No me había dado cuenta de que estaba tan cansada, me despierto sintiéndome un poco perdida, sin saber dónde estoy, tengo sed, necesito un trago de agua, mientras miro a mi alrededor, me acuerdo de anoche, Lucas me llevó a su casa.

Siento la boca seca, necesito un trago de agua y decido ir a la cocina, no debería ser difícil de encontrar. Bajo las escaleras y pronto encuentro la cocina, abro la nevera, saco una botella de agua y me la bebo. ¡Justo lo que necesitaba!

Insomne, decido pasear por la casa, una habitación más bonita que la otra, entro en la sala de juegos, en la de televisión y abro otra puerta para encontrarme con una preciosa biblioteca y a mi derecha un piano muy antiguo, ¡qué maravilla de reliquia! No puedo resistirme, me acerco, levanto la base que protege los teclados, los toco y el sonido que sale me hipnotiza, no puedo soportarlo, no puedo contenerme, me siento y empiezo a rasguear las teclas, formando acordes que cobran vida y llenan todo el lugar, no quiero desp