- ¿Qué es lo que al CEO tanto le importa? - pregunta Pablo con curiosidad. - Que me acueste con él, está furioso porque no he querido hacerlo desde la primera vez que nos vimos en esta ciudad de locos. Luego de casarnos decidí que lo mejor era no acceder a mis impulsos de tener aunque sea una noche de placer con él, o varias - Pablo termina de darme el cálido abrazo. - ¿Por qué tomaste esa decisión? ¿No te parece que es algo redical? - me pregunta mientras busco las servilletas de papel para limpiarme la nariz y las lágrimas. - No quiero que Leonard me vea como a un simple objeto sexual, si tengo que elegir entre eso y que mi corazón se rompa en mil pedazos, prefiero infinitamente tener el corazón roto - le digo y las lágrimas se me vuelven a escapar, rompo en un llanto salvaje. Sin tener otra opción Pablo me abraza una vez más - vaya querida - su voz tiene un tinte ligero de compasipón sincera - ya no sé qué hacer o qupé decirte para hacerte
- ¿En dónde voy a dormir? - me pregunta Leonard luego de un largo rato de silencio, haciendo referencia al hecho de que debemos permanecer juntos. - Aquí, en mi habitación - le señalo mi enorme y cómoda cama. - Bien, iré afuera a buscar algo de alimento - me dice eso como si en verdad estuviera en su casa - Ambar - se regresa ya estando en el marco de la puerta de mi recámara. - ¿Qué pasa? - le pregunto intentando no desplomarme debido al sueño que me invade. - Lo mejor para todos es que tú te mudes a mi apartamento luego de que llegue Roger del viaje de negocios - me dice abruptamente. - ¿Qué? ¿Y qué va a pasar con Pablo? ¿Qué va a pasar con todas mis pertenencias? - le pregunto dejando salir mi frustración. - Tu ropa y todo lo que puedas transportar contigo te lo podrás llevar, además ya he comprado más ropa para ti ¿lo recuerdas? - en ese momento se me viene el recuerdo de la primera tarde que tanto Pablo como Amelia estuvieron aquí haciéndose faciales con Valeria, un piso ar
- Me parece que eso no será posible - Roger nos mira a ambos. - ¿Qué es lo que no será posible? - le pregunto temerosamente. - Que tú te mudes al apartamento de Leonard - me responde Roger. - ¿Por qué no? ¿Cuál es el problema? - pregunto sin entender a qué se refiere aunque por el rostro de Leonard puedo casi adivinar que una mala noticia viene en camino. - De algún modo le han hecho llegar a nuestra madre la noticia de que ustedes dos se han casado - me he casado bajo mi verdadera identidad ¡Martha no puede darse cuenta que aún sigo con vida! - y ahora quiere que ustedes dos se muden a la finca enorme que es la casa de nuestros padres - aclara Roger, Leonard no dice nada solo respira agitadamente. - Pero aún con eso este podría ser el refugio perfecto para Amelia, estaría acompañada de Pablo y lejos del alcance de tu padre - una fuerza interna se apodera de mi. - Isis tiene razón, Amelia estará más segura aquí que cerca de nuestro padre, lo mejor será que ella se quede aquí con
La cena se llevó a cabo entre gritos, discusiones, insultos y malos tratos entre Gerard y sus dos hijos. Al poco tiempo de que la cena dio inicio Martha ordenó a Roger que se sentara a un lado de ella, así fue, unos instantes más tarde el teléfono móvil de Gerard sonó y él se retiró de la mesa para atender a la llamada. - Bien - Leonard se puso de pie - será mejor que Isis y yo no terminemos la cena por hoy - dijo a su madre y me tomó de la mano para que yo también me levante. - Vamos querido, no te estarás tomando en serio las amenazas de tu padre ¿o si? - dice Martha, que al parecer no sabe nada de que yo estoy al tanto de las intenciones de su marido y las suyas. - Eso no importa por ahora, pero como esposos que somos Isis y yo merecemos respeto y privacidad. A partir de mañana no cenaremos más en esta mesa si mi papá está presente - nuevamente Leonard me acomoda tras de él mientras discute con su madre. - Supongo que no será de mucha importancia que ustedes dos no estén pres
- El trabajo ya está hecho - me dice Adriana entre susurros y abriendo la puerta del baño, lugar en el que me quedé escuchando mis audífonos para no tener que escuchar los gemidos de Abdiel. - ¿Él sigue con los ojos vendados? - le pregunto retirándome los aidífonos. - Sí, tal como usted me lo pidió - me responde Adriana temerosamente. - Bien, tienes que quedarte aquí sin hacer ruido y sin abrir la puerta hasta que yo regrese por ti - salgo del baño y Adriana entra a sentarse en la tina de jacuzzi vacía - ahora vuelvo - le digo cuando veo que ya ha acato mi indicación. - ¿Has disfrutado de nuestra noche de pasión amor mío? - le pregunto a Abdiel fingiendo que estoy excitada. - Sí... - tiene un cansancio extremo, puedo ver que Adriana lo ha dejado hambriento y deshidratado - usted es tan increíble mi señora - me dice con plena satisfacción. - Me alegro muchop de que hayas disfrutado de nuestra primera noche juntos - le digo mirándolo desde el borde de la cama, parece una res que e
Me quedé mirando fijamente al oso y al ramo de flores hasta que descubrí que este último trae consigo un sobre con una nota, me acerco para abrirlo."Yo sé que nuestro amor nunca podrá salir a luz, pero quiero que sepas que estoy enamorado de ti y a pesar de que lo que siento es prohibido porque eres la esposa de mi hermano siempre voy a estar disponible para ti, pues quiero que tu seas para mi aunque solo se trate de un amor imposible. Te deseo Isis, con toda mi alma y con todo mi cuerpo, desde que te vi por primera vez siento un enorme y ardiente deseo de estar contigo en una cama haciéndote totalmente mía". Atte: Roger. Al terminar de leer dicha nota sentí como si mis manos se estuviesen quemando ¿de dónde sacan los miembros de esta familia las agallas necesarias para traicionarse los unos con los otros? ¿no estaba Roger tan enamorado de Amelia? ¿Porqué me está buscando para tener una aventura? ¿acaso no respeta a Leonard? .Sin saber qué hacer mandé una fotografía al teléfono mó
Apenas hoy he podido levantarme de la cama para ir a la consulta con el especialista de fertilidad, me he quedado allí debido a que el miedo de salir por los pasilllos y los jardines de la finca de los Boure me aterrorizaba, no obstante no podemos esperar más para que este proceso de inicio. Pablo no me acompañará pese a que con todas mis fuerzas deseo que sea así, Leonard ha dicho que esto es entre nosotros y que nadie debe estar al tanto de que vamos a tener un hijo hasta que el bebé esté en nuestros brazos. Todo el camino al hospital me he mantenido en silencio y tomada de la mano de Leonard, no he hablado con él acerca de que yo también lo amo pero algo dentro de mi me dice que ya lo sospecha - ¿estás lista? - me pregunta con delicadeza. Yo asiento con la cabeza para responder. - Es uno de los mejores especialistas de la ciudad, no tienes nada que temer, yo ya he hecho mi donación de espermatozoides - me asegura. Tal hecho quiere decir que solamente falta que sea a mi a la que se
El proceso del embarazo ya ha dado inicio, justo ayer fuimos a ver a la chica que nos está rentando su vientre para poder albergar a nuestro hijo, no pude evitar sentir celos por un instante y no por el hecho de sea ella quien esté cargando a mi hijo en su vientre sino porque Leonard se mostraba demasiado atento con ella, sin embargo, al pasar de los minutos pude darme cuenta de que solo se trata de lo que una mujer que se embaraza bajo contrato tiene derecho a recibir.- ¿Algún día piensas tener hijos conmigo? - me preguntó Leonard cuando veníamos de regreso a casa, misma que ha quedado a mi nombre cuando Leonard tomó posesión de la mafia. - Sí, pero luego de que sucedan un par de cosas - respondí inmersa en mis pensamientos. - ¿Qué cosas? - me peguntó mi esposo. - La primera, lograr disolver la mafia pero sin dehacernos de la enorme ganancia que esta deja, sabes muy bien que lo último que quiero es que mis hijos crezcan en medio de unos sanguinarios delincuentes para que luego te