Cruzo las puertas de la clínica casi corriendo, voy 15 minutos tarde, saludo a la recepcionista y me encuentro con mi mejor amiga y colega Gabriella, somos veterinarias, estoy especializada en cirugía general mientras que Gabriella en medicina felina. Ella es una amante de los gatos.

- Kiara, amiga mia por dios por fin llegas, tienes una cirugía en 15 minutos - me dice Gaby de forma exagerada mientras corre hacia mi y me da un abrazo. - ¿Todo bien con la mudanza?

- Si, todo bien pero agotador, me pase todo el día limpiando y decorando, el lugar era deprimente - respondo mientras amarro mi cabello en una coleta y me pongo mi bata en el área de descanso.

- Te entiendo, es normal ya te acostumbraras al nuevo lugar con el tiempo, pronto iré a ver cómo quedó y por cierto, no hagas planes para el Sábado, iremos a una discoteca a celebrar mi soltería. - me dice Gaby mientras hace un mini baile con su estetoscopio.

- ¿Tu soltería? - le pregunto sorprendida. - Gabriella Capelli llevas soltera más un año, ¿De qué hablas?

- Por eso eso mismo Kiara! - responde con entusiasmo. - soy soltera, libre, hermosa y me puedo coger a cuánto hombre yo quiera, soy una mujeriega o hombreriega? Cómo crees que se dice?. - Pregunta poniendo su mano en el mentón - bueno no me importa pero siempre hay que buscar una excusa para celebrar, el sábado serás mi acompañante, nos buscaremos unos lindos y sensuales hombres en la discoteca, tendremos sexo y después a los tipos no los volveremos a ver nunca más. - Dice Gaby con mucho entusiasmo.

- Gaby, sabes que no soy mucho de discoteca pero te acompañaré e invita a Charlotte, necesito distraerme y luego me ire a casa a dormir con mis perros, no con algún hombre desconocido.

- Ves? Eres tan aburrida a veces, necesitas rodearte de más personas y menos animales, querida amiga - habla Gaby mientras camina a uno de los consultorios. - Ahora, tú vete a tu cirugía y yo me voy a ir a vacunar a un lindo gatito que tiene un dueño demasiado irresistible. Que daría yo para que ese sexy dueño me vacunara a mi.

- Por dios Gabriella estas cada dia más loca y baja la voz que te pueden escuchar. - le digo a mi amiga riendo.

A Gabriella la conozco desde niña, crecimos juntas en Italia, nuestros padres son amigos y cuando decidí que quería venir a estudiar a Estados Unidos ella se vino conmigo y aquí estamos, hasta estudiamos la misma carrera, somos inseparables y espero que nunca me falte.