Estas balas podían atravesar cualquier capa de tejido blando o zona vulnerable.

Todos, incluso los lobos, tenían algunos puntos débiles. Un talón de Aquiles que estaba esperando a ser cortado. Sólo era cuestión de tener la suerte de encontrarlo, tenía algo en mente, y si no funcionaba entonces Ryan moriría y yo me vería obligado a volver a esa situación de m*erda con el Rey. El único problema era que tenía que acercarme lo suficiente para que mi plan funcionara.

“Si sigues, entonces lo matarás”. Afirmé todavía sosteniendo el arma directamente delante de mí en señal de advertencia.

“Un traidor y rebelde menos con el que lidiar. Secuestró a su Reina, traerte de vuelta con vida fue mi única orden. El Rey incluso nos dio permiso a todos para hacer lo que fuera necesario para triunfar”. Dio un paso adelante hacia mí amenazadoramente, juro que vi la lujuria dispararse a través de sus ojos, seguramente no iba a…

“¿Qué estás haciendo?”. Mi postura vaciló un poco cuando se acercó a mí. Su m