(...)Después de una madrugada de trabajo me siento cómodamente para tener un rico almuerzo. Qué raro se siente el lugar al no tener cerca la vocecilla de Norma, es que ella es incansable y toda esa energía de ocurrencias hacen que mis días cambien. Ahora que la tengo presente, espero que esté bien, siempre puede pasar la ocasión de que las personas que me pueden seguir son capaces de lastimarla sin pensarlo.Ah, no puede ser, será que al pensar en ella mágicamente aparece de la nada. Pufff, no creo que sea ella porque estas no son horas de venir.Dejando a un lado mi almuerzo me levanto del comedor al escuchar que el timbre no deja de sonar y sonar, ¿será Norma?, pero no puede ser ella, ya que tiene llaves del apartamento.Apresuro mis pasos y en solo minutos me encuentro en la puerta principal. Giro la manija.—Norma —me quedo estática al ver que la persona que está frente a mis ojos no es Norma.Intento poner las cosas en su lugar y comprender de una vez por todas la presencia de e
—Este caballero es… —me alejo un poco de él—, el novio de la señora que le lavo la ropa—¡muerta!, estoy muerta y no sé si esta mentira sea efectiva, pero lo único que me queda es intentar.—¡Hmmm…!, ¿y ella le dio nuestra dirección?, pero lo que no comprendo es porque no se cambió de ropa, “en su casa” —recalca entrecomillas—, por qué no te mandó solo la muda de ropa—enarca una ceja y sus palabras me ponen nerviosa—. ¿Y por qué te mandó al novio?, oh, mejor dime por qué su ropa tiene salsa—interroga—, sí, la salsa que está sobre la mesa —truena su lengua, asqueada de tanta mentira—, no me creo, es cuento barato y aún más al recibirlo en paños menores—alza su dedo y me señala de arriba hacia abajo.No me apeno por llevar puesto un babydoll, no lo veo muy provocador, además no es pecado que vean mis atributos. Con ver no me matará, pero si el maldito se atreve a tocarme, es ahí que se la verá conmigo.—Está bien, te diré la verdad —dejo salir un suspiro—, es que este señor vino a pagarm
***Olivia***Una hora encerrada en mi dormitorio esperando que Norma salga de su cueva con el novio, por el hecho de que no pienso aparecer de la nada. Mientras ella decida estar encerrada, yo me quedaré pensando qué estrategia debo usar y cuál será mi excusa para salir a las ocho de la noche sin que mi amiga me llene de interrogaciones.Juro por mi vida que esta salida al club no será en vano, no lo será porque el maldito me las pagará. Mierda, es que siento un odio profundo hacia él y eso nació desde que lo vi y creció desde que se atrevió a cruzarse en mi camino.—Olivia, puedo pasar —me levanto de la cama tras escuchar el susurro de Norma, cada paso que doy es un bajón para mi corazón y una tortura para mi conciencia.—Norma —suavizo mi voz, teniendo puesta la máscara de la sumisa de Olivia, lo único que puedo hacer es bajar la mirada—, lo siento—balbuceo.—Deja las ridiculeces y mejor dime quien es en realidad el caballero —pasa su mano delicada en mi quijada, la empina exigiendo
Me quedo mirando fijamente, una cosa es mentirle y no me gusta, pero en este caso, esa mentira es la diferencia entre que sienta que me defrauda o que me avergüenzo de lo que puede darme, así que decido que es menos doloroso así.—No, perdóname, Norma, pero una cosa de lo que dices es cierto —siento un nudo en mi garganta—. Ese señor es mi novio, pero era una sorpresa—exclamo con mucho entusiasmo—. Norma, nada de lo demás es cierto—cada mentira es una fuerte puñalada para mi ego—, no me acuesto con él por dinero, no tengo todo lo que ves porque me acuesto con él, no lo meto a nuestra casa para acostarme con él —tiene que entender que no soy una puta!—… Te amo y tú eres lo más importante para mí y olvida que estoy pensando en irme porque eso no es cierto.El maldito de Noah ha ganado la batalla, pero no la guerra.—Yo también te amo —se abalanza a mis brazos y el llanto inunda mis oídos—, pensé que no me querías y que me mentías, pero ahora sé que todo era una sorpresa que arruiné, lo
Tengo la sangre fría para matar a cualquiera que se me cruce en mi camino, ¿qué?, esperaban que una mujer no tenga los mismos huevos que un hombre. Las mujeres tenemos suficientes ovarios para enfrentar un puto que quiera excederse de listo. Además, a mí nadie me falta el respeto porque el que lo tiene no cuenta el cuento.El vividor se acerca al puto que está tumbado en el piso y yo no dejo de sonreír. Unos minutos después, entre cinco hombres apuntándome y Ponky con ese rostro de… ¿Qué paso aquí?—Dejen de apuntarme cuarteto de imbéciles —bramo—. Si son las nanas de este vividor, no es necesario de limpiar mi oficina, ya que está hecha un asco.Hay que limpiar todo este lugar porque en menos de dos horas se tiene que abrir y hoy es noche de show de las nenas y de reunión con los grandes mafiosos.—Quiero que todos salgan de esta oficina —abruptamente se pone de pie—. ¡Pero que salgan!Waooo… pero qué carácter, el hombre me ha dejado helada al escuchar su prepotencia y su frialdad.—
***Las cosas no continuaron, ya que una llamada insistente se presentó ante mis oídos, obligando a Oliver que contestara su maldito. Él obedece mi orden y sin querer las cosas se fueron a otro rumbo.Resultó que Oliver tiene un compromiso al que no debe faltar y yo como estúpida queriendo cogérmelo.Enfadada me levanté y me fui directo al baño, no tenía ganas de verlo y menos de discutir, tampoco de arrepentirme de haberme ido del club. ¿Será el karma? ¿Qué maldito brujo estará visitando a Noah?Me detengo por un momento frente al espejo, ese que refleja la imagen de una mujer furiosa, decepcionada y humillada, todo porque ella pensó que el hombre que tanto deseaba venía por ella, sin embargo, todo fue malo.Sin gestos en mi mirada, empiezo a quitarme el vestido, los tacones, mi ropa interior, todo hasta quedar completamente desnuda. Camino hacia la ducha, con la intención de apaciguar la furia que recorre por todo mi cuerpo, es niñería a la vez el comportamiento que estoy demostrand
***Quedando el apartamento asolado, me dejo caer en el sofá-cama, estilo nórdico, color rojo vino. Me acurruco con el suave y esponjoso cojín, exhaló todo el aire que tenía contenido, me pierdo en las lagunas del remordimiento y del arrepentimiento, cierro mis ojos con fuerzas y la imagen de esos ojos se hacen presente. Es inevitable pensar en él, es inevitable que mi corazón sienta miles de sensaciones, poco a poco siento que mi mundo da vueltas y vueltas, no puedo permitir que un hombre se apodere de mi corazón, creo que estoy a tiempo de poner en stop algo que nunca ha existido. Mi vida no puede girar en torno a él.A pocos minutos que él desapareció del apartamento me apresuré a vestirme para irme de una vez, no tenía la intención de esperar a Oliver y menos al imbécil de Noah, ese que se debe estar burlando en este instante de lo fácil que fui con él.***Saliendo de la ducha entro a mi habitación, veo por todos lados y mi bella amiga no está, lo más seguro es que debe estar hab
—Ahórrate tus palabras, no puedes venir aquí sin antes no llamar —mi lado frío sale a relucir, mostrando mi verdadera personalidad—, y tú Norma, no comprendo cuál es tu molestia, me cuesta entenderte.—Eso piensas —cabecea entre sí—, crees que es normal que de la noche a la mañana tengas a uno que otro hombre en nuestro apartamento, ¿dime quiénes son ellos?—¿Te están amenazando? —enarco una ceja, no puedo evitar sacar lo peor de mí, no la estoy tratando, pero si la estoy enfrentando—, puedes darme un momento con él—propongo.El novio se interpone entre nosotras, y sin prevenirlo, él se pone de mi parte diciéndole que es mi vida personal, y que tengo el derecho de que me dé espacio.—Pero…—Vamos, la puedes esperar en la cocina o en su habitación, amor, tenemos que darle su espacio, ella te lo ha dado a ti —concuerdo con las palabras de él y le agradezco porque presentí que las cosas se iban a salir de control.—Amor, ella me…—¿Qué quieres escuchar? —me cruzo de brazos—, lo único que