Así fue cuando regrese a casa con la ilusión de ver a mi don Juan regresar a las siete de la noche en punto y no solo eso sino en mi propia casa, mi padre se moriría de la pena cuando sepa que un chico como él llegue a traerme, no era la típica cena romántica que tendríamos. Más bien me sentía como un músico pagado. Independientemente lo que llegue a pasar yo ya me daba por satisfecha por el simple hecho de que también había llegado donde jamás lo imaginé. Creo que la vida siempre se encarga de darte una sorpresa que jamás van a pasar desapercibidos. Eso era lo que me había pasado con Gustavo. Ahora no solamente tenía su atención, también tenía un pequeño interés, yo era de las personas que podía notar eso rápidamente y espero no estar muy equivocada.A llegar a la casa mi padre estaba cocinando, parece que había llegado temprano del trabajo lo cual de cierta forma me gustaba. Me gustaba pasar tiempo con él y aunque no éramos la mejor pareja que digamos, nos entendíamos. Por lo gener
El tiempo pasaba y con él también pasaba más el nervio en mi cuerpo. Era la primera vez que me sucedía algo como esto, lo consideraba como un evento súper único. Se trata nada más y nada menos que el chico que me ha gustado desde la infancia, esos chicos que solo en las revistas de Playboy los podré ver. Hoy vendría por mi y ya me imagino cómo estarán mis vecinas cuando venga por mi. Así fue, sin más espera me terminé de alistar para esperar a mi príncipe azul. Aunque pensándolo bien, en este caso debo de ser la cenicienta y debo de hacer todo lo posible para que él caiga entre mis brazos antes de la media noche .—¡Calmate Piper—me dije a mi misma— es hora que salgas de este estado de niña y caigas en la verdadera realidad que te espera—pues era cierto. Solamente era una chica soñadora que estaba delirando con un chico como Gustavo. El siendo como es y viniendo de la familia que es no creo que me tome con seriedad o mucho menos crea que valgo la pena. —Piper—mi padre tocó la puert
Recibí muchos aplausos de parte de su padre y con eso me sentía más que satisfecha. Todo había salido bien. Ellos me habían felicitado por lo bien que lo había hecho. —Ves que no siempre las cosas te pueden salir mal, Piper—Gustavo trajo consigo una copa de vino entre sus dedos—hoy vamos a brindar por la gran visita que tengo en mi casa—me sonroje, todo parecía extraño. —No es para tanto—llevé mi mano a mi boca para no avergonzarme tanto—pero me da gusto que mi melodía es linda para tus padres. —Y no solo la melodía es linda…—añadió mientras me miro con desdén—ven acá—me dijo tomándome de la mano. No sé para donde me llevaba, pero se miraba decidido a enseñar algo o eso fue lo que pude notar con su agarre. —¿Dónde vamos?—quise saber—quizás deberíamos de quedarnos acá, tus padres nos podrían buscar y se pueden desesperar si no nos ven acá—intente convencerlo, pero Gustavo era bastante terco. —Ellos no nos buscarán y tampoco haremos falta—se terminó su copa de un solo trago y la co
Ésa noche me entregué completamente a un chico que ni siquiera conocía, simplemente me atraía y por eso es que había llegado hasta tal extremo, sé que los próximos días serían una cruz para mí porque de una u otra forma estaba conciente de lo que estaba haciendo y era mal.Tampoco sabía cómo iba a reaccionar cuando Viera a mi padre, sabía lo muy conservador que él ha sido durante muchos años y lo que nos ha tratado de inculcar en la familia, por esa parte tenía mucha vergüenza. Así que este es un secreto que jamás le voy a contar, estos son secretos que siempre mantendré hasta los últimos días de mi existencia. Mientras Gustavo seguía dormido yo rápidamente me coloque la ropa porque tenía que regresar a casa, mi padre me había dado permiso tampoco podía aprovecharme de la confianza que le había dado. Inmediatamente me miré al espejo y me di cuenta que ya no era la misma chica de siempre, ahora las cosas cambiarían poco a poco dentro de mí, sólo espero que los camb
—No te preocupes yo sé que el tiempo pasa mucho más rápido cuando hay cosas que hacer y es comprensible que tus padres hayan querido escuchar un poco más de mi hija, incluso yo que soy su padre y le escucho a diario a tocar puedo decir con mis propias palabras que es lo más hermoso que puede pasar en el día después de una larga jornada de trabajo— mi padre se miraba bastante relajado y no entendía porque estaba así, no sabía si estaba esperando que Gustavo se fuera para decirme tantas cosas y tenía vergüenza que le escucharon así que más creo que eso era lo que estaba pasando. No me puedo confiar de mi padre, yo sé muy bien lo que es y sé que no se va a quedar asi. —Bueno, en ese caso señor, yo no tengo más nada que hacer en este lugar simplemente le agradezco por el gesto de haberme dado la oportunidad de que su hija viniera mi casa, compartiremos un poco y lo llenará de felicidad nuestro hogar, si más que añadirle me despido y muchas gracias nuevamente por el bonito gesto, estarem
—Estoy bien—respondo de lo más serena pues. O quiero llamar la atención—solo que por un momento no me sentía bien, tú sabes—sonrió para despistar—he vivido tantas cosas en muy poco tiempo que aún me parece increíble y por supuesto también me llena de un poco de miedo. Asiente. —Si quieres podemos regresar otro día en el cual te sientas mejor—por un momento parecía que en verdad le estaba importando— no nos vamos a morir si no visitamos hoy el bosque. —Por supuesto que no— insistí—tenemos que caminar, yo estoy un poco aburrida en tu mansión— tomé su mano y fue en ese instante que él observó cuando lo toqué, no dijo nada, sólo dejó plantado sus ojos en mis manos. Su piel era muy pálida y fría. Creo que por donde le pusiera la mano se podía sentir muy helado. Y la verdad no estaba mintiendo, estaré en esa mansión está empezando volverme loca, no estaba acostumbrado ese tipo de vida y últimamente sólo eso me pasa, me pasó con Marshall y ahora me pasaba con este sujeto, creo que mi vid
Yo sabía que tarde o temprano tendría que incluso colocar mis labios sobre los de él, tendré que cerrar los ojos firmemente para no darme cuenta de las cosas que estoy haciendo, porque en el fondo no me gusta, a pesar de qué es un tipo muy apuesto y muy guapo, eso no quiere decir que no me guste y más bien sienta un poco de incomodidad cada vez que estoy cerca de él. Cada vez que estoy tocando su piel fría, no sé en qué momento he llegado hasta este punto.—¿alguna vez te han dicho lo puesto que eres?— sí, sé que eso escucho tan horrible como lo has leído, pero dime qué harías tú en mi lugar estando con sujeto que cada vez que sonríe puedo ver sus afiliados colmillos, no sé qué tipo de especie será, pero cada vez que él me mira con esos ojos puedo sentirte en cualquier momento me va a asesinar, es una atracción muy diferente a cualquier relación normal, este sujeto a veces es inexpresivo y ni siquiera se ve con miedos o emociones. —La verdad no, en realidad es la primera vez que al
Tiempo después no supe en qué momento caí en ese profundo de sueño pero lo que sabía es que había aparecido en el cuarto que siempre había estado en la mansión de Dark, creo que no había manejado bien la situación así que ni supe cómo había dejado este lugar y mucho menos de qué forma me trajeron. Por lo que sí sabía es que las últimas palabras que me había dicho y no se me habían borrado por nada del mundo. Eso había perturbado mi cabeza, no sé si dar miedo a mi cabeza o simplemente tenía que aceptar esto. A mi lado había una taza de té junto con algunas pastillas, supongo que esto debió de ser el tratando de ayudarme o algo por el estilo, me levanté poco a poco de la cama tratando de estabilizarme un poco, pero era muy difícil, lo que había escuchado nunca pensé que esto pudiera llegar a pasar. Primeramente pensé que eso de los hombres lobo será mi ciclónica y ahora resulta que también convivo con un hombre vampiro. Qué más me puede dar esta vida, estoy muy acostumbrada aquí a menu