Dos chicas

MARSHALL

Creo que nosotros estamos tan acostumbrados a vivir en el mismo lugar que cuando salimos de casa o del lugar que nos hace sentir bien no sentimos incómodos, por más que vivamos con personas las cuales tengamos la suficiente confianza ya sean padres, amigos etc. No es lo mismo. Así mismo me había sentido cuando había visitado a mis padres, la confianza entre ellos y yo había desaparecido desde hace mucho tiempo. Era triste, era triste saber que mis propios padres me mentía enviándome a la cara, pero no iba entrar en tallas para eso pues yo ya estaba muy cansado.

Al llegar a la casa pude sentirme tan cómodo, pude sentirme protegido y sentía que era mi territorio, a diferencia de cuando estuve con mis padres.

Mi mansión no era tan lujosa como la mansión de mis padres, pero me sentía cómodo, al fin de cuenta creo que somos felices donde queremos ser felices. Al entrar me había percatado que estaba totalmente vacía lo cual me llamó la atención porque se supone que siempre estaré
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP