgia. —Te hicieron mucho daño en el pasado ¿Verdad? —él se quedó en silencio, solo afirmó con la cabeza. Despué
Carlotta se quedó viéndolo, no pudo evitar esa mezcla de alegría, sorpresa, recorrió el salón lentamente, viendo los detalles, al mismo tiempo que trataba de pensar como pudo haber llegado Sandro con tanta rapidez. —¿Me vas a decir cómo te viniste? —sin esperar respuesta siguió hablando—¿En otro v
—Seguramente, en algún lado habrá una chica que te guste más, no debes atarte a mí porque creas que no vas a volver a caminar… —Sandro interrumpió sus palabras. —¿Crees que quiero estar contigo porque estoy inválido? ¿Por qué crees que pienso que no voy a volver a caminar y te busco a ti solo porqu