Akira
Nos fuimos a la casa, pero no encontramos rastros de Lin.—¿Ya te ha quedado claro que tuvo que haber sido él, Kaori?—Tenemos que encontrarlos, papá.—Lo voy hacer, y créeme, no será bueno para él.—Ya no más, papá. Tenemos que seguir juntos si queremos que mamá esté bien. No podemos seguir peleando, ambos queremos que regrese con nosotros.—Kaori, yo amo mucho a tu madre y no quiero tenerla otra vez lejos. Estoy harto de que nuestra relación siempre sea así. Quiero tenerla conmigo siempre, poder verla sonreír como antes, poder amarla sin temor a que le hagan daño. Sé que ya es tarde para arrepentirme luego de todo lo que he hecho, pero yo realmente quiero una vida con ella. Que estemos como una familia, así como antes. Fuimos tan felices y todo tuvo que volveLisa2 días despuésDesperté con un dolor y ardor en mis entrañas, mi cuerpo se sentía muy pesado; estaba en una habitación que nunca antes había visto y conectada a una máquina. Mis ojos ardían al ver la claridad que estaba entrando por la ventana. Habían unas flores frescas en la mesa de noche y un vaso de agua. Llevé mi mano a donde sentía ese dolor tan desgarrarante y recordé lo que había sucedido.—Lin, Akira, Kaori… — me senté como pude en la cama, presionando la herida.Escuché la puerta del cuarto abrirse y vi a Kanji.—Lisa...—¿Qué haces tú aquí?—Es una larga historia, pero primero come algo.—No quiero nada, ¿Dónde están mis hijos y Akira?—Tus hijos
Akira—¿Tú me amas, papá?—¿Qué tipo de pregunta es esa, Kaori? —Responde.—Claro que sí, eres mi princesa.—Si te confieso algo, ¿No actuarás por tu cuenta?—Depende.—Tu honestidad no ayuda, papá.—Lo siento, ¿Qué sucede, Kaori?—Quiero que me prometas que no le harás nada a Lin. Si no lo prometes, no te diré nada.—Tiene a lisa, ¿Verdad?—Sí, papá. Se la entregó a Kanji.—¿¡Qué!? ¿Dónde la tiene?—No lo sé — me contó todo lo que le dijo Lin.—Tu madre está en peligro, Kaori. ¡Tenemos que encontrarl
Kaori corrió hacia mí y trató de abrazarme, pero me lastimó.—Lo siento, mamá— me soltó y me agarró las manos—. ¿Cómo te sientes?—Adolorida, pero bien — fijé mi mirada a Akira y se quedó quieto mirándome fijamente.—¿Papá? — Kaori le habló, pero Akira no respondió. Se veía extraño, estaba algo distraído, me puse muy nerviosa al ver su actitud.—¿Tú estás bien, Kaori?—Sí, mamá, estoy bien. Los dejaré a solas para que hablen, estoy segura que tú y papá tienen mucho de qué hablar.—Kaori… — se fue dejándonos a solas.Caminé para el sofá y me senté, necesitaba hacerlo, me dolía mucho estar parada.
—¿Y Lin qué? Lin es parte de nosotros. ¿Cómo vamos a empezar una vida sin él?—Él no va a querer aceptar, mamá, él ya me lo dejó claro; supongo que después de todo tenías razón. Me enamoré de la persona incorrecta, supongo que tengo que pagar ahora, pero no es justo que por mi culpa ustedes sigan separados. Han estado siempre juntos, todo estaba bien hasta que sucedió esto.—La relación de tu padre y mía estaba dañada desde mucho antes, Kaori.—Lisa…—Es la verdad, Akira; aunque te recojas, va a suceder lo mismo, una y otra vez. Aún si dejas esa venganza contra tus hermanos, ellos vendrán por ti y tendremos que seguir huyendo. Aunque quiera creerte y darte la oportunidad, las cosas seguirán igual. Nos han encontrado en todas partes, tienes muchos enemigos. M
Kanji—Quiero que me ayudes, Kanji. Tú, tanto como yo, odiamos a Akira y este es el momento que tanto estuvimos esperando.—No puedo hacer nada contra él ahora. Eso afectaría a lisa y lo menos que quiero es hacerle daño. Por más odio que le tenga, imaginar el golpe que sería para ella, evita que quiera hacerlo.—Ella aprenderá a vivir sin él. De igual manera, en cualquier momento lo van a matar. Tiene tantos enemigos, que no creo que sepa que fuimos nosotros.—Lin, ya lo dije. Si tú no piensas en tu madre y tu mujer, yo sí. Lo mejor será no interferir por ahora.—Ahora que su relación está destruída, si algo le sucede, no será un golpe tan fuerte para ellas. Si él no estuviera en medio, podrías ser tú quien se quede con ella, como siempre debió ser.
—¿Lin? —Kaori trató de acercarse y los hombres le apuntaron a ella.—No te muevas, Kaori — la abracé contra mi pecho.—¿Qué pasa? ¿No te quitarás la capucha?— preguntó Akira.El hombre se quedó quieto por unos instantes y le hizo seña a uno de los hombres a que se le acercaran a Akira.—Tira el arma al suelo — ordenó el hombre al que le hicieron seña. Akira se quedó quieto y no hizo caso a lo que le ordenaron.—¿Eres tú, Lin? — pregunté con ese nudo en mi garganta. Su estatura y cuerpo parecían mucho, no quería creer que realmente era él. ¿Cómo nos puede estar haciendo esto? En especial a Kaori.—Te dije que tires el arma al suelo o los mataré a los tres— ordenó el otro hombre
—¿Hasta aquí puedes llegar con tal de defenderlo, mamá? Sabes lo importante que era mi hermano, y te atreves a mentir de esta forma.—Te estoy diciendo la verdad, Lin.—No le creas a tu madre, fui yo quien lo hizo, Lin— añadió Akira, parándose frente a mi—. Tu odio es contra mi, no contra ella.—Ya no más mentiras, Akira. Es la verdad lo que dije, Lin. ¿No recuerdas que tú mismo me soltaste ese último día que viste a tu hermano? El día que te pedí que fueras a cuidar a Kaori y que por nada del mundo salieras de la habitación, ¿No recuerdas?—No digas más, lisa.—Tu hermano nos tenía secuestradas, Lin. Te usó para que lograras acercarte a nosotros y poder conseguir matar a Akira. Ese era su plan, por eso nos secuestró. Tuve que matarlo
—Pueden matarlo a él si quieren, pero a nosotros no nos van hacer nada— dijo Akira.Vi unos hombres acercándose a las camionetas que llegaron con Lin; hombres vestidos de otra forma, fue cuando alcancé a ver a James en ese grupo y me sorprendí, creí que le había ocurrido algo.—Espero que de esta aprendas a no confiar en nadie, Lin— le dijo Akira en un tono bajo.James y sus hombres comenzaron a disparar, no les dio tiempo a esos hombres de reaccionar. Dejaron a uno vivo y James ordenó a que lo vigilaran.—Busquen por toda la casa que no haya nadie más— le ordenó a sus hombres—. Mi señorita, ¿Se encuentra bien?—¡James!— caminé hacia él, y lo abracé del susto que sentía por toda la situación y por habernos salvado—. ¿Dónde estabas