Xana miraba el rostro de su pareja durmiendo al lado de ella. Pues tenía razón los que le habían dado la sopa la noche anterior. Se sentía completamente nueva y llena de energía. Quizás un poco más de la que estaba acostumbrada y que le gustaría gastar.Llevaba rato despierta dando vueltas en la cama y al final terminó boca abajo, con el rostro sobre su mano y pasando un dedo sobre la mejilla del alfa.-Acaso este no pensará despertarse- murmuró alzando una ceja y después inclinó la cabeza dejando su dedo sobre los labios de White- ¿mis cachorros serán así de bonitos cuando sean grandes?Pudo hablar en voz baja, pero el lobo… que estaba despierto desde el primer movimiento de ella sonrió y abrió su boca mordiendo el dedo de ella. Abrió sus ojos mirando la expresión sorprendida de ella. Chupó el dedo de Xana antes de soltarlo.-Entonces si me encuentras lindo- dijo él acomodándose de lado para mirarla más de frente.-¿No estabas dormido?-¿Crees que puedo dormir si me estás tocando así
El gemido de ambos resonó en la habitación. La cadera y el interior de Xana ardieron y perdió la fuerza cayendo sobre el cuerpo de White temblando. Había… dolido. Ahora recordaba porqué White se tomaba el tiempo para prepararla, dilatarle y meterse con cuidado.-Eres malditamente grande- gruñó contra él con los ojos cerrados y llenándose de lágrimas- ¿por qué no te lo cortas un poco?-Porque entonces no podría llegar hasta donde te guste- dijo White a modo de broma para aligerar el ambiente de tensión entre ambos.Incluso a él le había dolido un poco de la forma en que ella se había dejado caer sobre miembro. Las paredes internas a pesar de estar húmedas estaban apretadas. Ellos no tenían aún tanto sexo para tenerla preparada para él todo el tiempo, y más que ella era humana.Movió sus manos sobre los muslos de ella masajeándolos, así como conteniendo todas sus ganas de moverse y aumentar el placer entre ambos, pero no quería que Xana tuviera dolor. Esperó a que ella misma fuera la qu
A pesar de estar hablando desde hacía rato Celeste sentía que Xana no la estaba escuchando. Sentía no… no la estaba escuchando.-¿Xana? Xanaaaaaa- la llamó y efectivamente, hasta que no le tocó el hombro ella no reaccionó.-¿Qué?- esta se sobresaltó y la miró.-Hasta donde te quedaste de la conversación antes de que te perdieras en tus pensamientos.Xana pestañeó varias veces y una gota de sudor corrió por su sien.-Lo siento Celeste, la verdad es que… no te estaba poniendo atención- sonrió de forma culpable.La mujer hizo una mueca.-Por lo visto el alfa se está encargando de tenerte bien ocupada pensando en cosas relacionadas con él. Nada más hay que saber cómo hueles.Xana se revisó.-¿A qué huelo?-Yo no sé, pero mi pareja antes de irse después de dejarme me comentó que olías al alfa tanto por dentro como por fuerza, si sabes a que me refiero- vio como las mejillas de Xana se volvían completamente rojas de la vergüenza- No tienes por qué avergonzarte. Eres la Luna de la manada, má
White entró por la puerta de su casa estirando los brazos quitando la tensión de sus músculos. A veces tener todo en orden en la manada solía ser agotador, pero él como alfa si quería garantizar la felicidad de su familia y de sus compañeros debía hacerlo quisiese o no. Aunque ahora que estaba en buenos términos con su mate, no… su Luna, la verdad es que deseaba estar en la cama todo el tiempo que pudiese teniendo sexo con ella noche y día.-Creo que estoy pidiendo mucho- murmuró con una leve sonrisa.-¿Ocurre algo, alfa?- le preguntó Sky que caminaba detrás de él.-No, nada, solo que a veces deseo algunas cosas que no puedo tener.Su beta pestañeó confundido.-usted es el alfa de la manada. ¿Qué no podría tener? Si desea se lo puedo comenzar a buscar…-No creo que sexo todo el día y la noche y no salir de mi cama sea algo que se pueda buscar- White le sonrió pícaramente por encima del hombro.-Oh, sí, entiendo- Sky tragó con vergüenza- Disculpe--No es problema, me conformo con lo qu
Aunque le había encantado la imagen de ver a su pareja con sus hijos cocinando, sería la primera y última vez que habrá harina de por medio. Había sido todo un caos poder limpiar todo aquello. Un desastre total para terminar con Sibyl con un enorme puchero porque no se acababa el baño y con Nill llorando porque le dabas asco lo pegajoso que se estaba volviendo todo aquello sobre su cuerpo.Aunque todo el malestar se le pasó cuando el pastel que los tres habían hecho fue traído a su habitación. Pensar que se habían puesto de acuerdo para hacer algo significaba que su relación estaba mejorando. Se sentía realmente feliz de ello pues entonces Xana no se deprimiría o sentiría más culpa.Ahora, si decía algo inapropiado todo podría verse perjudicado, pues los tres lo miraban con demasiada intensidad mientras él tenía un pedazo del pastel en sus dedos. Era un simple bizcocho con mermelada, nada muy elaborado, pero era el hecho que lo habían hecho ellos lo que hizo que le supiera mucho mejor
No fueron tan lejos como Xana pensó. Ni siquiera el alfa y sus cachorros se transformaron, más bien ellos se adaptaron a ella caminando a su lado. Nill de la mano de ella, y Sibyl sobre el brazo de su padre. Tras media hora de caminata y bajar subir una pequeña colina los ojos de Xana se quedaron muy abiertos ante lo que vio.-¿Te gusta?- le preguntó White a lo que Xana tuvo que responder asintiendo con la cabeza.Y como no hacerlo si lo que se extendía delante de ella era un campo de azucenas y rosas blancas que brillaban bajo la luz de la luna. Había luciérnagas volando de un lado a otro y la deliciosa fragancia dulce era exquisita.-Este lugar…--De aquí normalmente seleccionan las flores para las festividades en la manada. Mi padre fue la que creó este lugar para mi madre que siempre le gustaba perfumar la casa con ellas y como terminó siendo tan grande terminó siendo de uso de la manada.-Los humanos solemos dar flores a la persona que nos gusta, al parecer es similar a ustedes.
Xana tenía la mirada perdida en el cielo. Allí, en medio de aquel maravilloso lugar las estrellas se veían increíbles. Tantas que apenas podía contarlas. Se sentía relajada como nunca, satisfecha, su cabeza sobre el brazo del alfa a su lado, que tenía durmiendo a Sibyl sobre su pecho, y ella a Nill. Ambos, después de jugar en exceso se les había mermado toda la energía.-Sabes… cuando era mucho más joven y vivía con Ans, solíamos ir a cazar varias veces al mes. Nos quedábamos por la noche despiertos viendo las estrellas y él me enseñaba sobre ellas.White, que también miraba el cielo giró su rostro hacia ella. Podía notar el brillo de los ojos cuando hablaba de ese humano que la había criado como si fuese una hija. Admiración y cariño que esta vez no lo hizo sentir celoso.-Yo sigo buscando el rastro de él- le confesó y Xana pestañeó girando su rostro hacia él- White le sonrió- No se me ha olvidado, si él sigue vivo lo encontraré para ti.El rostro de Xana se suavizó y una lágrima cor
Xana se sentía desfallecer y a la vez quería que siguiera. Acaso eso era normal.Estaba cansada, le dolían los muslos, la cadera, sus labios estaban hinchados, su vientre lleno, y aun así…-Más- soltó sin darse cuenta solo siguiendo lo que su mente mandaba.Y sus palabras solo provocaron que la cadera del lobo detrás de ella embistiera con más fuerza, enterrándose en su interior. El sonido que se provocaba ante la unión de ellos resultaba igual de obsceno que erótico.Sintió como el cuerpo del alfa se recostaba contra el de ella dejándola acostada en la cama boca abajo, aun sin salir de ella. Una de las manos de él acunó su seno y apretó el pezón sacándole un gemido.-Antes me estabas diciendo que me contuviera- White le lamió su oreja- Pero mírate ahora, estás completamente excitada aun si ya te corriste dos veces. Sigues húmeda, caliente y suave aquí- embistió otra vez sacándole un gemido.Y es que no mentía. Tras correrse la primera vez fue como si un calor en su vientre se hubiera