Las horas pasaron y Agustín por fin hacía su llegada a Ciudad Prayre. —Hola Joel, soy Agustín estoy en el aeropuerto...— ¿Cómo has dicho?, ¿Por qué no avisaste antes? — Por qué lo mencionas ¿Qué pasa? — ¿Viniste por Lybia verdad?, Verás ella partió a Beirgen a saludar al bisabuelo. — ¡Qué! — Lo siento hermano, no pude avisarte antes. — No te preocupes igual sigo en el aeropuerto, tomaré el primer avión hacia Beirgen te hablo luego, adiós hermano. —Adiós—Como había mencionado, Agustín reservó el primer avión unas horas un poco más tarde. Beirgen, sin embargo, se ubicaba lejos de allí, pues tomaba algo de más de un día y medio llegar por lo que le tomaría más días lejos de Casa a Agustín, por otro lado, estaba nervioso, pues Beirgen era el país principal de los Ariza de dónde vienen sus antecesores por lo que las costumbres eran lo primordial para ellos en especial para el bisabuelo aunque anteriormente había venido hablar con él, había entendido razones, pero no estaba de
***—A partir de este momento sus vidas están destinadas a permanecer juntos, en esta ocasión las Familias Ariza y Bleis hacen el juramento que los herederos formaran una vida juntos en el futuro lo cual se hará cumplir, ya que es el designio de los antepasados seguir con sus sabias enseñanzas y sus tradiciones. “Entonces repitan después de mí: Este día Glorioso ha llegado, las promesas se cumplen y jamás se olvidan aún después que la sangre recorra, primero están los juramentos y las tradiciones que nos hacen Grandes y Gloriosos”— ¿Lybia y Agustin aceptan su destino de una vida juntos?— Si lo aceptamos y lo juramos…— ***Agustin despertó ante la mirada expectante de los que lo rodeaban a la vez que él se sentía aún confundido por esos pequeños recuerdos que volvieron de la nada a su mente, pues hace muchísimo tiempo dejó en lo mas recóndito de su memoria esos pasajes, pues pensó que nunca más volvería a ver a Lybia aquella muchacha con la que solía pasar sus días de felicidad ha
— Bisabuelo yo…— Respuesta——Uhm, Sí… Dijo tímidamente Lybia con voz baja pero suficientemente perceptible para la otra persona. —Bien, es todo lo que quería saber——¿Qué quiere decir con ello?, preguntó Lybia al no saber por qué le preguntaban sobre lo que sentía y sobre lo que pasaría de ahora en adelante. — No te preocupes, lo sabrás a su debido tiempo. Al no conseguir nada, Lybia se rindió sobre ese tema y dejo de insistir, pues sabia que el Bisabuelo Bertram tenía su propia manera de hacer las cosas y nadie podía ir contra él. — Bisabuelo, quería preguntarle ¿Cómo se encuentra August? — Aún está descansando, no te preocupes no es nada grave solo necesita ordenar sus ideas. — Ya veo… Bisabuelo creo que es mejor que me vaya, es mejor que esperemos un tiempo para que yo me presente ante él sabía que esto podría causar este tipo de situación y no fui lo suficientemente cuidadosa es mejor que estemos distanciados hasta que se haga la idea y acepte mi regreso. — Sí, podría ser
En la conversación que tuvieron los adultos, August se vio envuelto en uno de los temas, pues creían que no debía ser tan cercano a los Bleis, pero el padre de Lybia se negó en efectuar tal pedido, pues sabía de las dotes de aquel muchacho y lo dijo enfrente de todos los presentes defendiendo a su protegido y a su hermano quien se le daba bien la cortesía y el ámbito de las relaciones con los demás ante estas palabras se descubrió sus orígenes de los pequeños, lo que suscitó que los Ariza tengan más presente a los integrantes relegados de la familia. Pasaron unos años donde August y Joel siguieron bajo la protección de la Familia Bleis quienes adquirieron más habilidades para desarrollarse en sociedad con sus conocimientos que habían adquirido bajo su tutela, los pequeños demostraban grandes avances tanto que los Bleis le debieron parte de sus ganancias a las recomendaciones que hacía August y por las buenas relaciones que conseguía Joel esto hizo que crecieran en poco tiempo, aquell
— August, veo que estás mucho mejor ¿verdad? —Sí, Bisabuelo— Bien, creo que ya va siendo hora, ve al jardín donde encontrarás las respuestas que tanto buscas, menciono Bertram indicando el camino ya conocido. Agustín, al escuchar esas palabras, al inicio no sabía como responder, pero después de un par de días se hizo a la idea del regreso de Lybia, pero aún tenía muchas dudas sobre que es lo que haría, elegir a una de las dos era muy cruel para él, pero era cierto que ahora su vida esta alrededor de Mónica, pero no sabía como sentirse con Lybia si la vería como una amiga, una hermana o acaso continuarían los viejos sentimientos no lo sabía y tenía que tener respuestas. Caminaba por el pasaje de las lilas, aquellas flores que siempre fueron las favoritas de Lybia, era el sendero perfecto el que llevaba al jardín donde había especialmente un ciruelo que recién florecía, aquel que era nuestro preciado lugar para escondernos. Fui directamente recordando bellos Momentos, cuando llegue
—Nana, yo no quiero alejarme de ti. Concluyó diciendo finalmente Agustín con una mirada cabizbaja y confusa. — Kusti, es lo mejor para los dos y sé que tu ahora esposa no lo tome de la mejor manera, sé que la quieres y por lo mismo es mejor tomar caminos separados. — Hallaré la forma solo no quiero que desaparezcas otra vez, eres importante para mí y eso jamás cambiará. — Entiendo Kusti, veo que no cambiarás de parecer, sin embargo, piensa cómo harás que acepten a tu esposa en tu familia sabes que será algo difícil si aceptas que me vaya te ayudaré, pero si no tendrás que lidiar con este dilema tú solo. Dijo Lybia con dureza. — Nana, encontraré la manera de conseguir que ambos sigamos con esta relación, como dije, no dejaré que te vayas lejos donde no pueda hablarte. —Como quieras, supongo que no puedo convencerte como siempre haces lo que quieres — Ambos siguieron hablando en aquel lugar como los viejos tiempos entre risas, sin embargo, aquella conversación fue escuchada
— Debes de pensarlo muy bien… — No tengo nada que pensar Bisabuelo, yo… ¡No Puedo Tener DOS ESPOSAS!, gritó efusivamente August para mostrar su disgusto ante tal sugerencia. — Lo siento August, pero es la única forma que se me ocurre para que Lybia se quede…— Está bien, no te lo tomes seriamente solo tomadlo como última medida si no hay otra opción. — Uhm… Lo entiendo, lo pensaré Bisabuelo. — Está bien, está bien tu abuela Raina pronto vendrá al palacio, por ello te sugiero que cuanto antes debes traer a tu esposa y presentarla al menos ante mí. No veas en mí un enemigo hijo, aunque tengo el peso de cabeza de familia que soy y represento, tengo muchas decisiones que tomar por ello sé que es una situación difícil para ti, pero verás que pronto se nos ocurrirá una solución. — ¿Sí, verdad?, dijo August poco convencido— Traeré a Mónica Bisabuelo. — Uhm… está bien hijo, es lo que debes hacer. Después de aquella pequeña conversación el Bisabuelo Bertram dejó a August solo en la
Los siguientes días August, recogió sus pocas pertenencias de la mansión para mudarse al Palacio, pues tenía pendientes que arreglar de las empresas Familiares lo que ocupó gran parte de su tiempo y lo que restaba lo que era en su mayoría era cuando ya caía la tarde donde trataba de relajarse de sus días pesados lo que significaba también encontrarse cada noche con Lybia con quien pasaba horas y horas de plática volviendo a esas épocas de adolescentes donde recibían su educación en la Familia Bleis. —Entonces ¿Por qué tienes esa mala cara Kusti? — Yo… Volveré a Ciudad Celeste, respondió August desviando la mirada. — …, no lo entiendo Kusti ¿No deberías estar feliz por volver a ver a tu esposa?, tengo entendido que te ausentaste bastante tiempo ¿no es así? — Es verdad, es solo… — Que es lo que tanto te perturba Kusti, te escucharé sabes que estoy siempre disponible para ti. — Nana yo … Lo siento, por mas que busco y busco una solución ninguna me conlleva a lo que realmente de